Las autoridades de La Habana aseguraron que la pelea tumultuaria ocurrida este sábado en la Finca de los Monos, y que dejó como saldo a varias personas heridas, “se está investigando al detalle”.
Así lo confirmó el Noticiero Nacional de Televisión (NTV), en un comentario dedicado a explicar un hecho que calificó de “altercado”, “desorden” y “enfrentamiento” entre grupos de jóvenes, antes de una actividad para adolescentes que tendría lugar en esa institución habanera.
Según lo dicho en el espacio televisivo, la actividad estaba dirigida a menores entre 12 y 18 años, en su organización no participó la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) —como afirmaban publicaciones en las redes— y no había sido “aprobada” por las autoridades municipales y provinciales.
Esto último se debió, apunta el medio oficial, a que la propuesta de la actividad no fue coordinada con el Gobierno “en las reuniones establecidas para ello”, lo que dio al traste con la participación de otras entidades.
Por tal motivo, de acuerdo con el NTV, no había presencia policial ni médica en la Finca de los Monos, ni se contó con otros “apoyos imprescindibles” para el “desarrollo exitoso” del evento.
No obstante, según ha trascendido luego del lamentable incidente, la actividad fue incluso divulgada en la propia televisión estatal y en las redes sociales por sus organizadores, en particular por el grupo creativo Klatus y su proyecto Habanarte.
En su promoción se presentó como una actividad cultural de inicio del verano y un “espacio sano” para el público adolescente, como parte de una jornada “en simbiosis con la Finca de los Monos y el Gobierno del Cerro”, en la que no se comercializarían bebidas alcohólicas ni cigarros.
“Desorden”, “enfrentamiento” y heridos
En una rápida reseña de los hechos —basada, según se dijo, en testimonios de personas presentes—, el comentarista del NTV afirmó que la afluencia de jóvenes al lugar fue “mucho mayor” que la calculada por los organizadores y relató que los hechos violentos ocurrieron fuera de la institución.
De acuerdo con lo narrado, mientras muchos adolescentes hacían la cola para entrar a la Finca de los Monos, dos grupos de jóvenes protagonizaron un “enfrentamiento”, luego de emplear un “tono amenazante” y mostrar “gestos y actitudes intimidatorias”.
El “desorden” resultante fue controlado por la policía, que acudió al lugar en respuesta a “la denuncia ciudadana”, pero luego ocurrió un segundo “altercado”, en la intersección de las calles Albear y Palatino, que también necesitó de la intervención policial.
Como ya había señalado el Gobierno habanero en una nota divulgada en sus redes y en los medios oficiales al día siguiente —cuando ya las redes y medios independientes habían publicado desde hacía horas versiones que hablaban incluso de fallecidos—, el periodista desmintió que hubiese fallecidos como consecuencia de los “enfrentamientos”.
En cambio, el NTV informó sobre los heridos, entre ellos un joven que permanece hospitalizado “fuera de peligro” y quien necesitó de una intervención quirúrgica, y otro, dado de alta luego de ser atendido por “una herida que requirió sutura”.
Además, añadió que fueron “asistidos oportunamente” en un hospital otras cuatro personas no incluidas en la nota del gobierno: un menor de 15 años, y una mujer y dos hombres adultos. De ellos, solo la mujer fue dada de alta, mientras los otros tres “abandonaron la institución de forma irresponsable”.
Investigación en marcha
Según el espacio informativo, que cita a las autoridades habaneras “todo lo sucedido” en la Finca de los Monos “ahora mismo se está investigando al detalle”.
Ese “todo”, precisa el NTV, incluye “desde el procedimiento que se violó y permitió que se desarrollara la actividad sin la debida autorización hasta los sucesos que tuvieron lugar después”.
Además, aunque en su relatoría del “altercado” el periodista no menciona explícitamente el uso de armas —aun cuando en las imágenes en las redes se ve a jóvenes portando machetes—, hacia el final reconoce el empleo de estas entre quienes se enfrentaron en la Finca de los Monos.
“La portación de armas blancas en ese tipo de contexto es delito, el desorden público también es delito, entre otras conductas”, aseveró el comentarista oficial.
También afirmó que en el caso de los menores, “ellos no son responsables, pero sí existen personas que deben y que tienen que responder las actitudes de esos menores”, con lo que presumiblemente apuntó hacia los padres o tutores de los adolescentes involucrados en el hecho.
Finalmente, el noticiero cargó contra “la manipulación mediática”, “la fabricación de mentiras” y el “jugar con la sensibilidad de la gente”, en referencia a publicaciones no oficiales que informaron sobre lo sucedido antes que el Gobierno y según las cuales había varias víctimas mortales.
Los organizadores se pronuncian
A la par de las autoridades habaneras y el NTV, los organizadores de la fallida actividad también se pronunciaron en las redes.
La Finca de los Monos, entidad estatal que desde 2019 funciona como Palacio Tecnológico tras su reconversión por la Empresa de Informática y Medios Audiovisuales (CINESOFT), lamentó “que se haya malogrado un evento tan importante para nuestros adolescentes, pensado con ellos y para ellos”, con “un programa cultural adecuado” y “ofertas gastronómicas económicas”.
La institución negó “rotundamente” la “cantidad de fallecidos o heridos como se menciona en las redes sociales” porque, aseguró, “ni dentro ni en las inmediaciones de la institución hubo lesionados que lamentar”.
De igual forma, reconoció haber subestimado “el poder de convocatoria del evento, realizado en las redes sociales”, porque, dijo, “sobrepasó excesivamente las cifras habituales de asistentes a todas las actividades de nuestro Palacio Tecnológico”.
Además, en su publicación mostró imágenes de numerosos adolescentes haciendo cola para entrar en la actividad, presumiblemente antes de que ocurrieran los enfrentamientos violentos. En las fotos se observan también a hombres encargados de la seguridad, al parecer, sin que quede claro si pertenecen a la institución, fueron contratados para ello o qué rol tuvieron durante los hechos.
Por su parte, Araiz Torres, quien estuvo entre las organizadoras y promotoras de la actividad, por la parte del proyecto Habanarte, lamentó lo sucedido y sostuvo que “se subestimó el poder de convocatoria de las redes y el alcance de la necesidad que tienen los adolescentes de propuestas como estas”.
A la vez, afirmó desconocer que la actividad no había sido autorizada por el Gobierno y confirmó que la misma se había promocionado en los medios de manera “consentida”.
“Nunca se informó que no se había autorizado, ni que estaba suspendida, así que, además, falló la comunicación institucional a todos los niveles, porque todos los implicados estábamos ahí para su realización con total desconocimiento, después de una promoción nacional consentida”, escribió. “Nuestros adolescentes siguen sin opciones y hemos olvidado atemperarnos a las necesidades actuales y a las dinámicas actuales, es más fácil ampararse en la burocracia”, lamentó.
“A mí me queda la tranquilidad de que se informó por escrito”, señaló, al tiempo que dijo “que se protegieron a los adolescentes participantes que estaban dentro de la instalación que eran más de 400, que se detuvo inmediatamente el acceso a la institución, cuando responsablemente vimos que el público ascendía de forma exponencial”.
“Siento pena ajena y no voy a renunciar a un mundo mejor posible”, concluyó Torres, quien su propio escrito se define como “emprendedora” e “independiente”, y agradece el apoyo recibido por sus alumnos y amigos luego de los lamentables sucesos en la Finca de los Monos.