Estudian efectos de vacuna cubana contra el cáncer de pulmón en convalecientes de la COVID-19

Un segundo estudio, llevado igualmente adelante por el Centro de Inmunología Molecular (CIM), evaluará el papel del ior®EPOCIM (eritropoyetina humana recombinante) en personas que padecieron la enfermedad infecciosa y quedaron con diversas secuelas.

Vacuna terapéutica cubana contra el cáncer de pulmón. Foto: Yander Zamora / Archivo.

Vacuna terapéutica cubana contra el cáncer de pulmón. Foto: Yander Zamora / Archivo.

Los efectos de la vacuna terapéutica cubana contra el cáncer de pulmón CIMAvax-EGF en convalecientes de la COVID-19 serán estudiados en un ensayo clínico desarrollado por el Centro de Inmunología Molecular (CIM) de  Cuba.

Un segundo estudio llevado adelante por esta propia institución científica evaluará el papel del ior®EPOCIM (eritropoyetina humana recombinante) en personas que padecieron la enfermedad infecciosa y quedaron con diversas secuelas como resultado de la dolencia.

El primer ensayo, denominado CORVAXCIM, busca medir la seguridad y el efecto de CIMAvax-EGF en convalecientes con trastornos respiratorios luego de la infección por SARS-CoV-2, según explicó la Dra. Mayra Ramos Suzarte, jefa del departamento de ensayos clínicos del CIM.

La experta precisó que la investigación es un ensayo fase II multicéntrico, controlado, abierto, aleatorizado y dividido en dos grupos: uno que recibe la vacuna y la mejor terapia estándar establecida para las secuelas respiratorias y el otro que solo recibirá dicho tratamiento, según refiere la Agencia Cubana de Noticias (ACN).

Los investigadores del CIM aspiran a detener la progresión o evitar las fibrosis pulmonares derivadas de la COVID-19 con la administración de ocho dosis del fármaco durante seis meses. Los convalecientes participantes deben ser mayores de 18 años, haber enfermado al menos dos meses antes del inicio del ensayo y presentar síntomas respiratorios y dificultad al caminar largas distancias, en tanto no pueden ser mujeres embarazadas o lactando, tener tratamiento de diálisis o hemodiálisis, o padecer otras enfermedades crónicas graves.

La prueba prevé la inclusión de 135 personas, una cifra que pudiera crecer si el estudio es abierto en todas las provincias. De momento, la inclusión esta abierta en instituciones hospitalarias de La Habana, Cienfuegos, Villa Clara, Camagüey, Holguín, Guantánamo y Santiago de Cuba, a las que se une el hospital Abel Santamaría de Pinar del Río, en el caso del segundo ensayo clínico.

Este último, denominado COREPOCIM, busca evaluar la efectividad y eficacia del ior®EPOCIM en convalecientes de infección por el coronavirus con trastornos cardiovasculares, renales y/o respiratorios, con el propósito de frenar el daño pos-COVID-19 o disminuir las secuelas, apunta la ACN.

Se trata, como en el primer caso, de un ensayo fase II, multicéntrico, controlado, abierto y aleatorizado, con un grupo al que se le aplicarán cinco administraciones del fármaco y un segundo grupo que recibirá la terapia convencional para este tipo de convalecientes.

El despacho noticioso cita a la Máster en Ciencias Yanelda García Vega, jefa de Grupo de Ensayos Clínicos con anticuerpos monoclonales del CIM, quien comentó que este estudio “cumple criterios de inclusión y exclusión similares a los de CORVAXCIM, pero se adiciona que los sujetos deben presentar secuelas como dolor en el pecho, ritmo cardíaco acelerado, falta de aire, tos, dificultad al subir una escalera o loma y para caminar largas distancias, así como cambios en la orina”.

A estos síntomas se suman también “piel seca y que pica, hinchazón de manos o pies, bolsas alrededor de los ojos (sobre todo por la mañana), falta de aire y concentración, dolor en la parte baja de la espalda, hipertensión arterial, poco apetito, náuseas y vómitos, problemas para dormir y calambres por la noche”, concluyó la experta.

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