En 2018 Etecsa instalaría más de 52,000 nuevos servicios de Internet en los hogares cubanos, en los cuales ya conectan unos 27,300 usuarios desde que se ampliara hace un año esta modalidad, según el diario Granma.
Hay planes de abrir otros 150 puntos wifi en espacios públicos y salas de navegación –hoy exiten unos 1,550 espacios de este tipo, entre las dos modalidades– y contratar 5,000 servicios más de datos móviles, hasta ahora solo disponibles para empresas estatales, dijo Mayra Arevich, presidenta ejecutiva de la empresa durante la XVII Convención y Feria Informática 2018.
El evento abordó la informatización de la sociedad cubana, gobierno electrónico, atención ciudadana y despliegue de la Televisión Digital en Cuba.
Según Arevich, próximamente se extenderá a todos los usuarios el servicio de Internet en los móviles, antiguo reclamo de los cubanos, quienes aún acceden a una conexión cara y en muchos casos lenta.
Cuba aplica un programa de desarrollo de las telecomunicaciones impulsado por el gobierno, que incluyó en una primera etapa la apertura de puntos wifi en 2015, que hoy son 630 en plazas y parques públicos.
Desde el comienzo, los usuarios se han quejado por la falta de condiciones en los lugares de conexión y las tarifas iniciales de 2,5 CUC por hora, que se fueron abaratando gradualmente hasta 1 CUC actualmente.
En marzo de 2o17, después de una prueba piloto de cuatro meses, Etecsa comenzó a comercializar el llamado Nauta Hogar, que luego de ser ofertado solo en La Habana, se extendió en septiembre a otras provincias.
Los precios del programa Nauta Hogar oscilan entre los 15 y los 70 dólares –en función de la velocidad– siempre por 30 horas mensuales. Es un servicio muy caro en un país donde el salario mensual promedio no sobrepasa los 30 dólares.
“Hoy La Habana cuenta con cobertura total de la 3G y se trabaja en las cabeceras provinciales, municipales y otras localidades del país para un 47 por ciento de cobertura estimada. Este año debe comenzar la implementación del Internet a través de la telefonía celular”, dijo Arevich.
En 2017 Etecsa activó 600,000 nuevas líneas móviles en Cuba. Hay un total de 4,6 millones, cifra que la empresa espera incrementar a más de 5 millones este año.
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Televisión digital
Desde la introducción de la televisión digital terrestre (TDT) en Cuba en 2013, la Isla empezó a prepararse para el apagón analógico. Aquel experimento temprano arrancó por La Habana y poco a poco llegó a las capitales provinciales.
La venta de cajas decodificadoras comenzó en 2013 y se han comercializado más de 1 millón 966 mil receptores, dijo Wilfredo González, viceministro de Comunicaciones. Según Cubadebate, hasta 2017, eran más de 1 millón y medio cajas decodificadoras y el resto televisores híbridos.
La extensión de la televisión digital, dijo el viceministro González, “continuará de manera paulatina”.
El 2017 cerró con alrededor del 60 por ciento de cobertura de TDT. Según esta cifra, 7 millones de cubanos podrían recibir la señal en definición estándar y otros 3 millones la pudieran ver en alta definición. Pero en algún momento la televisión analógica pasará a la historia. Este último paso no será repentino, sino que puede durar hasta seis años y ocurrirá por etapas.
Para realizar el apagón hay varias estrategias: ir apagando totalmente regiones o apagar solo un canal. Aparentemente la segunda es la más factible. El primer canal apagado será el Educativo que produce gran parte de su contenido para las escuelas.
El apagón parcial tendría etapas de acuerdo con las posibilidades de los centros educacionales para recibir la señal digital. La primera iniciaría, seguramente, a partir del segundo semestre del año. Las dos restantes etapas de este apagón parcial llegarían en 2019.
Dentro de su proceso de informatización, el Gobierno cubano también trabaja en la digitalización de los registros públicos, la puesta en marcha de la banca móvil y pasarelas de pago, prestaciones novedosas en un país donde aún predominan casi exclusivamente las transacciones en efectivo.
EFE / OnCuba