Mientras el mundo se lanza ya a la carrera de la 5G con las principales compañías telefónicas como protagonistas, en Cuba avanza poco a poco la expansión de la 4G a menos de un año del inicio en la Isla de la conexión a internet en los teléfonos móviles.
Carlos Blanco, especialista de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (Etecsa), afirmó que la entidad estatal “trabaja para el desarrollo de la 4G en los próximos años”, a pesar de que el embargo de los Estados Unidos “causa un atraso y lentitud en el avance de este medio informático de comunicación”.
Blanco aseguró a la agencia Prensa Latina que la 3G “ya está implementada en todas las cabeceras municipales cubanas” y se continúa trabajando en su difusión y en la de la 4G, que comenzó a probarse este año en algunas localidades de la Isla, como La Habana, Varadero, Cárdenas, Mariel y Bayamo.
El especialista comentó que la nueva tecnología “se extenderá una vez que se llegue al apagón analógico”, que se realizará de manera gradual y cuyo cierre, previsto incialmente para 2021, se extendió dos años más. Ello se debe, según Blanco, a que la señal necesaria para la 4G está ahora ocupada por transmisores que están en función de la señal analógica.
“Una vez esa señal se apague, se liberarían frecuencias y, por ende, habría una mejor conexión por banda ancha”, explicó.
Próximo acuerdo entre Google y Etecsa para “cuando las condiciones técnicas lo permitan”
Desde el punto de vista técnico, para poder acceder a la 4G en Cuba es necesario tener una tarjeta USIM y un teléfono que soporte esta tecnología en la frecuencia de 1.800 megahertz.
Actualmente, Etecsa trabaja en la implementación de redes de cuarta generación en otras ciudades como Guantánamo y Ciego de Ávila, donde ya han comenzado a realizarse pruebas en algunas zonas.
Además, Blanco aseveró que a la par la empresa también se prepara para la futura introducción en Cuba de la 5G, la que, en su opinión, “implica nuevas prestaciones, tipos de modelos de negocios y una mayor calidad en el servicio a los clientes”.
No obstante, dijo que su introducción en la Isla es “compleja” pues “requiere de cambios como un mayor despliegue de sitios de acceso en toda la geografía y de transporte de la red de datos a nivel nacional, una actualización de todas las plataformas y sistemas a nivel de los principales nodos, así como de la aprobación de los espectros a utilizar”.
Esto se debe a que las redes de 4G que se instalan en Cuba “no cuentan con el ancho de banda suficiente para la gran cantidad de datos que los dispositivos 5G transmitirán por sus ventajas y transformaciones del escenario sociodigital que propiciará”.
Luego de años sin acceso masivo a Internet, las autoridades cubanas promeven una mayor conectividad en la Isla como parte de la estrategia gubernamental de “informatización de la sociedad”. Como parte de la misma, Etecsa –única de su tipo en el país– comenzó a ofrecer el servicio de Nauta Hogar, que permite el acceso en casas particulares, y la conexión a través de datos móviles utilizando principalmente la tecnología 3G, que es usada por miles de cubanos a pesar de sus precios elevados y que aún sufre problemas con frecuencia.