Matanzas, la ciudad que mira a la mar, ubicada en la costa norte de la Isla de Cuba, a 100 kilómetros de La Habana, es conocida como la ciudad de los puentes y los ríos, de los poetas y también de los muñecos. Desde 1994, se celebra allí el Taller Internacional de Títeres (TITIM), una fiesta escénica con carácter bienal, que bajo el auspicio inicial del Teatro Papalote, ha ido sumando otras instituciones culturales y sociales de la villa para ofrecer en cada edición un panorama teatral y teórico que incluye espectáculos, exposiciones, conferencias, libros, conciertos y talleres para profesionales y aficionados del arte de los retablos.
Personalidades y agrupaciones del universo titiritero venidos desde todas las Américas (norte, centro y sur), Europa, Asia y África, han acudido al evento cubano año tras año para vivir con los artistas y la población nacional esa manera particular, mezcla de color y ritmo, melancolía y felicidad que poseen los nacidos en el Caribe. En abril se convoca la nueva cita, la primavera tropical ofrece un clima propicio para intercambiar con los titiriteros no solo en el espacio íntimo de la sala-teatro, sino en parques, calles y plazas. Toda la ciudad se convierte en un retablo gigante, con extensiones a poblaciones cercanas, provincias colindantes y actividades en la capital del país.
Veinte años convocando la magia de los personajes de tela, papel y cartón desde las tendencias más tradicionales a la vanguardia más reacia, permitió al Taller obtener la sede del Consejo Mundial de la Unión Internacional de la Marioneta (UNIMA) en 2014, el cual reunió a participantes venidos de todo el planeta. La 11na. edición del TITIM tendrá su celebración entre el 19 y el 24 de abril de 2016, y será la ocasión ideal para celebrar los 60 años de Pelusín del Monte, títere nacional creado por la escritora Dora Alonso junto a los míticos hermanos Camejo y Carril, así como recordar la influencia benefactora que produjeron en el teatro de figuras del continente americano las presencias de los poetas y dramaturgos Federico García Lorca (España) y Javier Villafañe (Argentina).
