Cuba regresará del Campeonato Mundial de boxeo de Ekaterimburgo, Rusia, con un botín inferior al que esperaba, luego de que el estelar semicompleto Julio César La Cruz perdiera en semifinales y dejara en dos las posibilidades doradas de la Isla, que tendrá en competencia por el cetro a Andy Cruz y a Lázaro Álvarez.
La Cruz, uno de los pugilistas más seguros de la escuadra, sucumbió en la lucha por el pase a la final frente al kazajo Bekzad Nurdauletov, quien dominó con pizarra de 4-1 y entró en la historia como el hombre que cortó la racha triunfal de “La Sombra” en citas del orbe.
El camagüeyano había sido infranqueable en estas lides desde el 2011, cuando conquistó en Bakú su primera corona universal. La racha continuó en Almaty 2013, Doha 2015 y Hamburgo 2017, donde se posicionó junto a Juan Hernández Sierra como el segundo boxeador amateur con más primacías universales.
Cuban light-heavyweight legend Julio Cesar la Cruz pipped in his drive for five at the World Championships, split decision defeat to Kakakhstan’s Bekzad Nurdualetov, who fought him brilliantly pic.twitter.com/NmFy55KIrW
— Kevin Byrne (@KevByrneBox) September 20, 2019
Ahora en Ekaterimburgo superó sin objeciones a Mohamed Houmri (Argelia), Gaëtan Ntambwe (Francia) y Georgy Kushitashvili (Rusia), pero no pudo en semis con Nurdauletov, incómodo kazajo que le planteó una pelea bien cerrada.
“No me siento contento porque no me gusta perder”, sentenció La Cruz al colega Roberto Ramírez poco después del combate. “Los árbitros lo vieron ganar a él, pero fue una decisión injusta. Creo que fui vencedor y me quitan mi quinta corona mundial.”
El pugilista cubano dijo que salió un poco dormido, probablemente por un ataque gripal provocado por el cambio de tiempo, aunque señaló que fue creciendo a medida que avanzó el duelo.
“Hice lo que indicaron desde la esquina, fui levantando el combate, vine de menos a más y terminé arriba. No me vi perder”, apuntó La Cruz, titular olímpico de Río 2016.
A pesar del fracaso, el agramontino consideró que estas son cosas propias del deporte; se puede ganar y perder. “El muchacho tiene calidad, es joven, pero queda carretera por caminar”, concluyó en sus declaraciones.
Antes de afrontar las semifinales, La Cruz había asegurado que eran sus rivales quienes debían estar preocupados. Tras esta derrota, se queda por debajo de su propio pronóstico: escalar a lo más alto del podio.
“No vine a otra cosa que a llevarme el quinto título”, había expresado días atrás el cubano, quien se ha quedado en bronce, un pequeño toque de atención a menos de un año de los Juegos Olímpicos de Tokio, donde será una de las cartas principales de la delegación de la Isla.
La caída de La Cruz supone un mazazo duro para la comitiva antillana en el Mundial de Ekaterimburgo, el cual se esperaba saldar con tres coronas, según el pronóstico del jefe técnico de la escuadra, Rolando Acebal.
Ya esa cifra es inalcanzable, pues en el camino también quedaron Yosbany Veitía y Roniel Iglesias, ambos en segunda ronda, mientras Arlen López y Erislandy Savón cayeron en cuartos de final.
Las únicas opciones de título de Cuba son Lázaro Álvarez, tres veces monarca del orbe y plata en la pasada edición de Hamburgo y Andy Cruz, titular hace dos años en la urbe alemana.
“El Príncipe” vueltabajero dirimirá la corona contra el uzbeco Mirazizbek Mirzakhalilov, mientras su coequipero yumurino cruzará guantes con el estadounidense Keyshawn Davis, duelos en los que, a juzgar por el gran nivel que han mostrado en Rusia, salen como favoritos.