En la madrugada de este sábado, el clavadista cubano Luis Gustavo Cañabate Álvarez sufrió un accidente por caída en la Escuela Superior de Formación de Atletas de Alto Rendimiento (Esfaar) “Giraldo Córdova Cardín” y se encuentra hospitalizado en estado crítico, según informó este sábado el portal especializado JIT.
La nota del portal oficial del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder) explica que joven atleta camagüeyano (cumplió 19 años hace un mes) fue trasladado de inmediato al Hospital Militar Central “Luis Díaz Soto” (Naval), desde donde se decidió su remisión al Hospital Pediátrico Docente “Juan Manuel Márquez”, donde ha sido reportado como “politraumatizado en estado crítico”, aunque se mantiene consciente.
La información no especifica en qué circunstancias se produjo la caída, pero podemos inferir que no fue en ninguna práctica de clavados, pues todo aconteció en horas de la madrugada.
Directivos de la Esfaar, del Inder, del Instituto de Medicina del Deporte y especialistas de la disciplina han estado todo el tiempo junto al atleta en las instalaciones hospitalarias, y se espera que su familia llegue desde Camagüey en las próximas horas para acompañarlo.
“Contarán con las condiciones necesarias para estar a su lado”, puntualiza la información de JIT, en la que aseguran que ofrecerán más detalles sobre la evolución y su estado a través de los partes médicos y con el consentimiento de sus familiares.
Cañabate es uno de los mayores talentos del clavados en Cuba, que busca la reinserción en la élite tras el recambio generacional de los últimos años. En el 2021, conquistó la medalla de plata en la plataforma individual masculina durante los Juegos Panamericanos Junior celebrados en Cali-Valle, Colombia, donde también ganó el oro en la prueba mixta junto a Anisley García, Carlos Daniel Ramos y Laydel Domínguez.
En este 2022 dio muestras de constante progresión al anclar en la sexta posición de la plataforma sincronizada en el Campeonato Mundial de mayores de Budapest, Hungría. Cañabate apuntaba a ser una de las principales cartas de Cuba de cara a los Juegos Centroamericanos y Panamericanos del próximo año, pero ahora todo eso queda en un segundo plano: lo imprescindible es salvar su vida.