Se llama Yohana Álvarez pero el público la conoce como Sheena. Tiene una imagen sensual, pero sabe que el éxito depende mucho más del talento y la perseverancia.
Desde su infancia tomó el camino de la música y a partir de entonces ha buscado destacar en el competitivo universo artístico de Cuba. Es cantante, compositora, realizadora de videos clip e incluso ha sido conductora de programas televisivos.
Sheena se dio a conocer como integrante del grupo Los que llegaron primero y –sobre todo– en la orquesta Anacaona. Pero finalmente decidió hacer carrera como solista, defendiendo un estilo que tiene como base el pop fusionado con la música urbana contemporánea y ritmos tradicionales cubanos.
Esta nueva etapa va siendo, en su opinión, “mucho más compleja de lo que imaginaba”, pero dice sentirse más segura y preparada para lograr sus objetivos. Sobre este momento de su carrera, la joven artista comentó a OnCuba.
¿En qué se diferencia la Sheena de hoy de la que pasó por Los que llegaron Primero y Anacaona?
Son tres etapas muy diferentes. Los que llegaron primero era un cuarteto vocal de un estilo más light, más juvenil, y en esa dirección enfocaba su música. En cambio, Anacaona trabaja para un público más amplio, para los bailadores en general.
Cuando llegué a esa orquesta no tenía experiencia en ese tipo de música. La directora me dio la oportunidad de aprender a tocar un instrumento de percusión menor como el güiro; también aprendí a hacer voces, a bailar el son. De esta forma, fui ganando las herramientas necesarias para enfrentarme a un público bailador tan exigente como el de Cuba.
Gracias a Anacaona absorbí la energía que da trabajar diariamente en las plazas más importantes del país. Eso me exigió una rigurosa preparación y me dio esa chispa que se necesita para estar frente a un auditorio. Esta agrupación fue mi escuela y siempre agradeceré a Georgia Aguirre por darme la oportunidad de trabajar en esa orquesta emblemática de la música cubana.
Ahora me siento un poco más madura para encarar la música. Sé lo que quiero y me siento más segura a la hora de escoger el rumbo de mi carrera. Además, como solista he podido interpretar mis propias canciones, algo a lo que tenía muchísimo miedo, no sabía cómo el público podía reaccionar, pero gracias a Dios estoy teniendo unas experiencias increíbles.
El panorama musical de Cuba es muy competitivo. ¿Cuál es tu fórmula para merecer el aplauso de un segmento del público cubano?
No tengo una fórmula exacta para que el público se identifique con el trabajo que estoy haciendo. Lo que sí puedo decir es que ha sido un período de mucho trabajo, de mucho esfuerzo y creación, en el que me he entregado al máximo para ofrecer un trabajo con una buena factura.
Creo que les he llegado a mis seguidores porque he tratado de ser lo más sincera y natural posible en esta etapa de mi carrera. 2017 ha sido un año de tremenda energía: me aprobaron mi primer disco como solista con la disquera EGREM con la producción musical de Andy Rubal y Nando Pro; he podido estrenar nuevos temas y videos clip. Creo que toda esa energía he logrado transmitirla al público.
¿Qué te propones como artista? ¿Tienes alguna “filosofía” para asumir tu trabajo?
Pienso que los géneros son relativos. El artista tiene que intentar imprimirle su sello a lo que hace y mantener una media. Puedes hacer temas para cualquier tipo de auditorio sin extralimitarte de los cánones, para que lo puedan consumir diversos públicos.
Soy una artista que pretende seguir nuestra rica herencia musical pero sin dejar de lado las preferencias del público. A fin de cuentas, el público es el mejor medidor de nuestro trabajo. Trato de ser muy cuidadosa con los temas de mi repertorio y siempre busco que aunque sean bailables también incluyan un mensaje positivo.
El público cubano te conoció inicialmente como cantante pero también has incursionado en la conducción y la realización audiovisual. ¿Por qué?
La vida del artista es una escalera en la que uno va escalando peldaños. Al salir de Anacaona sentí la necesidad de experimentar otras facetas como la actuación y la conducción. Y creo que fue una experiencia importante para mí.
Un día un amigo me dijo si me gustaba tanto la fotografía porque no me embullaba y realizaba un videoclip. Tuve la oportunidad de hacerlo y desde entonces he seguido. Estoy doblemente feliz porque durante varios años me he mantenido dentro del programa Lucas como cantante y como creadora audiovisual, y ambas facetas son importantes para mi realización artística.
¿Y el futuro?
Muchos planes, muchos deseos, seguramente mucho trabajo. No sé si todo podrá concretarse pero estoy segura de que voy a intentarlo.
https://www.youtube.com/watch?v=UjKMAFPJnYk
Se hace llamar Sheena, y en el video lo escriben como Shiina… aplausos al factor “a lo como quiera” jajaja. Yo la conozco del barrio. Bueno… del ex-barrio. Ella nació en Lawton y su padre era profesor de física en la secundaria Félix Varela.