Athanai Castro logró grabar su primer álbum con una disquera cubana después de casi 30 años de carrera. Se trata de Regresar, un fonograma que le permite recorrer diferentes pasajes de su vida con la misma honestidad y coherencia creativa que han sido como una marca de la casa desde sus inicios.
El álbum lo publicó con Bis Music y lo presentó recientemente a teatro lleno en el Museo Nacional de Bellas Artes. Athanai alcanzó notoriedad en los años 90 por su fonograma Séptimo Cielo, un documento generacional que vio la luz en España y que ha acompañado a sus seguidores hasta hoy.
Tras su regreso a La Habana hace unos 3 años, ha salido con todo para recuperar su público y conquistar a todos los que no conocían su música asaetada por varios himnos que han definido como pocos ese complejo país que es Cuba.
Regresar lo ha presentado en varios escenarios de la capital. Luego de estrenarlo en Bellas Artes llenó la Fábrica de Arte y puso a cantar a cientos que no pararon, ni siquiera en medio de un inesperado corte de electricidad.
Ahora el cantautor llegará el 27 de enero a las 6:00 p.m. al Pabellón Cuba con sus canciones sobre la espalda para defender su nueva obra, que ha merecido elogios de figuras que no son muy dadas a ponderar sin base el trabajo de ningún creador; entre ellas Pablo Milanés y Carlos Varela.
Athanai asegura que Regresar es una vuelta a sus orígenes. “Este disco es un rencuentro conmigo mismo, con mi estilo de cantautor, con esa zona de mi creación que había descuidado.”, dice a OnCuba.
“En el mundo de la música está imperando lo comercial. Casi nadie se está lanzando a crear propuestas originales. El mercado impone sus normas y celebra géneros más sencillos. Para mí se trata, ante todo, encontrarme con mi sonido y ser fiel a mi obra”, agrega.
El músico ha anunciado su show como un concierto lleno de grunge. Y viniendo de Athanai hay que prestar mucha atención a sus palabras. Así que en su próxima presentación no solo podremos repasar ese “planeta Cuba” que mencionaba Santiago Feliú, sino también todo ese movimiento contracultural que nació en Seattle, se esparció como la pólvora por todo el mundo y que tiene en Athanai a uno de sus hijos más aventajados en la isla.