El Havana World Music (HWM) hace tiempo dejó de ser solo un festival para convertirse en un fenómeno social entre los melómanos. Marcado por una búsqueda constante del intercambio y encuentro, el evento defiende ante todo una cultura diversa y mestiza a la imagen de la Cuba de hoy.
Tres días de música del mundo para el mundo, donde público de varias culturas, géneros y edades disfrutan de su cartera de artistas desde aquella primera vez en 2014. Hoy el HWM suma un total de más de 50,000 asistentes, rompiendo récord con 18 mil personas en su última edición.
Cada año el Parque Metropolitano de La Habana se colma de gente para asistir al mayor festival alternativo del Caribe, con más de 100 artistas de 30 países que han ayudado a consolidarlo como un referente para los amantes de los buenos sonidos.
Eme Alfonso, su directora artística, tuvo esta idea a partir de su proyecto Para mestizar. En los inicios solo fue eso: un proyecto de diversidad cultural que fue develando poco a poco una carga ancestral riquísima en la cultura de Cuba. Y así nació un video de 4 minutos, luego una plataforma muy básica, y un pequeño primer festival con algún artista extranjero que compartiera y colaborara con músicos cubanos.
Arrancó entonces aquel mítico 1er Havana World Music en el Centro Recreativo J. A. Echeverría donde los jóvenes acudieron en masa y los organizadores se dieron cuenta que algo muy importante tenían entre manos. Era hora de tomárselo en serio.
“Desde entonces hemos evolucionado poco a poco. Luego nos fuimos al Parque Metropolitano y esa ha sido nuestra sede todos estos años. Así hemos ido creciendo al punto de tener un público de 18 000 personas los tres días, que se dice fácil, pero es muchísimo para un festival solo en La Habana, y de música alternativa, donde no hay música popular y la mayoría de los grupos que tocan no son conocidos”, dijo Eme Alfonso a OnCuba.
El equipo se dio cuenta de que el evento era una necesidad en la escena musical cubana y han intentado suplirla a su forma en cada edición. “Encontramos que esa necesidad existía sobre todo entre los jóvenes que están consumiendo cada vez más la misma música globalizada, hecha de una sola manera. Nosotros solo hemos puesto nuestras herramientas sobre la mesa y han sido consumidas de una manera tremenda”, añadió Alfonso.
El HWM está estructurado por cuatro personas de diferentes latitudes. La parte artística es de Eme, la Comunicación corre por la española Raquel Ávila, el Director General y Coordinador es Ismael Sayyad, y los Asuntos legales los lleva el noruego Erlend Skutlaberg. Una mezcla que concentra mucha experiencia en tema de festivales y que se amplía a un equipo de producción que crece año tras año. Todos están apoyados en las instituciones cubanas, único método posible hasta el momento para realizar un festival de esa magnitud en la Isla.
La selección de los artistas que participarán en cada edición es bastante rigurosa porque se busca “que la banda que pase por los escenarios deje una huella en la juventud cubana –agregó Eme–. No me interesa que sea únicamente música folclórica, sino que tenga un lenguaje común y diverso para que el público joven la reciba. Tienes que tener mucho cuidado a la hora de escoger los artistas, y por tanto estos tienen que tener una propuesta interesante para los cubanos sí o sí. Cuando tú dices Habana todo el mundo quiere venir. Nosotros no buscamos a los artistas, es increíble, ellos nos buscan a nosotros”.
El equipo se prepara para una 6ta edición marcada por muchos momentos especiales. Desde el 21 y hasta el 23 de marzo subirán a los escenarios del Parque Metropolitano cerca de 20 artistas de casi 10 países. Un Line Up estable y confirmado desde diciembre pasado.
Estamos hablando del regreso a los escenarios cubanos, luego de 20 años, de la banda estadounidense Ozomatli, una de las más importantes de la década de los 90 en los Estados Unidos, que presenta una mezcla de salsa latina, hip-hop urbano y jazz-funk. Además, “Francisco El Hombre” que traerá al festival el ritmo brasileño, y para repetir presentaciones en la Isla subirán a los escenarios el haitiano-canadiense Vox Sambou y los raperos Nomadic Massive.
Por otra parte, están Diego Guerrero (ES), Mental Abstrato (BR), Korean Man (KR), iLLBiLLY HiTEC (DE) y Lengualerta (MX), Barry Paquin Roberge (CA), Les Deuxluxes (CA) y Monsieur Doumani (CY). Y por la parte cubana destacan Yissy y Bandancha, Telmary, R.O.I., Cimafunk, Kumar y la propia Eme Alfonso que presentará nuevamente su más reciente producción discográfica Voy.
Esta 6ta edición propone nuevamente el proyecto Women of the World, donde mujeres de distintas latitudes, llegan interpretando diferentes géneros, unidas por la música. Ahora las protagonistas serán Renu (Gran Bretaña), Ëda (Francia-Colombia) y Leyanis Valdés (Cuba).
Vuelve también el proyecto Para Mestizar, asegurando la presencia de la música tradicional cubana. Y para ello, desde lo más profundo de las raíces guantanameras llega Nengón Kiribá, y con su mundialmente conocida rumba cubana estarán los Muñequitos de Matanzas.
Dentro del HWM, se realiza el concurso para jóvenes talentos “Primera Base”, una convocatoria abierta para jóvenes músicos sin compromisos discográficos de toda Cuba. Por primera vez el concurso tiene alcance nacional y representa, sin dudas, una oportunidad. Los ganadores formarán parte del cartel del HWM, y uno de los temas de este concierto se grabará (video + audio) para realizar un video promocional que les será entregado como premio.
Este marzo de 2019 convoca nuevamente a un festival muy diverso en todos los sentidos. Eme Alfonso confiesa además algunas novedades que llegarán por la línea gastronómica: “algo súper lindo de este año es que vamos a dar una pincelada de comidas del mundo. Invitaremos a varios negocios que están dejando huella aquí en La Habana con sus ofertas gastronómicas de China, India, Líbano, etc. Esto lo vamos a ir desarrollando para potenciar el mercado local que es vital y yo lo defiendo mucho. Creo que es importante porque un festival no solo es música”.
La idea de los organizadores es expandir el evento y que se parezca cada año más a los festivales del mundo, sin perder nunca su esencia ni sus raíces. Ese es el propósito de esta edición, y para ello desfilarán bandas nacionales e internacionales fusionando sus raíces con un lenguaje musical moderno. Bienvenida sea entonces la música del mundo a Cuba.