El Gobierno cubano se refirió por primera vez este miércoles a la victoria de Donald Trump en las recientes elecciones de Estados Unidos y aseguró que “el país está preparado” para un nuevo mandato del republicano.
Durante una visita al municipio cienfueguero de Lajas, el presidente Miguel Díaz-Canel apuntó que los resultados de los comicios “no son nuevos” y eran un “escenario previsto” por las autoridades de la isla.
“Era un escenario probable y nos veníamos preparando para ese escenario”, dijo Díaz-Canel en un intercambio con pobladores, transmitido por la televisión.
El mandatario reiteró las críticas a las sanciones estadounidenses, un paquete que calificó de “perverso y genocida”. Recordó que la última serie de sanciones fue impuesta durante el primer mandato del republicano Trump y que el actual presidente de EE.UU., el demócrata Joe Biden, ha mantenido “la misma posición de hostilidad”.
“En eso llevamos todos los años de la Revolución, es decir, que el país está preparado”, consideró, al tiempo que dijo que su Gobierno no aceptará “injerencias de ningún tipo”.
No obstante, Díaz-Canel se mostró dispuesto a dialogar “en condiciones de igualdad” y “sin imposiciones” con Washington.
En esa misma cuerda se manifestó este miércoles el canciller Bruno Rodríguez.
En una serie de publicaciones en X, el titular cubano de Exteriores aseguró que Cuba tiene una “larga experiencia en el enfrentamiento a las agresiones imperialistas” y recordó que “esa política de asfixia extrema”, en referencia a las sanciones y el embargo de Estados Unidos, “ha sido condenada por la abrumadora mayoría de la comunidad internacional”.
Como también señaló el presidente, Rodríguez dijo que aun con la llegada de Trump a la Casa Blanca Cuba mantendría sus “cordiales relaciones con el pueblo estadounidense”, así como “la disposición de dialogar, en igualdad de condiciones”, con Washington.
Ello, dijo, “a pesar de relación bilateral totalmente asimétrica” entre ambos países.
Como siempre hemos hecho, mantendremos nuestras cordiales relaciones con el pueblo estadounidense y la disposición de dialogar, en igualdad de condiciones, con gobierno de EEUU, a pesar de relación bilateral totalmente asimétrica y bloqueo nos han impuesto por 62 años.
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— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) November 27, 2024
Cuba atraviesa una profunda crisis económica, agravada por los efectos de la pandemia, las sanciones estadounidenses, y las dificultades, ineficiencias y errores en la política económica y monetaria nacional. A lo anterior se suma el impacto de los recientes fenómenos naturales y la compleja situación del deprimido sistema electroenergético.
En medio de ese escenario, el producto interno bruto (PIB) se contrajo un 1,9 % en 2023, según cifras oficiales, y el Gobierno ya ha avanzado que no espera crecimiento en el presente ejercicio.
La actual crisis ha generado un creciente descontento, visible en las inusuales protestas que se han registrado en los últimos años y en un inédito éxodo migratorio.
Durante su anterior presidencia, Trump revirtió drásticamente el acercamiento bilateral iniciado en el último mandato de Barack Obama e impuso severas sanciones a la isla, al tiempo que la reintegró a la lista de países que en opinión de Washington patrocinan el terrorismo.
EFE / OnCuba