Uno de los símbolos de la cultura cubana de todos los tiempos, Benny Moré (1919-1963), podrá ser abordado por los lectores de variadas maneras y visiones mediante el libro Te quedarás.
El volumen está disponible desde este viernes en la librería virtual ruthtienda.com, reporta la agencia Prensa Latina (PL).
Se trata de una selección de narraciones y abordajes sobre el llamado Bárbaro del Ritmo publicada bajo el sello de la Editorial Mecenas. Está compilada por los editores Dulce María Sotolongo y Félix García, refiere la agencia citando al Centro de Promoción Literaria Florentino Morales.
“Los cuentos y fragmentos de novela que se recopilan en esta selección representan el amor y respeto que los cubanos sentimos por el Bárbaro del Ritmo; textos que devuelven y recobra vida desde la perspectiva de cada autor que se adentra en la narrativa y ven a un Benny niño, al Benny que se trasladó a la Habana, al Benny en México, Venezuela, en su querido Ali Bar y en su casa con su familia”, se lee en la página promocional de la editorial.
La obra reúne textos literarios y testimoniales escritos por figuras como Nicolás Guillén, Roberto Fernández Retamar, Fina García Marruz, Boby Carcasés, Jesús Díaz y Frank Padrón.
Edición original
Te quedarás, impreso en papel, salió a la luz en 2019 en ocasión del centenario del cantante lajero, a cargo de la editorial Mecenas de la provincia de Cienfuegos.
“Aquí está el Benny niño, el que vino a La Habana en busca de fortuna, el Benny (…) en su querido Alí Bar y en casa, con su familia. Aquí hay un solo narrador con voz de pueblo que dice con orgullo: íTe quedarás!”, reseña el prólogo de la citada edición.
La edición del volumen estuvo a cargo de Alicia Martínez Lecuna, mientras el diseño y la ilustración de cubierta quedaron en manos de Reynaldo Duret Santana y Milton Bernal Castro.
Igualmente, por el centenario del músico, fue publicado Benny Moré, el símbolo de la música cubana (Ed. José Martí, 2019), un volumen que le costó a su autor, Rafael Lam, cuarenta años en ponerle el punto final.
“Benny es un músico sobrenatural, como siempre digo de músicos como Michael Jackson, Dámaso Pérez Prado, Frank Sinatra, porque viraron el mundo bocabajo. En el arte hay cosas que no se pueden explicar. No en la música, en el hombre. El ser humano y el arte son un misterio”, dijo entonces a OnCuba el investigador, cuya labor ha producido textos como Historia de famosas canciones cubanas, además de monografías sobre Los Van Van y el Buena Vista Social Club.
Benny Moré, la música cubana. A los 100 años de su nacimiento
Perfil de un genio
Considerado uno de los cantantes cubanos más polifacéticos e icónicos, Bartolomé Maximiliano Moré Gutiérrez nació el 24 de agosto de 1919 en Santa Isabel de las Lajas, actual provincia de Cienfuegos. Fue el primigenio de 18 hijos de una familia negra y pobre cuyas necesidades le obligarían a cambiar la escuela por el trabajo y culminar solo el cuarto grado.
Cortador de caña y vendedor de frutas, sin jamás pisar una academia de música, logró que le considerarán como el Sonero Mayor de Cuba por su innato sentido musical, dotado con una fluida voz de tenor, que coloreaba y fraseaba con gran expresividad.
Protagonista de una vida licenciosa, cargada de excesos, Moré logró conquistar la fama primero en México y Latinoamérica y el Caribe, para luego, ya en los años 50, aterrizar en Cuba.
Con su jazz band de cuarenta músicos, a la que bautizó como La Banda Gigante, se lució en todos los géneros de la música cubana, pero destacó particularmente en el son montuno, el mambo y el bolero.
“No hay un cubano que, en un trance de nostalgia, no eche mano a uno de sus grandes boleros. Oírle cantar “¿Cómo fue?”, “Alma mía” o “Mi amor fugaz” es suficiente para que afloren los sentimientos contenidos. No son pocas las veces que se le escucha en una celebración. Al compás de “Qué bueno baila usted”, “Santa Isabel de las Lajas” o “Maracaibo oriental” se desata la locura del ritmo y, en ese momento, se confirma la certeza de que El Benny es atemporal: sus sones, guarachas y boleros resisten el paso del tiempo”, escribió la musicóloga Rosa Marquetti.