El jefe de inteligencia militar de Estados Unidos y otros dos altos cargos de esa agencia fueron relevados de sus cargos, presumiblemente por informes filtrados sobre los recientes bombardeos a Irán, y cuyo contenido disgustó al presidente Donald Trump.
El despido del teniente general Jeffrey Kruse, que ocupaba el puesto desde principios de 2024, se produce poco después de que sus servicios estimaran que los ataques a instalaciones del programa nuclear iraní solo había retrasado su desarrollo por varios años, señala la agencia AFP.
NEW: Defense Secretary Pete Hegseth has fired Lt. General Jeffrey Kruse, the head of the Pentagon’s Defense Intelligence Agency without cause. Kruse is a 3-star general and has served over 35 years in the U.S. Air Force.
RETWEET if you stand with Lt. Gen. Kruse against Trump! pic.twitter.com/zMfTwgy8Qr
— Protect Kamala Harris ✊ (@DisavowTrump20) August 23, 2025
Este informe filtrado pocos días despues a la prensa contradecía completamente la versión divulgada por el gabinete de Trump, en la que se aseguraba que los bombardeos habían destruído por completo las instalaciones, dejando a la nación persa sin opciones para continuar con el desarrollo de su programa.
Jeffrey Kruse “ya no asumirá las funciones de director de la DIA (Agencia de Inteligencia de Defensa)”, indicó el viernes un alto responsable militar, bajo condición de anonimato, según el medio.
Hasta el momento no han trascendido las razones para este relevo, al tiempo que otra fuente, bajo la misma condición, habría confirmado que la purga se habría extendido a la vicealmirante Nancy Lacore, jefa de la reserva de la Marina, y el contralmirante Milton Sands.
Recuerda AFP que desde su regreso a la Casa Blanca, Trump se ha deshecho de varios altos cargos del Pentágono, entre ellos el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, Charles Brown, destituido en febrero sin explicaciones.
Trump pone de cabeza al Pentágono y ordena purga sin precedentes en su liderazgo
El ministro de Defensa, Pete Hegseth, fiel al mandatario, defiende su derecho a elegir a los dirigentes del ejército como considere oportuno, pero los representantes demócratas han expresado su preocupación por una posible politización.
Hegseth lideró las voces que cuestionaron el informe preliminar de la inteligencia militar sobre los ataques a Irán.
Entonces declaró que el documento “se filtró porque alguien quiere intentar (…) hacer creer que estos ataques históricos no fueron un éxito”.
Trump, quien ha convertido la lealtad en el principal criterio de selección de los altos cargos del Gobierno en su segundo mandato, también aplica esta lógica al ejército, históricamente neutral.
Entre sus decisiones más cuestionadas en las que se ha visto involucrado el ejército estadounidense estuvo el desfile militar excepcional celebrado en Washington el pasado 14 de junio, fecha que marcaba los 250 años desde la creación del cuerpo militar y que coincidía con la fecha de su cumpleaños.
A su vez, ha recibido numerosas críticas por el despliegue de la Guardia Nacional, un cuerpo de reserva, en Los Ángeles y Washington, con planes de extenderlo próximamente a la ciudad de Chicago..
Varios altos cargos civiles también han sido destituidos por el multimillonario de 79 años, como la directora de la principal agencia de estadísticas sobre el empleo, tras la reciente publicación de unos malos resultados.