El Gobierno de Colombia, que tiene la Presidencia pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), convocó para este lunes una reunión de urgencia con sus cancilleres con el fin de analizar la coyuntura regional tras el reciente despliegue de buques de guerra de EE.UU. en el Caribe, frente a Venezuela.
El objetivo de este encuentro virtual será “intercambiar puntos de vista y reflexiones sobre la coyuntura regional (…) y abordar, de manera abierta y constructiva, las preocupaciones existentes en torno a los recientes movimientos militares en el Caribe y sus posibles implicaciones para la paz, la seguridad y la estabilidad regional”, explicó la cancillería colombiana en un comunicado, citado por EFE.
La tensión en el Caribe enfrenta a EE.UU. y Venezuela. Colombia convoca a la CELAC tras el despliegue militar estadounidense, que Washington defiende como antidrogas y Caracas denuncia como amenaza a su soberanía.
¿Cree que el despliegue militar de EE.UU. en el Caribe pone en…— Café CNN (@cafecnn) September 1, 2025
La Casa Blanca defendió la operación militar, que incluye el desplazamiento a la zona de destructores, un crucero lanzamisiles y un submarino de ataque rápido de propulsión nuclear como parte de su estrategia antidrogas, y aseguró que cuenta con el respaldo de varios países latinoamericanos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores agregó que la intención de la canciller colombiana, Rosa Villavicencio, al convocar la reunión “es reforzar los canales de diálogo y cooperación, reconociendo que los desafíos transnacionales requieren respuestas conjuntas y coordinadas”.
Una región ante un hecho
La CELAC, creada en 2010, está integrada por 33 países de América Latina y el Caribe y funciona como un mecanismo intergubernamental de diálogo y concertación política. El objetivo de su creación es fortalecer la integración regional y avanzar en consensos comunes sin la participación de Estados Unidos ni Canadá.
Hasta ahora, el organismo, cuya presidencia pro tempore asumió Colombia en abril pasado, no se había pronunciado sobre el despliegue naval de Estados Unidos en el Caribe, cerca de Venezuela, para “frenar el flujo de drogas”, según Washington.
Dicho despliegue ha recibido un rechazo con vehemencia por el Gobierno de Nicolás Maduro, que lo califica de “acciones hostiles” y lo asocia a un intento de “cambio de régimen”.
En respuesta, Venezuela reforzó su presencia militar en zonas fronterizas con Colombia, al tiempo que convocó a jornadas de alistamiento de milicianos dentro del denominado ‘Plan Nacional de Soberanía y Paz’, apunta la fuente.