Un mes después de su anterior salida, la central termoeléctrica Antonio Guiteras vuelve a desconectarse este viernes del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), en momentos en que el oriente de Cuba se mantiene mayormente apagado como consecuencia del huracán Melissa.
Según la Unión Eléctrica (UNE), esta nueva desconexión busca “solucionar defectos impostergables” en el principal bloque generador de la isla, que para finales de este año tiene previsto un mantenimiento capital que debe extenderse por alrededor de seis meses.
Una segunda publicación de la entidad precisa que las acciones que se realizarán en la Guiteras estarán “dirigidas a la recuperación de la potencia” y que la parada debe extenderse durante cuatro días. En consecuencia, su sincronización está prevista para el próximo martes.
Por su parte, el periodista José Miguel Solís refirió en su perfil en Facebook que el objetivo central de esta parada es “reducir la pérdida de agua en caldera”. “Se trabajará en la reparación del recalentador de alta temperatura y sumarán casi 400 tareas correctivas”, añadió.
El comunicador, que habitualmente informa sobre la situación de la planta matancera, confirmó que se trata del “último mantenimiento antes del inicio del general, programado para diciembre”, una “intervención profunda” que debe llevar la planta matancera hasta los 310 MW de potencia.
Más allá de la Guiteras
La desconexión de la Guiteras por cuatro días incrementará el déficit de generación en el país y, con ello, los apagones en los territorios que se mantienen conectados al SEN tras Melissa.
En los últimos días, a la par de los complejos trabajos recuperativos de la infraestructura eléctrica en la zona oriental, han seguido ocurriendo salidas de otras plantas generadoras y se han vuelto a incrementar los crónicos problemas con el combustible.
Este viernes amanecieron seis unidades térmicas fuera de servicio. Aunque ya en la mañana se conectó el bloque 5 de Nuevitas, la salida de la Guiteras ahondará el déficit, al que se unen también más de 600 MW perdidos por limitaciones térmicas.
Otros 723 MW no se producirán durante el día por falta de combustible y lubricantes en la generación distribuida. De ellos, solo 40 MW se recuperarán para el pico nocturno, cuando la generación debe alcanzar los 1495 MW.
Mientras, la afectación máxima prevista por la UNE en la noche es de 1405 MW, lo que en la práctica significa que alrededor la mitad del país conectado al SEN a esa hora estará a oscuras.
No obstante, todavía hoy estaban afectados más de 300 MW en el oriente cubano por los estragos de Melissa, así que en la práctica serán muchos más los cubanos apagados a esa hora. Y su número podría incluso aumentar si ocurre una rotura o la demanda sobrepasa el estimado oficial.












