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El Festival Eyeife realiza su novena edición teniendo a Fábrica de Arte Cubano como única sede de su programa que ha tomado tres naves del centro cultural habanero.
Con casi una década de existencia, sus organizadores sienten en el evento una cita consolidada, y sobre todo que a estas alturas ha alcanzado las metas con que en 2016 Suylén Milanés lo fundara.
“Hemos cumplido ese objetivo, no solo de dar un espacio, sino de que haya sido un espacio bonito porque al final esos artistas y esa gente vuelve a celebrar”, afirma Rafa Fergom, cofundador y director de marketing del Festival Eyeife.
Justamente su programa de este año tiene mucho de eso, de los nombres que regresan, Djs que tienen la certeza de que este festival es la casa. Muchos han dado sus primeros pasos aquí y hoy son profesionales de renombre otros han llegado de varias partes del mundo y saben que las mezclas que este evento propone son una fuente de la que hay que beber, y a la que hay que aportar.
Yongolailan, Dj cubano radicado en Nueva York, ganador del segundo lugar del concurso Eyeife el pasado año, y mención en esta edición, es uno de los que regresa a la isla para participar en lo que él define como “algo clave en la evolución de la música cubana”.
“Ha mezclado dos cosas que yo vengo combinando en mi arte hace mucho tiempo; una es la música electroacústica y la otra son nuestras raíces afrocubanas. Son dos tópicos que tienen mucho sentido para mí, así que cuando vi por primera vez Eyeife, no podía creer que existía este festival”, nos explica las razones de su interés por ser parte.

Hacerlo posible
Brindar oportunidades a quienes inician el camino de la música electrónica es una de las constantes de Eyeife, una labor en la que trabajan todo el año con la realización de su concurso y que luego se materializa en el escenario con la visibilidad de estos proyectos.
“Nos encanta contar con talento joven, por lo tanto, los ganadores del concurso de Djs productores tienen un lugar como parte del line-up concebido para esta edición. También forman parte de esta edición ganadores de ediciones anteriores, o sea, hemos querido legitimar esa trayectoria de los Djs que han comenzado ganando el concurso y que ya también han tenido un desarrollo desde el punto de vista artístico”, detalla Gretel Garlobo, productora general del Festival.
Por eso en su programa vamos desde nombres reconocidos en la isla como Lejardi, Jigüey, Reitt, Thalai, Madame Butterfly, hasta aquellos de los que tal vez por primera vez escuchamos, como el santiaguero Afronamy, ganador del primer lugar del concurso este año, o el habanero Dannis o el proyecto Arank, merecedores del segundo y tercer lugar respectivamente.
“Es el que ha abierto las puertas a que ahora mismo haya jóvenes talentos Djs y productores en Cuba, ha sido muy importante, si no hay esta plataforma como parte de conexión y explotación al mundo sería mucho más difícil, que ya lo es en Cuba propiamente, entonces es muy importante que los lancen y los conecten, porque lo bueno que tiene este festival es que tú ganas el concurso pero luego estás en programación con los Djs del momento de Cuba y además estás en conexión con otros Djs internacionales y esto es una maravilla”, nos comenta Tropical Mystic, Dj española que por segunda vez participa en el festival, y quien junto a DJ Trapella, también de España, conforma la propuesta internacional de esta novena edición.

“Nosotros decimos que es más grande, aunque realmente no es por extensiones, sino porque quiere abarcar la mayor cantidad de diversidad de propuestas dentro de la música electrónica”, nos resume Garlobo.
La primera jornada de Eyeife estuvo dedicada a su espacio teórico. Cuatro talleres y showcases de Djs conformaron la mirada global que intenta brindar el evento sobre creación musical, pero también abordando siempre otros temas que consideran esenciales para un artista de éxito en el mundo actual.
Este año la temática más abordada fue marca personal a través de los talleres del fotógrafo Víctor Cervantes y de Rafa Fergom. Aunque también la española Tropical Mystic trajo el ecstatic dance, no muy conocido en el país, y Charlie Zuma discursó sobre sonido.
“El motivo de las conferencias es aportar otras herramientas que no son atractivas, como a lo mejor es el hecho de tocar en un escenario, pero que al final, si un artista lo que pretende es acercarse al público, pues va a necesitar irremediablemente herramientas de marketing, mucha mentalidad con el contexto para entender determinados aspectos de cómo trabajar su estrategia para llegar al final a visibilizar su obra, a conectarla con el público”, nos dice Fergom.
Esto ya no es un evento puntual
Eyeife ya ha superado el concepto de festival, y este año acaba de lanzarse como una plataforma, que bajo el nombre de Eyeife Cultura, reúne el gran entramado artístico en que se ha convertido, y a la vez marca los caminos hacia donde pretende crecer.
La realización del concurso, que ocupa prácticamente todo el año entre recepción de obras, trabajo del jurado y premiación, y el nacimiento de Women, que cada mes de marzo brinda un espacio a la mujer en el sector, han hecho que al decir el nombre Eyeife ya no podamos pensar en solo tres días de música electrónica en La Habana.
“Nos dimos cuenta de que realmente nos mantenemos vivos durante todo el año a través de otras iniciativas, entonces al final, para mí y para nosotros es una plataforma que pretende apoyar la cultura cubana, incluir artistas internacionales que vienen con la mejor de las intenciones para recoger todo lo que aprenden aquí y aportar su conocimiento, pero sobre todo a recoger y llevárselo a su tierra para contar todo lo que está pasando aquí, el talento que hay; creo que eso es Eyeife, un catalizador de talento que no tiene que durar solo un evento, sino durante todo un año”, es la visión de Fergom, una figura esencial que junto a Suylén Milanés dio vida a este proyecto.

“Más allá de un festival de música electrónica, es un espacio de cultura, donde la interacción de manifestaciones, de formas de hacer, son bienvenidas, son acogidas bajo la marca y además son una forma de crecimiento. Creo que siempre va a crecer hacia más cultura, o sea, hacia la conexión, hacia una mirada de internacionalización, no desde la música únicamente, sino desde las conexiones humanas”, conceptualiza Garlobo.
Esa diversidad también está visible en el programa de estos tres días, en los que a su cartel de Djs se unen nombres como el pianista Issac Delgado Jr. con La Wawa, o el proyecto de fiesta Warapo en colaboraciones especiales para el evento, o la participación de agrupaciones danzarias como el Ballet Rakatán o la compañía Malpaso.
Lo que se sabe no se pregunta
Siendo un evento que puede considerarse pequeño dentro del entramado de grandes citas musicales existentes en el país, teniendo en cuenta su extensión temporal y que está dedicado a un género musical específico, Eyeife, a casi una década de existencia, tiene que tenerse en cuenta a la hora de hablar de zonas que han impulsado a la música cubana, y que lo seguirán haciendo.
“El escenario ha cambiado muchísimo, como ha cambiado el país, como cambia la vida, y en ese sentido el Eyeife ha tenido que transformarse y va a seguir transformándose”, contextualiza Gretel Garlobo.
Para quienes forman parte desde lo artístico, también el evento tiene un matiz esencial. Yongolailan considera que “en los últimos años a nivel mundial hay un gran interés por estos géneros y esta mezcla, con lo cual Eyeife entra en un gran circuito de festivales que están promoviendo este movimiento”.

“Venís pensando en Cuba y vas pensando en la salsa, en la música tradicional que existe y está, pero luego hay unos DJs superpotentes con muchas ganas y mucha pasión”, define su experiencia Tropical Mystic, mostrándonos cómo Eyeife está actualizando o ampliando la imagen internacional establecida sobre la música cubana.
“La verdad es que Eyeife ha evolucionado muchísimo, su misión era dar visibilidad al tejido artístico local y a los DJs, que entonces era una figura que estaba como escondida, porque solo tenía acceso a determinados espacios pequeños, muy de nicho, muy de club. En ese sentido hemos evolucionado muchísimo junto a los artistas y las artistas y ahora es más un lugar de unión, y lo seguiremos haciendo mientras podamos, y sobre todo, mientras esos artistas sigan necesitando Eyeife como plataforma, y mientras el público cubano siga queriendo venir a celebrar este movimiento que es la música electrónica”, asegura Fergom.









