Primero con la visita de Barack Obama y ahora con la Jornada contra la Homofobia y la Transfobia, sigue Pánfilo resolviendo lo que la comunicación pública y política no puede (o no quiere).
La pasada noche de lunes, el popular programa Vivir del cuento de Cubavisión volvió a sorprender a su numerosa teleaudiencia al poner en escena, y sin tapujos, el dilema de la sociedad cubana en relación con la dicotomía del 17 de mayo en la Isla.
Por una parte, la tradición de agasajar a los campesinos, después de que en los albores de 1959 se firmara en la serranía la Ley de Reforma Agraria. La fecha fue elegida como Día del Campesino.
Y por otra, la creciente visibilidad que tienen las jornadas contra la homofobia y la transfobia, lideradas por el CENESEX y Mariela Castro Espín. Transversal y omnipresente, la herencia machista y patriarcal parecería colocar estas fechas en las antípodas.
En pantalla, los equívocos, absurdos, dobles sentidos y choteo motivaron la risa y, seguramente la reflexión, no sin hacer equilibrismos sobre el finísimo filo que separa al humor para debatir y construir opiniones del que es mera burla, por demás homofóbica.
La conga por la diversidad, un evento que ya se va haciendo tradicional y que moviliza por la céntrica avenida 23 del Vedado habanero a la comunidad LGBTI se convirtió en parte del programa humorístico.
Pánfilo y sus “vecinos” terminaron el capítulo arrollando con la bandera multicolor símbolo del orgullo gay y lésbico. Se sumaban así al propósito de promover una línea de pensamiento y acción respetuosa hacia la diversidad sexual.
Vivir del cuento abordó este asunto desde una perspectiva más cercana a la ciudadanía (o al menos a una parte de la ciudadanía), asumiendo sin “teque” las formas naturales de acercarse a un asunto que despierta todavía mucha polémica en la sociedad cubana.
Pánfilo sirvió en marzo para comunicar al presidente Obama con los códigos cubanos (“¿Qué bolá?”/ “No es fácil”). Tornó en sonrisa el enseriado tópico de la política bilateral entre Estados Unidos y Cuba. Esta vez Vivir del cuento, entre risas, volvió “serio” un tema que siempre se asocia al “relajo” (la burla homofóbica).
Pero la homofobia y la transfobia todavía requieren un posicionamiento y visibilidad mayores, sin catecismos recalcitrantes ni oportunidades para la ambivalencia.
(Me pregunto si, en el caso de la Jornada, la clave de humor para algunos no haya obrado en dirección opuesta a lo que se pretendía trayendo el tema a colación.)
No es menos cierto que allí a donde la retórica oficial o de los medios periodísticos no llega o no profundiza, el humor funciona como un alivio o como un catalizador del pensamiento crítico.
Pero los vacíos en la comunicación pública y política no debieran llenarse desde espacios donde se “recrea” la realidad. Siempre parece más cómodo favorecer imágenes construidas desde la ficción, sobrevolando con ello los dolores de la vida real. Allí donde sobreviven las discriminaciones “en vivo”, podrían ponerse altavoces.
Lo útil y saludable sería que el debate ocurriera en todos los ámbitos.
Ay, OnCuba. ¿Te peinas o te haces la Keratina? Siempre al centro. Pero esta vez les quedo Cheo. Lo de Pánfilo: una muestra de que el humorismo es un látigo con cascabeles en la punta. Y la política del país es la correcta en este sentido. Sin traumas. Sin violentar nada. Poco a poco. Para que fluya orgánicamente. Lo único malo es que coinciden el día del campesino y el del orgullo gay (que es una fecha internacional). Fuera de eso todo bien. Pero. NO. PARA USTEDES NO. Creo que a la larga, con un estilo “cuadrao” y tosco, pero Iroel tiene razón.
a mi opinion en lugar de todos dedicar tanta propaganda al movimiento LGTB deberian dedicarselo a eliminar la discriminacion en todas sus formas en cuba, empezando por la del gobierno al cubano, aun existen muchos lugares en este pais al que por solo ser nacional de cuba no puedes entrar (Ni pagar). O a la discriminacion por razas. Pero a quien le importa ella es la hija de quien todos sabemos y esa es su prioridad no la del pais…
Sayli Sosa muy ingenua tu si crees que es Pánfilo el que “resolviendo” algo…
hablar de discriminacion en cuba sin un necesario apellido es un dolor de barriga. a mi no me disgusta que encontrar a un musico o un deportista triunfador blanco no es facil, es solo producto del talento personal desplegado. pero se han creado muchos estereotipos (y no tipos stereo) producto de la realidad social criolla. no obstante, ahi estan las aulas abiertas para todos, sin distincion.
por otro lado, me parece que la amiga sayli soslaya que este espacio lo hace el icrt, que es una fuerte dependencia estatal y toda su produccion trata de tener un mensaje, a veces innecesariamente pero es su razon.
pero este programa ha calado hondo en la poblacion y el pueblo reclama ver sus problemas en escena. aunque el espacio tiene muchos defectos de realizacion, principalmente en la direccion de actores. el mulato e irelita estan organicos, panfilo para su edad necesita controlar el movimiento de las manos, pero facundo y chequera tienen que hacer mas creible su desenvolvimiento. el ritmo se hace demasiado vertiginoso en un libreto que en ocasiones es lo fuerte y no lo necesita.
hacer reir con causa es muy dificil y ellos lo logran. lo que uno quisiera que esos espacios importantes tengan el mismo rigor que otros. el esfuerzo general lo merece.
Todo programa de lo que en Europa se le llama “de cabaret” son sátiras política o social que no se puede tomar muy en serio ni darle más valor del que tiene.
Creo que en Cuba sobrevaloramos la importancia del programa. En una democracia el arte debe saber reírse de todo lo que va pasando sin ser censurado.
En mi visita a Cuba, a pesar de que no soy asidua a la televisión, vi varias veces el programa, muy buen logrado y magnífico elenco; pero es para reír. Que se toquen puntos sensibles de la realidad, lógico esa es la política de: a mal tiempo buena cara.
Tocando muy precisamente el aspecto de la homofobia
Pienso a veces que estirar demasiado la soga puede terminar reventándola.
La eliminación de la discriminación se hace creando las leyes que sean iguales para todos.
Siempre he tenido un poco de desconfianza al uso del término: “diversidad sexual”
Un término demasiado amplio para que sea reducido a los homosexuales, transexuales y heterosexuales.
A nivel privado siempre vamos a encontrar discriminaciones, por llamarlo de alguna manera.
No podemos esperar que a todo el mundo le gusten las personas homosexuales o transexuales. Al igual que conozco casos de personas homosexuales que sienten asco por los heterosexuales.
No podemos esperar que a todos los blancos le gusten los negros, al igual que a muchos negros no le gustan los blancos.
La igualdad es que todos frente a las leyes seamos iguales.
Si hay una plaza de trabajo la gana el que más capacidad tenga sin importar color, religión u orientación sexual.
Que tenga la misma posibilidad de ocupar cargos públicos, así como a elegir y ser elegido, .
A pertenecer a las organizaciones políticas como cualquier otro.
Pero, como todas las cosas en Cuba nada se toma con la seriedad necesaria para el progreso en la isla, se forman pachangas y campañas que dura un tiempito y después se desvanece la llama, y todo sigue igual o peor que antes.
Hacer club de bichos feos que son a su manera no es la solución (aunque pueden hacer sus clubes).
Hay que crear leyes asentadas en la constitución, en la que realmente se asegure la igualdad de todos y cada uno de los ciudadanos sin importar color, religión o sexualidad.
en europa, en oceania y en fidji todo programa que se dedique a la satira social es muy tenido en cuenta. en estados unidos, donde la tv tiene una fuerza tremenda, brutal, es definitorio para la buena marcha de una carrera. que en otras latitudes se haga solo para lograr catarsis no es para aplaudir. no es que el arte tenga un imprescindible mensaje para vivir, es que si esta dentro de el se convierte en magnifico.
hollywood ha triunfado lanzando a los cuatro vientos que lo de ellos es contar historias, cuando desde sus inicios observaron (brillantemente) que asi se difundia una forma de vida, una cultura…y en eso pare de contar.
la importancia nacional de panfilo hoy es inmensa y eso merece detenernos. luis silva no es santiesteban, pinelli o enrique arredondo, aunque trata, por eso la preocupacion para su esfuerzo no se pierda y caiga en saco roto.
Este 17 de Mayo se produjo una bronca en el Cerro, uno le dio un machetazo a otro porque éste lo felicitó y el del machete creyó que era por lo del dia LGTBI.En la estación de policia la victima aclaró que era por el Dia del campesino.
Esto sí está bueno (Jajajajaja) muchas gracias por la rizas
Estoy segura que Corea del Norte como uno de los últimos bastiones del totalitarismo socialista estén bien pendiente de los programas satíricos.
Turquia que nunca ha sido de verdad muy democrática, pero ya se ha vuelto más tiránica que nunca antes se preocupa de los programas satíricos y quiere llevar a juicio a y humoristas que ni siquiera viven en su país. Grupos extremistas como el Estado Islámico y otros que hacen atentado hacía humoristas por hacer alguna guasa sobre el profeta.
Y otros países donde la agudeza de la dictadura ha alcanzado que todo lo que se diga sobre la realidad tenga que ser agradable al oído de la máxima figura del país.
De otra forma el humorismo es ese decir sobre la realidad, y en la parte que duele, la democracia es tomar eso con tranquilidad sin pánico.
El que las personas se puedan identificar con su realidad en un programa que es más para reír que para hacer cambios sociales ayuda al sistema que sea.
Pero, y es siempre, pero.
Hay que saber qué es sátira en el arte.
Ni los programas de San Nicolas del Peladero, Alegría de Sobremesa y otros por el estilo eran satíricos. Aunque eran programas divertidísimos. Incluso Virulo que era uno de los más satírico sus sátira no era una cosa con la uno se pudiera identificar excepto cuando se mofaba del transporte público o cubanos que se querían hacer pasar por extranjeros para lograr algo.
La sátira tiene que estar con el tiempo, tratar momentos de la realidad actual y sus espectadores tienen que identificarse con los temas que traten, pero saben que esa realidad ha sido inflada y es con eso que hacen reír, de otra forma, sería un simple noticiero diciendo lamentos.
Vender un modo de vida como “el mejor” y tratar de imponer este modo de vida a otros países con la máscara de arte, sabemos que es una moderna forma de colonización. Y no hay esclavo más dócil que aquel que se pone él mismo la cadena.
Y así todo, amigos, sigamos viviendo del cuento, a pululu y con la Revolución hasta que se seque el malecón
¿Y quién dijo que hicieron esos programas como opositores? Qúe ingenuidad
bueno, por mi madre que no se por donde ud va o lo que quiere: quizas es que se seque el malecon. no le puedo seguir sus divagaciones prodemocraticas, pero si eso de tomar las cosas con tranquilidad y no hacer nada. precisamente nada, pues al que le molesta no le hace ni cosquillas y le da cierto charming. como alguien ya dijo aqui, en fin el mar.
“bandera multicolor símbolo del orgullo gay y lésbico”, error, es la bandera de la diversidad, no del orgullo gey, en cuba no se celebra el orgullo gay, este es el 28 de junio, en Cuba somos diferentes, no hablamos de orgullo de uno u otro, hablamos de integración, igualdad de derechos. Eso queremos.
Quizás yo vaya a pululu y hasta que se seque el malecón no me van a entender.