En un futuro, pacientes en unidades de cuidados intensivos o en salones de operaciones contarán con un tomógrafo totalmente creado por científicos cubanos.
De acuerdo con Granma, el dispositivo, denominado Vigilvent, se encuentra en la fase final de desarrollo del prototipo y en la actualidad, pasa por las pruebas de verificación del software y del funcionamiento general del sistema.
Destinado a la vigilancia de la función respiratoria, “cumple con las mismas prestaciones de los similares existentes en el mercado internacional”, aunque “incorpora algoritmos matemáticos, dispositivos y accesorios elaborados con diseños propios, que lo distinguen de la competencia”, aseguró al medio la ingeniera Tania Yadira Aznielle.
El proyecto
Como indica Aznielle, en los próximos “deben realizarse las pruebas de verificación técnica, con la participación de expertos del Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (Cecmed).
Si los resultados son satisfactorios, agrega, “entonces solicitaríamos el permiso correspondiente para comenzar su validación clínica en los hospitales”.
La especialista explicó que el aparato implementará en el país una técnica de imagen “no invasiva” y “libre de radiación”, mediante la cual “es posible valorar, en tiempo real y junto a la propia cama del paciente, la dinámica ventilatoria y la distribución de la ventilación en las diferentes regiones pulmonares”.
Asimismo, indicó que será valioso en el seguimiento de afecciones respiratorias en los servicios de Neumología. “Tendrá un alto impacto en el sistema nacional de Salud, pues hasta el presente Cuba no cuenta con este tipo de equipamiento”, agregó.
A inicios de septiembre, se supo que Cuba cuenta actualmente con un equipo de estimulación eléctrica para el tratamiento de pacientes con epilepsia “que no responden favorablemente a los medicamentos indicados”.
“Estep”, el dispositivo completamente cubano para tratar a pacientes con epilepsia
“Estep”, como se nombra el dispositivo, es de uso personalizado y fácil manipulación, y se sirve de baterías. Además, se ajusta automáticamente a la concha de la oreja del paciente.
El Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos le otorgó su registro médico en 2023 por los favorables resultados de los ensayos clínicos “que mostraron una reducción significativa de la frecuencia mensual de crisis epiléptica, en el 83,33 % de los pacientes participantes en el estudio”, agrega la fuente.
Actualmente, el aparato lo utilizan solo 16 pacientes, la mayoría “participantes en el ensayo piloto realizado entre mayo de 2021 y diciembre de 2022”, añade René Iván González Fernández, jefe del grupo del proyecto.