El doctor Nelson Arboleda se encuentra en La Habana, participando en una reunión técnica para trazar estrategias en la prevención y lucha contra el ébola. El hecho en sí mismo no tendría nada de extraordinario si él no fuera director para Centro América de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), institución gubernamental norteamericana. La presencia en Cuba de este funcionario puede considerarse una de las primeras evidencias de la posible cooperación entre el gobierno cubano y estadounidense en la batalla contra la epidemia.
Al ser interrogado sobre la concreción de dicha cooperación, Arboleda contestó que su país está dispuesto a colaborar “con todos los actores que están trabajando en la región para asegurar que tengamos una respuesta eficiente a nivel mundial contra este virus”.
El representante del CDC detalló que a Estados Unidos le interesa trabajar con los países de la región para evitar la propagación de la enfermedad ya que “este virus no conoce fronteras y puede llegar a cualquier parte del mundo”. “En América es importante estar preparados y tener una respuesta apropiada y rápida”, añadió.
A la reunión, convocada la semana pasada durante la cumbre extraordinaria del ALBA en esta ciudad, asisten 254 especialistas de 32 países y organismos de toda la región que trabajarán en sesiones plenarias y cuatro comisiones, y sesionará hasta mañana jueves. Además, los participantes realizarán una visita al Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, centro en el que se preparan los profesionales que integran la brigada de colaboradores sanitarios cubanos enviados a África Occidental.
En el acto de inauguración se guardó un minuto de silencio en memoria de Jorge Juan Guerra Rodríguez, cooperante de la Isla fallecido el pasado domingo en Guinea Conakry a causa de paludismo con complicación cerebral.
El activo protagonismo de Cuba en el combate de la epidemia ha sido reconocido tanto por organismos internacionales como por varias voces al interior de los Estados Unidos, como el Secretario de Estado John Kerry y el diario The New York Times.