El valor de los terrenos para el desarrollo de proyectos de inversión extranjera en las energías renovables en Cuba fue recién aprobado por el Ministerio de Finanzas y Precios.
De acuerdo con la Resolución 271 de 2023 de dicho ministerio, publicada este lunes en la Gaceta Oficial, el valor mínimo del suelo (en propiedad) para terrenos donde se desarrollarán proyectos de inversión con capital extranjero en este sector será de 0,34 dólares (USD) por metro cuadrado (m²).
Estos proyectos de energía renovable incluyen tanto los referidos a la energía solar fotovoltaica como a la eólica, y podrán establecerse en un grupo de municipios del país, recogidos en un anexo de la normativa.
La medida se sustenta legalmente, entre otras normas, en una resolución vigente desde 2012, la cual “establece considerar como aportes destinados al capital social de empresas mixtas y de empresas de capital totalmente extranjero, los derechos de propiedad sobre bienes muebles e inmuebles y otros derechos reales sobre estos, incluidos los de usufructo y superficie”.
Entre sus por cuanto también se afirma que “en interés de potenciar el aprovechamiento de las fuentes renovables de energía, resulta de utilidad práctica la determinación de valores mínimos de suelos para las inversiones donde se desarrollarán parques eólicos y solares fotovoltaicos que pueden constituir aportes para los negocios con capital extranjero”.
Coeficiente de corrección
Según refiere la resolución, “los valores que se obtienen están dados (en propiedad), y serán afectados por un coeficiente de corrección para determinar el valor en Derecho de Superficie o de Usufructo”.
Dicho coeficiente, aprobado en la normativa, “se aplica al valor mínimo del suelo (en propiedad) para determinar el valor del suelo en Derecho de Superficie o de Usufructo, en función del tiempo de vigencia de cada negocio, según se establece en el Anexo II, que forma parte integrante de la presente Resolución”.
“Para determinar el valor del suelo en cada negociación o proyecto específico es obligatoria la realización de un avalúo y su certificación por el Ministerio de Finanzas y Precios, de acuerdo con el procedimiento establecido”, explica la norma.
Dichos valores, añade el texto, “nunca serán menores que los mínimos aprobados mediante la presente Resolución”. Estos valores mínimos “son referencia obligatoria para el cálculo del valor del suelo en cada proyecto o negociación”.
Cuba atraviesa una severa y prolongada crisis económica, acentuada por el impacto de la pandemia y las sanciones de Estados Unidos, que tiene en la generación de energía uno de sus sectores más golpeados.
La obsolescencia y sobreexplotación de sus plantas generadoras, las continuas averías derivadas de esta situación y la crónica falta de combustible para su funcionamiento, son factores que impactan en el sector energético cubano. Ello, a su vez, incrementa los cortes eléctricos en la isla y el malestar y las críticas de la población.
Ante este escenario, las energías renovables parecen una apuesta factible y necesaria, aunque en la práctica —y más allá del discurso oficial— su presencia en la matriz energética del país resulta aún muy limitada. Para intentar revertir esa situación, las autoridades promueven proyectos de inversión extranjera y cooperación internacional, al tiempo que el sector privado también ha comenzado a dar pasos en esta dirección.
La pretensión gubernamental, todavía muy lejana, es alcanzar en el futuro el 100 % de participación de estas fuentes en la generación eléctrica de la isla, como una medida para promover la soberanía energética del país y eliminar así su fuerte dependencia de los combustibles fósiles.