El cuerpo sin vida del joven Alfredo Alejandro Díaz Alemán, desaparecido hace una semanas en la occidental provincia cubana de Matanzas, fue hallado este viernes, según informaron autoridades del Ministerio del Interior (Minint).
Díaz Alemán, de 22 años de edad y quien residía en el poblado de Santa Marta del municipio matancero de Cárdenas, había sido visto por última vez el pasado 26 de noviembre, próximo a la salida del canal de Paso Malo, en la península de Hicacos, donde solía practicar apnea.
Tras reportarse su desaparición se realizó una operación de búsqueda en el mar que se extendió durante una semana hasta que finalmente fue encontrado ya sin vida en la mañana de este viernes, según reportan medios de prensa oficiales.
El teniente coronel William González Hernández, jefe de la Defensa Civil de la Región Militar Matanzas, informó que el joven fue hallado cerca de las 11:00 de la mañana, por un grupo de pescadores y buzos, amigos y familiares de Alfredo, que participaban en la búsqueda en una embarcación deportiva.
El cuerpo encontrado con su traje, aletas y máscara, en un punto cercano al sitio conocido como Villa Caleta, a 33 metros de profundidad, y tras la notificación al grupo de rescate y salvamento del Cuerpo de Bomberos, sus miembros lo trasladaron hasta las dependencias de Medicina Legal, para las pruebas y análisis correspondientes.
González Hernández transmitió sus condolencias a familiares y amigos de Díaz Alemán a nombre de las autoridades, y recalcó que durante la búsqueda “no se escatimaron esfuerzos ni recursos”, de acuerdo con el diario Granma.
Según la publicación, en la pesquisa submarina participaron el Grupo de Rescate y Salvamento del Cuerpo de Bomberos, la Defensa Civil, buzos de la Marina Marlin y fuerzas de la Cruz Roja, así como familiares, amigos y vecinos de la zona. Además, estuvieron presentes especialistas de Medicina Legal y del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente para identificar los movimientos de las corrientes y la marea, y se emplearon diversos medios como lanchas, drones y perros en las búsquedas en tierra.
El joven practicaba apnea en el canal de Paso Malo, “no muy lejos de la orilla”, precisa Granma.
“Quizás se confió demasiado y estuvo mucho tiempo en el agua con los contrapesos, sin percatarse del cambio de tiempo unas horas más tarde”, había comentado días atrás Yuri Díaz Montenegro, técnico de la Agencia número Tres de Cubataxi y padre de la víctima, quien dijo entonces que “la corriente llegó a ser muy fuerte y tal vez lo arrastró”.