Más de dos años después de su anuncio, y luego de noticias intermitentes sobre los trabajos y dificultades para su implementación, finalmente la semana pasada comenzaron las pruebas de campo para el establecimiento de servicios de WiFi en los trenes nacionales.
La primera prueba, considerada oficialmente “un paso relevante hacia la modernización del transporte ferroviario”, fue desarrollada el pasado 7 de agosto por la empresa cubana Solintel S.A., perteneciente al Grupo Empresarial de la Informática y las Telecomunicaciones (GEIC), según informó el diario Granma.
Las evaluaciones, realizadas junto a ETECSA y la Empresa Ferroviaria de Tecnología de la Comunicación, Señalización, Informática y Electricidad (COSIE), fueron calificadas de exitosas por los especialistas.
De acuerdo con la publicación oficial, la prueba fue desarrollada en el vagón 6407 del tren que cubre la ruta Habana-Guantánamo, como parte de la “fase de validación de la estructura tecnológica propuesta y la calidad de los servicios de internet”.

Por su parte, la empresa encargada de los trenes nacionales, explicó que las pruebas buscan “el desarrollo de soluciones tecnológicas para mejorar la experiencia de los pasajeros” y que durante las mismas se evaluaron la intensidad de señal, ancho de banda y cobertura en los vagones.
Para las mismas, se realizó la preinstalación técnica en el taller ferroviario Francisco Vega Sánchez, de Luyanó, a fin de agilizar las mediciones sin necesidad de la instalación definitiva, que requerirá perforaciones y cableado estructurado.
Interioridades del proyecto
Según precisa Granma, este proyecto es la materialización de una propuesta de un fórum de base, ganador, además, del concurso Innova 2024, organizado por el GEIC. El mismo “forma parte de los nuevos accesos a internet en el sector del transporte, y al proceso de transformación digital en el país”.
Si bien la iniciativa original se centraba solo en brindar conectividad a internet en los coches, durante el desarrollo de la misma surgieron ideas para servicios adicionales que suplan la falta de señal en zonas de silencio, añade Rutas Nacionales.
Entre las opciones que se evalúan está un portal de contenidos multimedia locales, con acceso a películas, series, música, libros y periódicos, sin necesidad de conexión externa. También se estudia la integración con los televisores ya instalados en algunos vagones y un sistema de audio centralizado, para ofrecer entretenimiento durante los recorridos.
Como valor agregado, se prevé la instalación de puntos de carga para dispositivos móviles, con tomacorrientes y puertos USB, respondiendo a la alta demanda de los viajeros en trayectos largos.

En el plano operativo, el plan incluye un sistema de comunicación inalámbrica interna para la tripulación que facilitaría la coordinación entre maquinistas, mecánicos y personal a bordo.
Esta solución, de acuerdo con los especialistas funcionaría como respaldo a los sistemas de radio tradicionales, sobre todo en zonas con poca cobertura.
Desafíos y perspectivas
No obstante, aun con las pruebas de campo ya en marcha el avance del proyecto enfrenta aún importantes desafíos técnicos y económicos, que conspiran contra su implementación y mantienen incertidumbre sobre una posible fecha para su definitiva entrada en funcionamiento.
Entre estas, la empresa de Rutas Nacionales señala “la adquisición de equipos certificados bajo normativas ferroviarias internacionales, que exigen resistencia a las vibraciones propias del tren, compatibilidad electromagnética y medidas de seguridad contra incendios”.
Además, reconoce igualmente que “las limitaciones económicas del país complican la importación de tecnología, principalmente de origen europeo”.

A pesar de admitir estas dificultades, la entidad apunta que tras concluir la fase de validaciones, se definirá un modelo de negocio que involucra a ETECSA como proveedor de Internet, a Solintel como responsable de la infraestructura y a Ferrocarriles de Cuba como cliente final.
Llegado ese punto, se prevé la instalación masiva, capacitación del personal y puesta en marcha.
Con esta iniciativa, “Cuba da un paso hacia la digitalización de su transporte ferroviario, ofreciendo conectividad, entretenimiento y herramientas de comunicación interna, en sintonía con las demandas de los pasajeros del siglo XXI”, según considera Rutas Nacionales.
Por su parte, Granma resalta entre sus beneficios “la regulación y el control de las emisiones de estaciones radioeléctricas”, así como “mejorar la conectividad y la experiencia de los pasajeros en los trenes nacionales”.