China donó a Cuba diez generadores para los grupos electrógenos que aportarán 18 megawatts (MW). La donación tiene lugar en medio de una tensa situación en la isla por el alto déficit de generación eléctrica.
Según reporte de Granma, los equipos están destinados a la Empresa de Grupos Electrógenos y Servicios Eléctricos Geysel y “permitirá minimizar las averías relacionadas con estos componentes en las provincias de Sancti Spíritus y Cienfuegos”.
“Aportarían al sistema unos 18 megawatts, suficientes para alimentar unas 40 000 viviendas”, según el medio.
“Esta tecnología es más robusta y garantiza mayor confiabilidad en la carga”, aseguró el director de la Empresa de Grupos Electrógenos y Servicios Eléctricos (Geysel) de la estatal Unión Eléctrica (UNE), Mario Pedroso.
Déficit, de mal a peor
La noticia trasciende en otra jornada marcada por un elevado déficit de generación. Según el parte diario de la Unión Eléctrica (UNE), el martes se afectó el servicio las 24 horas y la máxima afectación había sido en el horario pico, con 1347 MW.
El déficit, apunta la entidad, fue “superior a lo planificado por desabastecimiento de combustible diésel en las centrales de generación distribuida y salidas imprevistas de las unidades 6 de la CTE Nuevitas y 1 de la CTE Santa Cruz”.
Para hoy la UNE avisa de averías en unidades de cuatro termoeléctricas y falta de combustible para disponer de 59 centrales de generación distribuida.
La afectación máxima prevista es de 1390 MW en horario pico, una de las más elevadas del año, por lo que este miércoles promete ser otra jornada tortuosa para la población.
Cortes a viviendas, industrias y hospitales
Algunas provincias como Matanzas, ante el altísimo difícil que padecen, anuncian incluso el corte a hospitales por al menos cinco horas, como ha compartido en su Facebook el periodista José Miguel Solís. Se supone que estos cuenten con grupos electrógenos, pero no se sabe si pueden funcionar por la falta de combustible.
El sistema eléctrico cubano se encuentra en una situación extremadamente grave por la falta de combustible y las continuas averías en sus longevas centrales termoeléctricas, muchas con más de cuatro décadas de uso y falta de inversiones y mantenimientos.
Los frecuentes cortes en el suministro eléctrico dañan la economía cubana –que en 2023 se contrajo un 1,9 %– y alimentan el descontento social en la isla, gravemente afectada por una prolongada crisis económica.