Un nuevo cargamento de gas licuado de petróleo (GPL), descargado el pasado miércoles en las instalaciones de la refinería Ñico López, en La Habana, comenzó a distribuirse a consumidores de la capital cubana y las provincias de Artemisa y Mayabeque.
Iván Agustín Lora Alfredo, director general de la Empresa de Gas Licuado, explicó al diario Granma que la venta de este tipo de combustible se realizará durante los próximos cinco días.
➡️Retoman distribución de gas licuado en territorios del Occidente.
Comenzó la distribución del combustible en las provincias de La Habana, Artemisa y Mayabeque.
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— Periódico Granma (@Granma_Digital) August 22, 2025
Sin embargo, precisó que en ese período solo podrán comprarlo aquellos clientes que quedaron pendientes del ciclo de distribución ejecutado el pasado mes de febrero, y que no lo compraron en el mes de junio.
Según el directivo, con el fin de lograr “una distribución equitativa del producto, se comercializará en los puntos de venta de todos los municipios de las tres provincias establecidas, con una planificación diaria, teniendo en cuenta la estructura de clientes y los pendientes por comprar”.
Se estableció, además, que teniendo en cuenta la actual situación, solo se podrá adquirir un cilindro por cliente, para maximizar el alcance de la distribución.
Lora Alfredo aclaró que, una vez transcurridas las primeras jornadas de distribución por el nuevo cronograma, se indicará cómo continuará la comercialización del producto.
En medio de la grave crisis energética que vive el país, marcado por los continuos y prolongados apagones, el GPL resulta un combustible doméstico vital para la cocción de alimentos en los hogares.
Su escasez desde hace algún tiempo ha obligado a las familias a buscar alternativas mediante el uso del carbón, incluso en las principales urbes del país.
Reanudan distribución de gas licuado tras llegada de nuevo cargamento
A mediados del presente mes un cargamento similar fue descargado en la provincia de Santiago de Cuba con el fin de retomar el suministro a los pobladores del extremo oriental de la isla.
Autoridades de la Unión Cuba-Petróleo (CUPET) explicaron entonces que el inventario del cargamento de mayo se agotó, cubriendo solo el 66% de la demanda en La Habana, Artemisa y Mayabeque, y entre el 50% y el 60% en el resto de las provincias.
Pequeñas producciones nacionales de la refinería de Cienfuegos y la Planta Energas en Puerto Escondido se destinan a servicios prioritarios.
En los últimos años la isla ha enfrentado serias dificultades para adquirir combustibles debido tanto a la falta de financiamiento, como a la persecución de sus transacciones internacionales, en el marco del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto desde Estados Unidos, de acuerdo con el Gobierno cubano.