El Ministerio de Economía y Planificación (MEP) de Cuba aprobó este miércoles 106 solicitudes para la creación de nuevas micro, pequeña y medianas empresas (mipymes) y una cooperativa no agropecuaria.
Con esta decisión, suman ya 4758 los nuevos emprendimientos que han recibido luz verde para operar en la economía cubana desde que comenzó este proceso en septiembre de 2021, de acuerdo con datos reflejados por la prensa oficial.
El Ministerio de Economía y Planificación (MEP) aprobó hoy 107 solicitudes de creación de actores económicos, de las que 106 son mipymes privadas y una es cooperativa no agropecuaria. pic.twitter.com/NEEPJ2uUt7
— Ministerio de Economía y Planificación de Cuba (@MEP_CUBA) August 17, 2022
Todas las propuestas aprobadas hasta el momento, 4650 corresponden al sector privado, 51 tienen carácter estatal y la cifra de cooperativas no agropecuarias se elevó a 57.
Por su origen, el 53% de ellas son reconversiones de negocios preexistentes y el 47% son nuevos emprendimientos, que de conjunto estarían en condiciones de generar 81 510 nuevos puestos de trabajo, de acuerdo con las proyecciones del MEP.
Atendiendo a las cifras recientemente develadas, 128 entidades bajo la novedosa forma de gestión forman parte de proyectos de desarrollo local y 12 están incubadas en el Parque Científico y Tecnológico de La Habana.
De acuerdo con las leyes vigentes, las mipymes poseen personalidad jurídica propia, pueden exportar e importar a través de entidades estatales, y han sido autorizadas para actividades económicas lícitas y autorizadas según el Decreto 49/2021.
Cuba: convocatoria para creación de mipymes cubrirá todas las actividades económicas
Entre estas están las relacionadas con el alojamiento, los servicios de belleza, la producción de alimentos, las manufacturas, la informática, las actividades logísticas y de transporte, entre otras. Sin embargo, no pueden acceder a esferas consideradas estratégicas para el Estado como la salud, las telecomunicaciones, la defensa y la prensa.
Además, su forma de propiedad puede estatal, privada o mixta y comparten el panorama económico cubano con la empresa estatal socialista —el principal actor económico para el Gobierno—, las cooperativas no agropecuarias y el trabajo por cuenta propia (autónomo).
El resurgir del sector empresarial privado, que había desaparecido en la década de 1960 con la llamada Ofensiva revolucionaria, es parte de la estrategia diseñada por el gobierno de la Isla en sus intentos de superar la profunda crisis económica, agravada por el impacto de la pandemia de la COVID-19, el embargo estadounidense y las dificultades e ineficiencias internas.