El Ministerio del Interior (Minint) de Cuba notificó el hallazgo de una embarcación abandonada en la costa norte de la provincia de Ciego de Ávila.
Se trata de una lancha rápida, modelo Boston Whaler, sin datos identificativos, de color azul, y material del casco de fibra de vidrio, de acuerdo con la nota del Minint, replicada por medios oficiales de la isla.
La lancha fue encontrada en la zona conocida como Punta Mangle, en el municipio avileño de Morón, y su hallazgo fue reportado el pasado 1 de febrero por la Capitanía del Puerto de Júcaro.
La Capitanía del Puerto de Júcaro reportó el hallazgo de una lancha rápida, modelo Boston Whaler, sin datos identificativos, el 1ro. de febrero último, en la zona conocida como Punta Mangle, municipio de Morón, en Ciego de Ávila. https://t.co/96pB5cFZMR #Cuba pic.twitter.com/uT4iahBgBt
— MININT_CUBA (@minint_cuba) February 22, 2023
La información oficial, firmada por el Departamento de Capitanías de Puerto de la Dirección de Tropas Guardafronteras, detalla que la embarcación “posee una eslora de 4,95 metros (m), manga 1,90 m, puntal 0,80 m, y un motor fuera de borda marca Yamaha de 80 HP”.
Además, explica que “las personas naturales o jurídicas con derechos sobre el bien hallado, interesadas en ejercerlos, deberán acudir a la Capitanía de Júcaro, localizada en Cayo Coco, municipio de Morón, en Ciego de Ávila, en un término que no exceda los 30 días naturales, contados a partir de la publicación de esta nota”.
Finalmente, precisa que “para reclamar la embarcación se deberá presentar la documentación que legalmente acredite su propiedad o posesión”.
Reportes de este tipo son divulgados periódicamente a través de los medios de la Isla, pues debido a su ubicación geográfica es habitual que en sus costas recalen embarcaciones abandonas que son comúnmente utilizadas por migrantes, traficantes de drogas y personas, y otros para cubrir sus rutas.
La legislación cubana establece que si después del plazo fijado e informado públicamente no se presenta ningún interesado en reclamarla, la embarcación se declara en abandono y pasa a ser propiedad del Estado cubano. Y si se demuestra que la misma fue utilizada para contrabando o cualquier actividad ilegal, esta es decomisada por orden judicial.