Redacción OnCuba
La Habana se prepara para el reinicio del curso escolar luego de meses de paralización por la pandemia de la COVID-19. La vuelta a las aulas está programada para el próximo 2 de noviembre, como parte de la flexibilización de las restricciones hasta hace poco vigentes en la capital para evitar la propagación de la enfermedad.
Como parte de este alistamiento, las escuelas y centros educacionales habaneros son sometidos a un proceso de mantenimiento, reparación e inversiones que debe concluir entre el 20 y el 25 de octubre próximo, reporta este martes Tribuna de La Habana, que cita declaraciones de Tatiana Viera, Jefa del Subgrupo de Educación, Cultura, Deporte y Recreación del Gobierno provincial.
Entre las acciones que se acometen, la publicación enumera el arreglo de baños, con la instalación de lavamanos, pilas y otros aditamentos “a fin de poder cumplir con las necesarias medidas higiénico-sanitarias ante la COVID-19”.
De acuerdo con Viera, de los 41 centros de aislamiento que están activados en La Habana, 22 son instituciones educacionales de diferentes entidades, y como parte del proceso de desescalada se priorizarán en ellas las labores de desinfección y mantenimiento para su vuelta a sus funciones originales.
Además, “en las próximas semanas” deben quedar listas las residencias de profesores de otras provincias que dan clases en la capital, de las que ocho –entre las 11 existentes– también han sido utilizadas como centros de aislamiento durante la epidemia de coronavirus en la ciudad. Estos profesores, cuya cifra ronda los 3.000, regresarán a La Habana durante este mes de octubre.
Por otro lado, con el fin de lograr el distanciamiento físico en los centros educacionales y “teniendo en cuenta las dimensiones y capacidades en las aulas”, se han incrementado en la capital 806 grupos escolares, al tiempo que diferentes espacios destinados a otros fines en las escuelas serán convertidos en aulas para poder asumir ese incremento, precisa Tribuna.
La publicación señala que en un inicio los estudiantes acudirán a las escuelas con los uniformes que hoy poseen, aunque, según dijo la funcionaria gubernamental, “se harán algunas concesiones en el uso de éstos, pues muchos han crecido o engordado, pero deberán usarlo de manera adecuada”.
De igual forma, podrán retomar su actividad las personas que tienen una licencia como cuidadores privados de niños, aunque siempre “previa coordinación con las direcciones municipales de Trabajo y Seguridad Social de cada territorio”.
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Educación familiar y medidas en las escuelas
Yoania Falcón, directora provincial de Educación en La Habana, explicó que previo al inicio del curso se realizarán escuelas de educación familiar para explicar a los padres cómo se llevará a cabo el cumplimiento de las medidas sanitarias dispuestas para el reinicio de las clases y, una vez iniciado el curso, “un funcionario de Educación Municipal estará en cada centro escolar velando por el cumplimiento de esas disposiciones”.
Entre estas, la directiva mencionó los pasos podálicos en cada entrada de los centros, la ubicación de recipientes con agua clorada para el lavado de las manos, la existencia del agua corriente, además del uso del nasobuco por parte de docentes y estudiantes, así como el necesario distanciamiento con la creación de semigrupos en caso de las aulas pequeñas y la ubicación de las sillas a mayor distancia en las aulas de mayor tamaño, y la reducción del número de estudiantes por mesas en el comedor escolar.
De igual manera, dijo que se hará pesquisaje diario a alumnos y trabajadores y se evitará la entrada de personal ajeno a las escuelas.
Sobre los horarios y frecuencias de clases Falcón comentó que los alumnos de Primaria y Educación Especial permanecerán todo el día en la escuela, mientras los de secundaria básica, asistirán en horarios alternos: séptimo grado de lunes a jueves en la sesión de la mañana y los de octavo lo harán en la tarde, mientras los viernes, lo hará noveno grado tras e reinicio.
En cuanto a los contenidos docentes, explicó que tras el reinicio del curso “se realizará el diagnóstico a los estudiantes y se prepararán los seminarios integradores ya orientados, para su posterior discusión y evaluación”. También dijo que se dará“ atención diferenciada con los alumnos suspensos” y se dedicará una semana para las evaluaciones y posteriormente las revalorizaciones y extraordinarios.
Además, “se atenderá la continuidad de estudios de noveno grado”, se publicarán los escalafones una vez reiniciado el curso, se realizarán las asambleas de estudiantes y se llenarán las boletas con las solicitudes para la continuidad de estudios.
Finalmente, los estudiantes de 12 grado tendrán cuatro semanas de repasos de los contenidos con vistas a las pruebas de ingreso.
