Un nuevo grupo de 213 micro, pequeña y medianas empresas (mipymes) recibió este jueves la autorización para operar en Cuba, según informa el Ministerio de Economía y Planificación (MEP) a través de sus canales de comunicación.
De acuerdo con el canal en Telegram donde se informan de las nuevos permisos otorgados a los nuevos actores económicos, recibieron ahora los permisos necesarios 208 nuevas entidades con carácter privado, otras cuatro vinculadas al sector estatal, así como una cooperativa no agropecuaria.
Ya suman 7 654 las mipymes que han recibido luz verde para iniciar su funcionamiento desde que se comenzó a permitir este tipo particular de funcionamiento dentro de la economía cubana, en septiembre de 2021, de acuerdo con un reporte de la agencia Efe.
De las recientemente aprobadas la mayoría se dedicará a brindar servicios gastronómicos y de la construcción, la comercialización de alimentos y prendas de vestir, el transporte de pasajeros, el mantenimiento y reparación de vehículos automotores y motocicletas y la gestión de discotecas, pistas de baile y organización de fiestas cumpleaños, bodas y otros eventos.
Una de las cuatro mipymes estatales de este grupo realizará operaciones de comercio exterior relacionadas con la exportación de aplicaciones y servicios informáticos, de información, ingeniería, y actividades profesionales, científicas y técnicas.
Otra ofertará programación informática, y las dos restantes se ocuparán de transportar pasajeros y mercancías en el sector agropecuario.
Por último, la cooperativa no agropecuaria ahora aprobada se encargará de producir especias, condimentos, vinagre y salsas, precisa el medio.
Las autorizaciones para crear mipymes y cooperativas incluyen una amplia variedad de opciones, desde actividades relacionadas con el alojamiento, diversos servicios como los de belleza y proyectos de desarrollo local, entre otras.
Sin embargo, estos tipos de emprendimientos no tienen acceso a esferas consideradas estratégicas por el Estado, como en los casos de la salud, las telecomunicaciones, la energía, la defensa y los medios de comunicación.
De acuerdo con las leyes vigentes, estos nuevos actores económicos pueden ser privados, estatales, o mixtos, cuentan con personalidad jurídica con características propias y conviven con la empresa estatal socialista, considerada por el Gobierno la pieza fundamental del sistema económico vigente.
Este tipo de empresa fue abolida en Cuba en 1968, pero se persigue con su rescate una actualización del modelo que permita sortear la profunda crisis económica que vive el país, agravada por el impacto de la pandemia de la COVID-19, las sanciones impuestas por administración estadounidense, y el poco efecto de la mayoría de las medidas adoptadas por el gobierno para superar la situación.
Efe/OnCuba