El ministro del Transporte de Cuba, Eduardo Rodríguez Dávila, desmintió hoy la supuesta suspensión del servicio de transporte público en horarios de madrugada en La Habana.
“Denunciamos que estas noticias son falsas. No hay tal suspensión”, afirmó, aclarando que si bien los servicios están limitados por la escasez de combustible, no se ha detenido el transporte.
El funcionario compartió en su cuenta de Facebook varias publicaciones que anunciaban la paralización de la llamada “confronta”. Aseguraban que la supuesta medida fue tomada a partir de “los hechos vandálicos recientes que ponen en riesgo la seguridad”.
Sobre las agresiones contra los vehículos de transporte público, el ministro las calificó de actos que atentan contra la vida de pasajeros, choferes y los propios agresores.
“Quienes se involucran en estos hechos, no se detienen ni un segundo a medir las consecuencias de sus actos, pierden de vista que en ellos está en juego su propia vida, las de los pasajeros y choferes”, señaló Rodríguez Dávila.
Anunció que estos hechos, que no son nuevos en la isla, serán enfrentados con rigor y sobre ellos “recaerán las sanciones que hechos de este tipo merecen”.
La Empresa de Transporte Público de La Habana informó el pasado miércoles que un ómnibus de la ruta P13 fue apedreado en la madrugada, lo que se suma a los frecuentes hechos vandálicos contra las guaguas en la capital.
En sus redes sociales, la entidad denunció el incidente, ocurrido a las 3:35 de la madrugada en la Calzada de Bejucal y calle 4ta. contra el carro 341 que cubría la ruta P13.
Hechos de este tipo se han registrado con frecuencia en La Habana. El último ataque contra ómnibus en la capital ocurrió el pasado 7 de abril, cuando un vehículo se estrelló contra una casa luego de que el chofer fuera agredido.
Atacan con piedras otro ómnibus de transporte público en La Habana
Asimismo, a finales de marzo se produjeron otros dos apedreamientos, por los que fueron dañados un ómnibus de la ruta P11 y otro de la ruta 23. En febrero se reportó un incidente similar contra un P13.
A lo largo de 2024, la Empresa Provincial de Transporte de La Habana también reportó múltiples denuncias relacionadas con actos vandálicos dirigidos a vehículos del transporte público en la capital.
La mayoría de estos incidentes consistieron en ataques con piedras a los ómnibus en diversas zonas de la ciudad, lo cual provocó daños a los vehículos mientras estaban en servicio y transportaban pasajeros que realizaban su recorrido habitual.
Las autoridades apelan a “la unión de la fuerza del pueblo y de la PNR” para “disminuir estos incidentes que afectan la transportación de pasajeros en la capital”.