Un total de 2 132 matrimonios entre personas del mismo sexo se han formalizado en Cuba desde que se aprobó en referendo hace un año la ley que lo permite, informaron este miércoles medios oficiales.
El Código de las Familias fue llevado a consulta popular el 25 de septiembre de 2022, e incluía, además del matrimonio en parejas del mismo sexo, la posibilidad de que estas adoptasen; también, la gestación subrogada y muchas otras cuestiones para regular las relaciones afectivas.
Hoy es un día de alegría porque hace un año nuestro pueblo aprobó en referendo el #CódigoDeLasFamilias. En el colectivo de @CubaMinjus y en presencia de @TeresaBoue y @cuba_ven hablamos de retos, cumplimiento y compromiso por el Código y la no violencia. #CubaEsAmor @DiazCanelB pic.twitter.com/eG73VFlgKg
— Oscar Silvera Martínez (@OscarCubaMinjus) September 25, 2023
El ministro de Justicia, Óscar Silvera, calificó de “satisfactoria” la implementación de estas medidas, que reformaban el anterior código, de 1975. Añadió que su aprobación fue un “reconocimiento de la diversidad, la tolerancia y la igualdad”, según recogió el medio oficial Granma.
La directora general de Notarías y Registros del Ministerio de Justicia, Olga Lidia Pérez, indicó por su parte que la figura legal del Código de las Familias más utilizada en este primer año ha sido el requerimiento de escritura de asentimiento de un cónyuge no titular de una vivienda para que se pueda disponer de ese inmueble.
Otra figura muy empleada ha sido la escritura de consentimiento para las técnicas de reproducción asistida, agregó Pérez según recogió la televisión estatal cubana.
El Gobierno de Cuba no ha ofrecido datos sobre estos y otros procedimientos que han generado cierta controversia en el país, como la llamada gestación solidaria. Una petición de la agencia española al respecto no ha tenido respuesta hasta el momento.
Persisten estereotipos
Granma reconoció que entre los principales retos para la implementación del Código de las Familias están la “escasa preparación” de “algunos profesionales del Derecho” y el “apego” al código previo.
Agregó que “persisten estereotipo, prejuicios y una limitada percepción de la necesidad de adoptar medidas urgentes cuando se trata de proteger a personas en una situación de vulnerabilidad”.
El Código de las Familias obtuvo un respaldo del 66,85 % de los cubanos que acudieron a las urnas.
Se trató de un gran cambio a nivel legal, sobre todo por los antecedentes de homofobia institucional de la revolución cubana, pese a que se han denunciado problemas para la puesta en práctica de los nuevos derechos, por falta de preparación de los funcionarios y falta de articulación legal concreta.