Cuba transita este 27 de septiembre, Día Mundial del Turismo, empozada en unas estadísticas deprimidas, cuando espera para este lunes 29 de septiembre el X Evento Iberoamericano de Turismo Rural y Agroturismo, que tendrá lugar hasta el 5 de octubre y al que asistirán delegados de varios países, según adelantó la agencia Prensa Latina (PL).
El evento es otra de las operaciones promocionales del sector para mitigar las magras cifras de visitantes, dado que durante el primer semestre de este año solo captó un total de 981 mil 856 visitantes internacionales, lo que representa 25 % menos que en igual periodo de 2024.
De acuerdo con datos publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (Onei), será muy difícil que el Gobierno cumpla con su meta de 2,6 millones de turistas para 2025.
Igualmente, los números oficiales sugieren que el país se encamina a desmejorar su marca turística de 2024, la peor en 17 años sin contar los años de la pandemia de la covid-19.
La efeméride
El Día Mundial del Turismo es una celebración anual que tiene lugar el 27 de septiembre desde 1980, instaurada por la Organización Mundial del Turismo (OMT) de las Naciones Unidas en ese mismo año, en la actualidad ONU Turismo, recordó PL.
La fecha fue proclamada en septiembre de 1979 durante una reunión en Torremolinos, España, primer mercado mundial de visitantes, con el propósito de valorizar el turismo como sector económico global, su impacto en el empleo y su capacidad para fomentar la comprensión cultural y la conservación.
En su período 70 de sesiones de 2015, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó a 2017 el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo.
Las actividades y eventos de celebración se centran en destacar las numerosas contribuciones del turismo al desarrollo económico y social, así como en promover prácticas sostenibles en el sector.
Durante estos eventos, se promueve la inversión en educación y formación en el sector turístico, la construcción de infraestructuras sostenibles y la innovación para fomentar el emprendimiento, especialmente entre mujeres y jóvenes, destacó PL.
Criterio experto
Cuba enfrenta una difícil recuperación en su sector turístico tras la pandemia, luchando mucho más que otros países caribeños para volver a los niveles de visitantes internacionales previos al Covid-19, que en 2018 alcanzaron la cifra record 4,71 millones, según datos oficiales (ONEI 2019).
De acuerdo con Paolo Spadoni, profesor de la Universidad estadounidense de Augusta, esta crisis no solo responde a la pandemia, sino también a medidas restrictivas de Estados Unidos que han limitado el acceso de turistas, en particular estadounidenses, y a múltiples problemas estructurales internos.
A pesar de que el Caribe en general ha superado su volumen turístico anterior a la Covid, Cuba aún solo ha podido recuperar poco más de la mitad de su flujo de visitantes.
El auge del turismo cubano entre 2014 y 2017 estuvo impulsado principalmente por la ampliación de viajes desde Estados Unidos durante la Administración Obama, cuando las visitas de ciudadanos de origen no cubano aumentaron significativamente.
Sin embargo, las políticas adoptadas por Donald Trump, como la prohibición de viajes educativos persona a persona y la suspensión de cruceros desde Estados Unidos, provocaron un importante retroceso en 2018 y 2019, con una reducción notable en los ingresos por turismo y la cantidad de turistas que pernoctaban en la isla.
Además de las sanciones estadounidenses, Cuba arrastra problemas profundos y de larga data en su modelo turístico, consideró el académico.
La economía nacional en crisis con frecuentes cortes de electricidad, escasez de insumos, deterioro en la calidad de los servicios y migración del personal del sector han provocado un fuerte deterioro en la experiencia del visitante.
El turismo sigue en retroceso, con Rusia y Canadá con las mayores caídas hasta abril – OnCubaNews
Algunos operadores turísticos extranjeros, como la canadiense Sunwing, han reducido sus operaciones debido a quejas sobre la reducción de la calidad.
En contraste con otros destinos caribeños que han mostrado fuertes recuperaciones y grandes crecimientos, la isla quedó rezagada y se enfrenta a perspectivas poco alentadoras para 2025.
Para revertir esta situación, Spadoni destaca la urgente necesidad de reformas estructurales profundas y una actualización del modelo turístico que permita mayor eficiencia, integración regional y mejor adaptación a las tendencias internacionales.
Solo así podrá Cuba recuperar su competitividad y garantizar que el turismo siga siendo un motor económico sostenible en los próximos años, estimó el experto.
Paolo Spadoni es profesor asociado en el Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de Augusta, y es un reconocido experto en la economía y relaciones internacionales de Cuba, con especial énfasis en el sector turístico, la inversión extranjera y la relación entre Washington y La Habana.