En un futuro, si no es que ya se está haciendo, se escribirá mucho sobre este 2020. Los autores harán de las suyas y nos mostrarán escenas cotidianas de lo que vivimos este inusual año. Incluso, puede que fantaseen cómo será el futuro considerando la pandemia del nuevo coronavirus.
Lo cierto es que la historia real de la COVID-19 aún parece estar lejos de su desenlace final, y aunque la situación ha tomado por sorpresa a todos, tiempo atrás varias personas imaginaron escenarios futuros en los cuales supuestamente viviríamos este año.
Viajes tripulados a otros planetas, invasiones extraterrestres, un mundo regido por la nanotecnología y enteramente conectado a Internet, o dominado en secreto por grandes corporaciones, son algunos de los imaginarios recreados por escritores y cineastas en tiempos pasados, pero con el rasgo en común de estar ambientados en el año 2020.
La ciencia ficción ha sido el género ideal para dar rienda suelta a la creatividad artística y, si bien pocos han podido “dar en el clavo” con la realidad actual, algunos literatos nos han aterrizado sus ideas, acorde a su época para imaginar el futuro-presente.
El cine y lo espectacular
La humanidad, en su afán imaginativo, ha recreado a lo largo de la historia su futuro. Por eso, la ciencia-ficción gusta tanto en el séptimo arte, desde que Georges Méliès nos mostrara su Viaje a la Luna en 1902.
Si damos al reloj hacia atrás, encontramos el filme Viaje al planeta prehistórico, estrenado en 1965 y dirigido por Curtis Harrington, un remake de Planeta Bur, de origen ruso, en el que la colonización del satélite natural de la Tierra da inicio a la historia. Partiendo de ese principio, los humanos (en el año 2020) saltan a la conquista del planeta Venus, donde se encontrarán con un mundo prehistórico un tanto caótico, en el que coexisten dinosaurios, una suerte de especie de hombres-lagarto y seres similares a la raza humana.
Tan solo cuatro años después, la nave Apolo 11 aterrizaba en la Luna, marcando uno de los hitos en la tecnología del siglo XX, un suceso aún en entredicho por la comunidad internacional. De momento, es lo más lejos que ha llegado la humanidad en la Luna, muy lejos de lo planteado por Curtis Harrington en su película, que vio la luz hace más de medio siglo.
Siguiendo el tema de los viajes intergalácticos, a inicios del actual siglo XXI, Brian de Palma nos regalaba Misión a Marte (2000). Básicamente, la película aborda la misión de rescate de un equipo que llega al planeta vecino en busca de un astronauta perdido en una misión anterior, todo en el actual año.
Lo más novedoso de la cinta es que está basada en el plan Directo a Marte, un documento creado por la Sociedad de Marte, organización que ideó un meticuloso plan estructurado para enviar una nave tripulada al planeta rojo. El plan fue creado hace varios años, pero, como se ha apreciado en la realidad, al menos en el 2020 no tendremos una misión de tal envergadura, aunque puede que en pocos años la raza humana llegue por vez primera a Marte, según la estrategia presentada por la NASA.
Con temas más inverosímiles, llegaron a la gran pantalla Pacific Rim, (Guillermo del Toro, 2013); Edge of Tomorrow (Doug Liman, 2014) y A quiet place (John Krasinski, 2018), todas con dos elementos en común: la especie humana debe enfrentarse a seres de otros mundos, siempre en el año 2020.
La ciencia en manos de la ficción
Adaptarse a un mundo enteramente conectado a Internet, o morir… ese es el planteamiento de Aire, la novela de Geoff Ryman presentada en el 2005, sobre una habitante de una comunidad rural y apartada en la “ficticia” República de Karzistán, a donde llega el proyecto AIRE. Este sustituye a Internet por una red neural inalámbrica que enlaza a todas las personas del planeta en tiempo real.
La novela muestra cómo su protagonista, Mae Chung y el resto de su comunidad, pobre y “desconectada” del resto del orbe, tienen que adaptarse a la nueva avalancha tecnológica, si desean sobrevivir en el panorama que se les avecina en el 2020.
Volviendo a la realidad, para el segundo semestre del año estaban previstas las primeras pruebas en humanos de Neuralink, proyecto del magnate de la tecnología Elon Musk, quien pretende con esta empresa enlazar Internet al cerebro de las personas, para así instaurar una sociedad completamente entrelazada al mundo virtual y, en un futuro, a la Inteligencia Artificial. Cualquier parecido con la obra de Ryman es pura coincidencia.
Por otra parte, en Shift 2020. Cómo impactará la tecnología en nuestro futuro (2014), Michael J. O’Farrell, fundador de The Mobile Institute afirmó que, para el momento actual que vivimos, entraríamos en la era de la nanomovilidad, en la que “la telepatía y la teletransportación serán posibles”.
Aun con los avances existentes en esa materia, el mundo descrito en este texto está muy lejos de ser posible en la actualidad. Su autor presagia que, dentro de tan solo 20 años desde ahora, la telepatía y la teletransportación serán de uso común, pero el campo de las nanopartículas es un territorio donde apenas se empieza a avanzar.
Elon Musk’s Neuralink Says It’s Ready for Brain Surgery https://t.co/SuF9DgEWjJ
— Neuralink (@neuralink) July 17, 2019
Sin dudas, uno de los textos mejor pensados para idear el presente es 2020 Vision, libro conformado por un colectivo de autores donde cada uno expone sus predicciones sobre lo que será el futuro medio siglo después. Los textos fueron escritos en 1970 y editados por Jerry Pournelle.
Autores como Larry Niven, Harlan Ellison, Norman Spinrad, Ben Nova, Poul Anderson, A. E Van Vogt, entre otros, ofrecen en este compendio pronósticos, o profecías, de cómo viviríamos la Tierra. Es un ejercicio arriesgado, en el que se mezclan elementos fantásticos con la ciencia-ficción, aunque dejando bien claro que los textos se centran en dar un pronóstico lo más real y factible posible, por muy inverosímiles que resulten ahora los relatos recogidos.
Un dato curioso: los autores que siguieran con vida para el 2020, se reunirían en el Worldcon de ese año, evento predilecto para los amantes de la ciencia-ficción de todo el orbe, con sede en esta ocasión en Nueva Zelanda. Allí debatirían sus predicciones con el público presente.
Lamentablemente, la crisis que vivimos no fue recogida en el texto. Ninguno de estos escritores previó la pandemia global que ha paralizado el orbe, y que ha mudado el escenario físico de la 78 WorldCon al mundo virtual, a celebrarse del 29 de julio al 2 de agosto.
Queda por ver cómo recordaremos en el futuro el año 2020, digno de cualquier novela distópica o película apocalíptica. Rienda suelta a los artistas para imaginar cómo será el fin de la actual crisis y cómo viviremos en un futuro próximo, acorde a lo que aprendamos de la situación actual.
2020, es decir, cuando la realidad supera la fantasía…