El Ballet Nacional de Cuba (BNC) cerrará el Festival Artes de Cuba, que desde el 8 de mayo se celebra en el Kennedy Center, de Washington, Estados Unidos.
La compañía cubana actuará desde este martes y hasta el próximo 3 de junio, con un programa que incluye clásicos del ballet universal como Giselle y Don Quijote, con coreografía de su directora, la prima ballerina assoluta Alicia Alonso.
En declaraciones a la prensa, la Alonso recordó que estas presentaciones coinciden con las cuatro décadas de las primeras actuaciones del BNC en ese importante escenario estadounidense.
“Hace 40 años tuve la experiencia de mostrar allí por primera vez al público norteamericano los logros del Ballet Nacional”, dijo a la agencia Prensa Latina antes de unirse a su compañía en la capital estadounidense.
“No deja de emocionarme que precisamente en este aniversario, volvamos con la compañía al Centro Kennedy, el lugar donde se produjo aquel primer encuentro, que recordamos por el caluroso recibimiento ofrecido”, añadió.
En las presentaciones en el Ópera House del Kennedy Center bailarán las principales figuras del BNC, entre ellas Viengsay Valdés, Patricio Revé, Sadaise Arencibia, Raúl Abréu, Gretel Morejón y Dani Hernández, quienes asumirán los roles protagónicos.
Para la primera bailarina Viengsay Valdés, en las presentaciones en Washington D.C. la compañía cubana mostrará “esas raíces que nos distinguen del resto de los bailarines de otras academias del mundo”.
El BNC llega a Washington luego de actuar en el Teatro Auditorium de Chicago y en el Centro David A. Straz Jr. para las Artes Escénicas, en Tampa, como parte de una gira por los Estados Unidos.
Tras cerrar el festival Artes de Cuba, continuará su periplo estadounidense del 6 al 8 de junio, al Centro de Artes Escénicas de Saratoga Springs, en el estado de Nueva York, con capacidad para más de 25,000 espectadores. Allí se exhibe por estos días una exposición fotográfica que celebra los 75 años del debut de Alicia Alonso en el personaje de Giselle.
El Festival Artes de Cuba ha reunido en el Kennedy Center a más de 400 artistas cubanos, radicados dentro y fuera de la Isla. Considerado el mayor espectáculo de la cultura cubana presentado en los Estados Unidos, integró en su programa unos 50 espectáculos y muestras que combinan música, danza, teatro y artes plásticas.