El 8 de marzo se estrenó la serie de contenido histórico El grito de las mariposas, basada en hechos reales y ambientada entre 1930 y 1961. La historia de resistencia y lucha de las Hermanas Mirabal (Minerva, Patria y María Teresa) contra la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo en República Dominicana, se entrelaza con el relato ficticio de una bailarina española que años después cuenta su pasado.
Creada por el director y guionista argentino Juan Pablo Buscarini (uno de los productores de la comedia Un cuento chino, Premio Goya, 2012), El grito… está compuesta por trece capítulos de 45 minutos cada uno dirigidos por Mariano Hueter, Leandro Ipiña e Inés París.
El proyecto fue realizado por las productoras Pampa Films y Gloriamundi Producciones y filmado en distintas locaciones de Colombia con una reconstrucción de época casi exacta.
No es la primera vez que desde la televisión o el cine se cuenta la vida de las Hermanas Mirabal, asesinadas el 25 de noviembre de 1960. En 2010, por ejemplo, se publicó la película Trópico de sangre, con la participación de César Évora, y desde la literatura sobresale el título En el tiempo de las mariposas (1994), novela de la dominicana Julia Álvarez que contó con una adaptación teatral en la que intervino Broselianda Hernández (1964-2020). En la literatura, imposible no recordar La fiesta del Chivo, del Nóbel de Literatura Mario Vargas Llosa.
El grito… ha sido reconocida por la recreación del Santo Domingo de la época, el vestuario, el maquillaje y hay quienes ven en la historia un guiño entre Trujillo y el exproductor estadounidense Harvey Weinstein en cuanto a los abusos sexuales desde el poder. No en vano el proyecto fue lanzado el Día Internacional de la Mujer.
Por otro lado, se se tiene en cuenta que “El Chivo” usó la difusión del merengue como ritmo en todo el territorio dominicano como estrategia política para obtener la simpatía de la clase humilde y campesina, la banda sonora no está a la altura de la serie, que recrea la farándula dominicana y hasta la persecución a un cantante homosexual.
No obstante, gracias a la nueva propuesta hay un público joven que asiste a uno de los episodios más tristes de Quisqueya y de América Latina. Salvar la memoria es un acto que siempre paga.
“El proceso de casting fue complicado”
Casi una semana después del estreno de El grito de las mariposas ya podía verse en Cuba gracias a “El Paquete”, esa alternativa independiente de distribución audiovisual. Desde que se anunció la participación de Luis Alberto García (1961) en la piel de Trujillo y de Héctor Noas (1958) como su hermano Petán, despertó el interés entre los admiradores de estos actores cubanos de reconocida trayectoria y garantía de calidad.
“No todo el mundo en Cuba sabe que la serie está en ‘El Paquete’ prácticamente desde el día siguiente de su liberación en las plataformas. Sí me han llamado amigos, y por las redes sociales me envían muchos mensajes personas que la están viendo y les encanta no solo mi trabajo, sino la serie en sí”, cuenta a OnCuba Héctor Noas.
“Fue importante que el coach de acento de la serie, Michel Curiel (dominicano y ya amigo) siempre me dijo que mi trabajo en ese sentido estaba siendo meritorio. Eso permitió que el director Leandro Ipiña me pidiera que improvisara en muchas ocasiones, dándole una verdad y una energía especial al personaje de Petán”, añade uno de los rostros más conocidos de los medios cubanos y no solo.
Noas es un actor formado en el más puro rigor. Para demostrarlo están las cintas Los dioses rotos (Daranas, 2008); Verde Verde (Pineda Barnet, 2011); Conducta (Daranas, 2012); Sergio & Serguei (Daranas, 2017), entre otras, filmadas dentro y fuera de Cuba.
Por tanto, no asombrará al público cubano su desenvolvimiento e histrionismo, aunque emociona verlo en la piel de un ser como José Arismendy Trujillo Molina, Petán Trujillo, considerado el pionero de los medios en República Dominicana, famoso por intimidar a sus competidores y detestable por las atrocidades en las que fue cómplice de su hermano. Con esos insumos, nada desdeñables para un actor de su talla, Héctor Noas armó el personaje:
“El proceso de casting fue complicado por algunas características: una parte lo hice en Cuba, donde la conexión no es suficiente como para hacerlo online, y por otra estábamos en medio de la pandemia, prácticamente encerrados y eso dificultaba todo. Yo tuve conocimiento del proyecto gracias a la directora de casting Libia Batista y decidimos enviar, en principio, unas fotos y el currículum. Ella tuvo que auxiliarse de una actriz amiga que estaba fuera de la isla y podía tener mejor comunicación. Las fotos y el currículum funcionaron y pidieron ver algún material adicional. Envié links de materiales que tengo en YouTube y lo otro fue hacer dos escenas donde se me proponía el personaje de Petán Trujillo. Por suerte estaba de viaje en ese momento y podía buscar información y enviar la prueba sin tantas dificultades”.
Noas encontró poca referencia sobre Petán en las redes, “pero lo que encontré me dio pistas para construir su imagen, ya que físicamente no teníamos casi parecido. Tengo conocimientos de maquillaje que puse en práctica de inmediato. Diseñé y trabajé sobre mis cejas, unas parecidas a las del personaje y que forman parte de su identidad. Improvisé las dos escenas de la prueba y las envié. Pasaron los días y a la semana de mi regreso a Cuba, el showrunner y creador de la serie me pidió hablar conmigo sobre el personaje y de alguna forma hacer un casting definitorio entre él, la actriz Susana Abaitua y yo”.
“Ya estaba cerrado todo por la pandemia. Normalmente esos castings se hacen sin dificultad, pero yo con mi pésima conexión no podía comprometerme. Juan Pablo Buscarini es un hombre con una bondad y un sentido de la empatía que me ganó desde la primera conversación. Me explicó lo que quería con el personaje, sus características principales, sus conflictos más evidentes. Para él era importante crear un personaje que tuviera muchos matices, que fuera contradictorio en su desarrollo. Como hay tan poca información, podíamos permitirnos la licencia de crearlo y enriquecerlo. Me pidió entonces, ya que no podíamos hacer el casting online, que le enviara esas dos escenas en forma de monólogos. Lo hice y se determinó que haría el personaje cuando se abriera todo y pudiéramos planificar fechas de rodaje. Pasaron meses, pero siempre se mantuvo el contacto y el interés mutuo por llevar adelante el trabajo”, cuenta Héctor Noas a OnCuba.
Hay escenas en El grito de las mariposas en las que Noas y Luis Alberto García se roban la atención del espectador. Luis Alberto, sin caricaturizar, presenta a un Trujillo arrogante e inseguro al mismo tiempo. Un ególatra corroído por el miedo, como suele suceder con algunos poderosos. Por su parte, Héctor Noas se “esfuerza” en destacar lo más desagradable de la personalidad de Petán: la incontrolable envidia por su hermano y su aspecto de acosador sexual.
“A pesar de conocernos y admirarlo profundamente como actor, no habíamos tenido la oportunidad de trabajar en algo en lo que pudiéramos implicarnos. Muchos años atrás coincidimos en la película Mambí (1997), pero fue algo más bien referencial. Cuando supe que él interpretaría a Trujillo, fue como una bendición. Conozco su trabajo, el sentido de la verdad que pone en todo lo que hace, y tener en sus manos semejante personaje sabía que lo aprovecharía al máximo. Por lo tanto, yo tendría como contraparte a alguien en quien confiaba plenamente como actor”.
“Mientras mejor están tus contrapartes, hay mayor posibilidad de hacer un buen trabajo y en este caso tenía esa garantía. Cuando llegué a Colombia a filmar Luis Alberto llevaba casi un mes allá. Fue muy lindo lo que hizo el primer día que grabamos juntos: se paró frente al equipo y dijo que estaba ‘cumpliendo uno de sus sueños’ al trabajar conmigo. Disfruté mucho las escenas con él y con la maravillosa actriz española Susana Abaitua”, confiesa Noas.
¿Qué tiene de especial para ti esta serie?
Es una potente historia, basada en algunos hechos reales, muy bien escrita, con personajes excelentemente diseñados, un elenco de actores brillantes, cada uno en sus personajes, con un equipo de dirección con tres realizadores magníficos y encima, se estrenó en plataformas tan importantes como Disney+, Star+ y Hulu. Es lo que se conoce como “estar en ligas mayores”.