Cynthia de la Cantera
Como antesala del Festival Jazz Plaza, regresa el JoJazz, concurso ideado para la presentación de noveles figuras de la jazzística cubana. En esta ocasión, y del 13 al 16 de noviembre, competirán 26 participantes en las modalidades de interpretación mayor, interpretación menor, composición y pequeño formato, con un jurado presidido por Yassek Manzano y Michel Herrera, y conformado por Emilio Martiní, Alexis Bosch, Alejandro Falcón, Yissy García, Enrique Plá, entre otros.
“El JoJazz como premio legitima al artista”, explica Yentsy Rangel, musicóloga del evento, “de ahí que muchos jóvenes se acerquen buscando visibilidad; pues es un concurso que se ha legitimado primero por el jurado que lo presidió, que incluyó figuras como Chucho Valdés, y segundo por los muchachos que han competido en él, que ya hoy han demostrado tener una obra bien sólida”.
Para la noche inaugural, los premios JoJazz se han unido en un concierto homenaje a Pablo Milanés, que abrirá con la interpretación del clásico Yolanda por parte del violinista William Roblejo: “Tenemos un repertorio de Pablo muy bien escogido que, como mismo él diría, no es perfecto, pero se acerca un poco a lo que hemos soñado. Tenemos variantes con cuartetos, clarinetes, saxofones, guitarras, etc. Ya el propio Pablo nos escuchó por teléfono desde el estudio, y está muy entusiasmado con la idea”, comentó Alexis Vázquez, director artístico.
Entre las galas previstas están el Concierto Especial de la Joven Jazz Band, dirigida por el maestro Joaquín Betancourt, con la interpretación de obras compuestas por anteriores ganadores en esa modalidad; y Los Pianos JoJazz, integrado por tres jóvenes pianistas que interpretarán su música para al final unirse en una pieza del matancero Alejandro Falcón, muy influenciada por las sonoridades que más se asocian a esa ciudad, los danzones.
“Algo de lo que pudiera comentarse en estos momentos es qué le queda a los jojazz después de haber ganado el premio. Esa es una debilidad que tenemos. Hace unos años, el ganador tenía la oportunidad de grabar un disco, hoy ya no sucede así, porque la realidad impone lamentablemente otra dinámica. Por tanto, hay que pensar qué se lleva ese joven más allá de la legitimación”, señaló Yentsy Rangel.
Actualmente, el JoJazz representa uno de los pocos espacios competitivos con los que cuentan las nuevas generaciones de jazzistas de todo el país. De ahí que convoque a estudiantes de nivel medio y superior de toda la Isla que, incluso sin dedicarse propiamente a este género, buscan a través del jazz la oportunidad y el reconocimiento que el concurso les ofrece.
