La obra es una versión, debida a Cristina García, de Las tres hermanas, de Antón Chéjov, bajo la dirección de Adrián Alea. La acción se sitúa en el Miami de 1985, en el contexto de una familia cubana de emigrantes. Ya puede suponer el lector de qué va la cosa: el reacomodo doloroso, el trasvase de modos y costumbres a otro ámbito cultural, la incertidumbre por lo que vendrá, la añoranza de lo dejado atrás…
Desde su establecimiento en los Estados Unido, en 2016, Catherine Núñez se ha presentado, con diversas agrupaciones, en Texas, Virginia, Maryland, Florida, Nueva York y Washington. En 2018 se afilia al grupo Gala, compañía que tiene como objetivo desde su creación, en 1976, el fomento y la divulgación de la cultura latina en ese país.
Catherine nació en La Habana. De muy joven participó en dos filmes cubanos: El viajero inmóvil (Tomás Piard, 2008) y Martí, el ojo del canario (Fernando Pérez, 2011). En 2015 es dirigida por Jazz Vilá en las piezas teatrales Rascacielos y Eclipse, con exitosas presentaciones en La Habana y Santo Domingo.
Con Gala se ha desempeñado en importantes papeles en piezas como El perro del hortelano (Lope de Vega), Doña Rosita la soltera (García Lorca), En el tiempo de las mariposas (versión de Caridad Svich de la novela homónima de Julia Álvarez) y Exquisita agonía (Nilo Cruz).
Minutos antes del estreno mundial de Las hermanas Palacios sostenemos este diálogo con la actriz.
¿Cómo fue tu formación artística en Cuba?
Comencé a los 8 años en cursos de actuación y pantomima para niños, impartidos por la maestra Elsa Hernández. Crecí tomando talleres de locución, dramaturgia, expresión corporal, voz y dicción, modelaje y canto. A los 15 años me uno al grupo Mefisto Teatro, liderado por Alejandro Milián, donde participé en las laureadas obras Gatos (versión de Cats, de Lloyd Webber) y Vaselina (versión de Grease, la obra de Jacobs y Casey). En 2014 me uno a Jazz Vilá Projects, que se convertiría en mi familia teatral en La Habana.
Cuéntanos de tus inicios en Estados Unidos. ¿Te costó integrarte? ¿Tuviste que asumir otras ocupaciones alejadas de tu profesión?
Vine a Estados Unidos con una maleta de sueños, y eso fue lo que me propulsó a seguir mi camino. Parecía imposible, en el frío Utah, volver a actuar. Me permití ese espacio para la transición; asimilar un nuevo país, su cultura, su idioma. Incluso cuando me levantaba muy temprano a trabajar en una tienda, en un almacén, en un centro de llamadas, siempre seguí creyendo en mis sueños.
Fuera de Cuba has compartido escenario con grandes actrices cubanas, como Broselianda Hernández. ¿Qué recuerdos tienes de ella?
¡Ah, Brose! Trabajamos juntas en 2018 en Teatro GALA con la obra En el tiempo de las mariposas. Habíamos coincidido brevemente en La Habana en Rascacielos, pero fue en Washington DC donde convivimos por dos meses, durante el proceso de montaje.
Brose es la artista más artista que he conocido. Me enseñó la diferencia entre ser actriz y ser artista. Una mujer apasionada, gran lectora, consumidora del buen arte, culta, bella, amante del tango… Una niña. Una vez me dijo: “Te tiemblan las manos cuando actúas. A mí me encantan los actores que le tiemblan las manos”.
¿Cómo ha sido tu experiencia de trabajo con Jazz Vilá? ¿Hay planes con él en el futuro inmediato?
Recuerdo que en La Habana estaba tomando un curso de actuación con Jazz Vilá. Era un día lluvioso cuando nos reunimos en la sala Adolfo Llauradó para la clase de esa tarde. Yo no quería ir. Por aquellos días estaba muy triste porque no me habían aceptado en la Escuela Nacional de Arte. Jazz había acabado de estrenar su exitosa obra Rascacielos. En la oscuridad de la sala me preguntó si había visto la obra. Con mucho entusiasmo asentí. Me dijo: “Tengo una actriz que no puede estar en la función de la semana que viene. Te subes tú al escenario”.
Jazz vio mi talento cuando yo dudaba y me empeñaba en esconderme y callar. Jazz siempre ha creído en mi fuerza. Hoy tengo la dicha de llamarlo amigo.
¿Qué representa el Grupo de Artistas Latinoamericanos (GALA) en tu vida profesional? ¿Qué papel tiene este colectivo dentro del teatro hispano que se hace en USA?
GALA ha sido mi familia artística desde 2018. Fue el primer teatro profesional que me abrió las puertas en este país. Siempre regreso a GALA. Hay una magia diferente cuando puedes actuar en tu lengua materna, esa belleza y profundidad del español. GALA lleva produciendo teatro desde hace casi 50 años en la capital de Estados Unidos. Una organización que se ha mantenido uniendo a artistas de Iberoamérica y apostando por contar nuestras historias
¿Por qué es noticia tu inclusión en el elenco de Las hermanas Palacios si llevas más de cinco años trabajando con ese colectivo? ¿Acaso María es el personaje de mayor complejidad que has interpretado hasta ahora?
María es, desde luego, uno de los personajes con más riqueza que he interpretado. Una mujer de nuestro tiempo, una cubana viviendo en el exilio con una familia que fue criada con valores obsoletos para la sociedad actual. Ella enfrenta una situación de violencia con su esposo. Es una mujer que ama, se enamora, pierde y gana. Como la vida misma. Quizá por eso sea tan compleja.
Háblanos de tu trabajo como narradora de audiolibros para la Biblioteca del Congreso.
Llevo trabajando como narradora de audiolibros para la Biblioteca del Congreso desde 2018, en su división en español. He encontrado en esta forma de arte otra pasión, la de contar historias sólo con mi voz. Puede ser un trabajo muy aislado estar encerrada en un estudio grabando por horas, pero cuando la historia me toca, cuando los personajes me visitan, es una fiesta.
En 2023 participaste en la filmación de un cortometraje en La Habana.
Gabriela Balloqui, mi amiga de la infancia, quería filmar Ceremonias, su primer cortometraje como directora, y escribió el guion para mí. Comenzamos juntas en los talleres de actuación cuando niñas. Verla crecer y cumplir sus sueños fue un regalo. El arte y la amistad trascienden fronteras.
¿Hacia cuáles objetivos estás encaminando tu carrera?
En estos momentos me gustaría jugar más con el cine en inglés, salir de mi zona de confort.
¿Hay algún personaje del repertorio teatral universal que te quite particularmente el sueño?
Blanche Dubois, la protagonista de Un tranvía llamado deseo.
Dentro del cine cubano, ¿con cuál director te gustaría trabajar? ¿Y en el plano internacional?
Tengo pendiente trabajar con Fernando Pérez, Michel Franco, Almodóvar, Guillermo del Toro y… ¡tantos otros!
¿Cuáles son tus paradigmas en el mundo de la actuación?
Jessica Chastain, Viola Davis, Anthony Hopkins, Glenn Close, Blanca …
¿Piensas dirigir alguna vez?
Sí. Lo pienso y me asusto. Ya llegará…
Eres habanera. ¿Qué vínculos emocionales tienes con esa ciudad?
Soy habanera de Alamar. La Habana es mi niñez, mi familia, mis padres, mis amigos, mi peso, mi raíz.
¿Quién eres? ¿Cómo crees que te ven los otros? ¿Cómo te gustaría que te vieran?
Soy tantas cosas. Soy la luz y la oscuridad. Soy Cathy.
Qué: Las hermanas Palacios (The Palacios Sisters). Adaptación de Cristina García de Las tres hermanas, de Antón Chéjov. Director: Adrián Alea. En Español, subtitulada en Inglés.
Dónde: Gala Theatre. 3333 14th Street, NW. Washington, DC 20010.
Cuándo: Del 1ro al 25 de febrero de 2024. Jueves a sábados, 8 pm; domingos, 2 pm.
Cuánto: $48, de jueves a domingo; $35, adultos mayores, militares y grupos de más de 10 personas; $25, personas de 25 años o menos; Noche de GALA, $55 por persona. Para adquirir boletos de grupos de más de 10 personas, usar el código de descuento 10 Plus.