El año que recién culmina fue muy intenso en materia beisbolera para Cuba. El campeón de la serie nacional cubana en la temporada 2012-2013 representaría a la mayor de las Antillas después de 53 años de ausencia en la Serie del Caribe. Villa Clara tuvo ese privilegio en los primeros días de febrero en Islas Margarita, y su actuación no pudo ser peor al ocupar el último lugar del torneo.
Sin embargo, el béisbol cubano tuvo buenas prestaciones internacionales durante 2014 lo que lo avaló como el mejor deporte colectivo del año. En la categoría de mayores una selección cargada de jóvenes talentos venció en cinco ocasiones a los universitarios estadounidenses. Peloteros como Luis Yander la O, Yaisel Sierra y Vladimir Gutiérrez mostraron buenas credenciales.
Cuba obtuvo la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz en un torneo de dudosa calidad. Un equipo con jugadores experimentados perdió con un equipo colombiano en una cuadrangular celebrada precisamente en el país cafetero.
En las categorías inferiores Cuba ganó un campeonato mundial de béisbol después de nueve años sin asirse una corona en cualquier nivel. Desde el mundial para mayores en 2005 celebrado en Holanda nuestro deporte nacional no conseguía un título universal. El mérito lo obtuvo el equipo sub-15 dirigido por el villaclareño Noel Guerra que en la final derrotó a la selección estadounidense.
La categoría juvenil vio coronarse de manera compartida a Cuba con Estados Unidos. Debido a las inclemencias del tiempo el comité organizador decidió entregar dos medallas doradas. Atletas con trayectoria en nuestras series nacionales como Cionel Pérez, Víctor Víctor Mesa, Luis Rober Moirán y Julio Pablo Martínez asumieron el mayor protagonismo.
Este fue el año en que Alfonso Urquiola llevó a Pinar del Río nuevamente a un título nacional en dura porfía frente a los cocodrilos de Matanzas. Por primera vez, después de la instauración de las series nacionales, cuatro peloteros cubanos jugaron de manera autorizada en la pelota profesional japonesa con buenas actuaciones de Yuliesky Gourriel y Alfredo Despaigne lo que les garantizó un jugoso contrato a ambos para la próxima campaña.
Con respecto al béisbol de las Grandes Ligas fue un año muy importante para los jugadores cubanos. Varios peloteros debutaron con destaque absoluto para José Dariel «Pito» Abreu que alcanzó la condición de Novato del Año por unanimidad, y estampó números de otra galaxia: 36 jonrones, 107 impulsadas, 317 de AVE, SLU de 581 y OPS de 964. Otros como los lanzadores Odrisamer Despaigne (4-7 PCL 3,36) y Roenis Elías (10-12 PCL 3,85) tuvieron números aceptables para su primera temporada en las mayores.
Durante la campaña el cerrador de los Rojos de Cincinatti, el holguinero Aroldis Chapman, rubricó el record de más ponches por nueve entradas en una temporada de la MLB con asombrosa marca de 17,67. Por primera vez en la historia cinco cubanos participaron en el Juego de las Estrellas: los mencionados Pito y Chapman, Yoennis Céspedes, Alexei Ramírez y Yasiel Puig.
El granmense Céspedes por segundo año consecutivo ganó el Derby de los jonrones. Yasiel Puig igualó una marca negativa en el All Star Game al poncharse en tres ocasiones. El Misil Cubano Alexei Ramírez llegó a los mil indiscutibles en la MLB en otro hito poco destacado en este 2014.
El año fue propicio para ver jugosos y exorbitantes contratos a peloteros nacidos en la Isla. Los 68 millones de Pito Abreu ya han sido justificados. Quedan en la incógnita los 68.5 brindados a Yasmani Tomás y los 72 millones a Rusney Castillo. ¿Justificarán estos dos atletas cifras tan respetables?
Jugadores de próspero futuro en el béisbol estadounidense como Raicel Iglesias, Dariel Álvarez y Gerardo Concepción jugaron en la Liga de Prospectos de Arizona. Otros como el tunero Roberto Baldoquín, y los villaclareños Dian Toscano y Misael Siverio acaban de ser contratados lo que asegura la continuidad de los cubanos en la gran carpa.
El 2014 prácticamente cerró con la celebración del Coloquio Nacional Museo y Salón de la Fama del Béisbol Cubano: de la utopía a la realidad. Un grupo de entusiastas liderados por el cineasta Ian Padrón lograron que después de 54 años reabriera el Salón de la Fama, y fueran elegidos cinco inmortales de la etapa 1864-1961, y cinco desde 1962 hasta la actualidad.
Noticia esperada durante los meses finales del año fue la sustitución de Higinio Vélez Carrión como Director Nacional de Béisbol, cargo que ocupó el pinareño Heriberto Suárez. No hay mal que dure cien años…
El cierre del año tuvo como colofón la celebración del 140 aniversario del primer juego oficial del béisbol cubano con el Juego de las Estrellas en la provincia de Granma, y la exaltación de los diez inmortales cubanos entre el 27 y el 28 de diciembre. El 2015 traerá nuevas historias entre bolas y strikes.