Renier González Jr.
Después de una jornada frenética en Texas y Arizona, los fanáticos del béisbol no pueden pedir más. Las Series de Campeonato de las Grandes Ligas están al rojo vivo luego de dos partidos espectaculares, que se definieron por margen de una carrera con remontadas históricas incluidas, además de mucho drama y polémica.
Los Astros derrotaron 5-4 a los Rangers para ponerse a un triunfo de su tercera Serie Mundial seguida. Por su parte, los Diamondbacks vencieron 6-5 a los Phillies para igualar una serie que muchos pensaron que terminaría rápidamente.
Si hay un dato que define perfectamente lo ocurrido es el siguiente: fue la primera vez en los anales de los playoff que varios equipos ganaron en una misma jornada cuando iban perdiendo por varias carreras en la octava entrada o más tarde, según Sarah Langs. ¡Impresionante!
Desenfreno en el “salvaje oeste”
En la conferencia de prensa después del partido entre Houston y Texas , el foco de atención estuvo sobre los involucrados en el hecho que vació las bancas, sin embargo, Dusty Baker describió al juego 5 de la siguiente manera: “Esa fue una enorme victoria. Este juego pasará a la historia”, ratificó el timonel de los Astros.
El idilio que tienen los siderales con el éxito fuera de casa continuó, ahora han ganado 19 de sus últimos 22 choques fuera del Minute Maid Park. Por si fuera poco, de 9 choques que jugaron contra Texas en el Globe Life Field, perdieron solo uno (influyendo playoff). En ese lapso, los Astros superaron en carreras a sus vecinos estatales por un amplio margen (79-36).
En el partido de anoche, los abridores de ambos conjuntos lograron pasar de la quinta entrada, pero, una vez más, Montgomery le ganó la partida a Justin Verlander. El zurdo laboró en 5.1 innings a ritmo de dos carreras y cinco jits, uno de ellos cuadrangular. Por su parte, el tres veces ganador del premio Cy Young permitió cuatro anotaciones, seis jits y dos batazos de vuelta completa en 5.2 entradas.
En la actuación de Verlander hubo un punto de inflexión, me refiero a la parte baja del sexto episodio, cuando el derecho recibió el mayor castigo. El derecho comenzó lanzándole a Marcus Semien con 68 envíos y esta fue la secuencia hasta que explotó:
* Marcus Semien, en cuenta de 1-2, fue retirado con un fly al campocorto
* Corey Seager, en cuenta de 1-1, conectó un doble hacia el jardín derecho
* Evan Carter en cuenta 0-0, conectó un sencillo al jardín izquierdo
* Adolis García en cuenta 0-0, conectó un jonrón de tres carreras por el jardín izquierdo.
Como mismo reconoció Baker, el lanzamiento contra Adolis fue un error de ubicación. El avileño lo alineó por todo el jardín izquierdo para poner el juego 4-2 favorable a Texas. Tanto Adolis como Carter lograron los únicos hits contra Verlander al primer lanzamiento, la agresividad rindió frutos. Hasta ese momento, en las 42 entradas de la Serie de Campeonato, esa sería la primera ocasión en la que el equipo local tomó la delantera, según Hosted Stats.
No podemos pasar por alto la celebración que hizo “El Bombi” después del jonrón: comenzó con un “bat flip” y terminó con un trote por las bases de 30.48 segundos que cerró con su característica zancada en el home plate.
Dos episodios más tarde y todavía con ventaja para los Rangers, Bryan Abreu entró a lanzar en la baja del octavo por Houston. Comenzó su actuación con una base por bolas a Evan Carter en cinco picheos y, al próximo envío, las bancas se vaciaron: una recta de 99 millas golpeó el brazo izquierdo de García, quien sin pensarlo dos veces se volteó enfurecido hacia Martín Maldonado. Lo que vendría a continuación sería un retraso de casi 12 minutos y tres expulsiones: Abreu, García y Baker.
¿Casualidad? Bueno, Abreu solo golpeó a un bateador derecho en la pasada temporada, es demasiada coincidencia que su segundo golpeado fuera el hombre que había volteado el marcador con un bombazo de tres carreras.
“Creo que estamos en la postemporada, ¿sabes? Es el momento. Si le pegas a una pelota así, vas a celebrarlo. No creo que esa sea una justificación para ellos racionaran de esa forma, no creo que sea la manera correcta” dijo García cuando le cuestionaron sobre su celebración.
Baker negó en todo momento que el pelotazo fue intencional. “Golpearlo no tenía ningún sentido para mí. Estábamos perdiendo por dos carreras y con la serie empatada. Le tratamos de lanzar de manera diferente a como pegó el jonrón, por eso fuimos arriba y hacia dentro, pero, cuando lanzas rectas de 97 millas allí se puede escapar alguna”.
El timonel de los Rangers, Bruce Bochy, se mantuvo en terreno neutral: “¿Quién sabe? El tipo pega un jonrón de tres carreras; la próxima vez viene le dan pelotazo. Realmente no importa. Yo también estaría molesto si fuera él. Pero como dije, tomó demasiado tiempo volver a poner las cosas en orden, eso es lo que me frustraba”.
Bochy puede estar en lo cierto, el retraso pudo cambiar las cosas y hasta el propio Maldonado reconoció en el postgame de Fox que esa situación hizo despertar a los Astros. En esos 12 minutos de tiempo muerto, Ryan Pressly pudo calentarse sin problema antes de entrar a colgar un importante cero.
Lo que ocurrió en la parte alta del noveno fue una secuencia de momentos únicos. Yainer Díaz conectó su primer jit de la postemporada como emergente por Jeremy Peña, y Jon Singlenton, en su primera comparecencia de por vida en playoff y su primer turno en los últimos 20 días, logró una base por bolas viniendo desde la banca. Finalmente, en cuenta de 1-0, José Altuve le hizo un swing a un cambio de José Leclerc para consolidar la remontada con un jonrón de tres carreras. Ese fue su cuadrangular 26 en octubre y se puso a solo tres del líder histórico, Manny Ramírez.
Altuve, además, se quedó solo como el hombre con más jonrones (11) en la historia de la Serie de Campeonato de la Liga Americana. El venezolano rompió el empate con el propio Ramírez (10) y abrió la brecha respecto a George Brett (9) y Bernie Williams (9).
“Lo hemos hecho tantas veces. Nunca nos rendimos hasta el último out”, dijo Altuve sobre la remontada, algo que no es nuevo para él, pues en el 2019 dio el batazo decisivo en el juego seis de la Serie de Campeonato contra los Yankees, aquel histórico walk-off contra Aroldis Chapman.
Pero aún Pressly tendría que regresar en el noveno para lanzar su segunda entrada, algo que solo hizo en una ocasión en la pasada temporada regular. Mitch Garver y Jonah Heim abrieron con sencillos consecutivos, pero Marcus Semien fue víctima de un gran fildeo del suplente Grae Kessinger, quien devoró una línea del camarero de los Rangers.
Muchos cuestionaron por qué no tocaron la bola con Semien, aunque creo que el debate está de más. Semien solo ha tocado siete veces en 1343 partidos en temporada regular y en postemporada jamás lo ha hecho en 19 choques. Además, estamos hablando de uno de los tres mejores bateadores del equipo. No sería bueno quitarle el bate.
Le quedaban dos outs a Pressly y logró sacarlos con siete picheos: retiró a Seager con un largo fly al jardín central y ponchó al novato sensación, Evan Carter. Del octavo al noveno inning, la probabilidad de victoria de los Rangers fue de 96 % a 0 %.
Ahora la Serie regresará al Minute Maid Park, donde los Astros están jugando para 1-3 en la postemporada. Ahora necesitarán al menos una victoria en los dos juegos que restan si quieren defender su corona. Así quedaron pactados los duelos de los abridores:
Juego 6: Nathan Eovaldi vs Framber Valdez
Juego 7: Max Scherzer vs Cristian Javier (Si es necesario).
La lucha por el viejo oeste no termina, veremos, quien dirá la última palabra.
Arizona aprieta a los Phillies
Torey Lovullo repite una frase sistemáticamente: “Este equipo jamás se rinde”. Hasta ahora, eso ha sido parte de su éxito, cuatro de las siete victorias que han conseguido los Diamondbacks en estos playoff han sido por la vía de la remontada.
Este viernes no fue la excepción. Mientras que al profundo bullpen de los Phillies le costaba lanzar strikes, los bateadores de Arizona comenzaron a lograr varios turnos de calidad para consumar otro asombroso regreso. El resultado de ello fue la segunda victoria de Arizona en una Serie de Campeonato en 22 años.
“Realmente no puedo describir cómo me siento porque no he tenido la oportunidad de interpretar lo que acaba de pasar. Sucedió muy rápido y fue solo un grupo de jugadores que se unieron e hicieron el trabajo”, dijo Lovullo sobre la victoria de su equipo para igualar la serie a dos victorias por bando.
Lo cierto es que casi todos los jugadores contribuyeron al triunfo de una manera u otra. Por ejemplo, Lourdes Gurriel Jr. hizo una atrapada espectacular en el segundo inning para robarle un extrabase a J.T Realmuto, y también aportó un doble en la entrada donde consolidaron la remontada.
En general, todos los bateadores de Arizona se embasaron, y el bullpen, si bien no tuvo una jornada magnífica, contó con labores positivas de Kevin Ginkel, Joe Mantinply, Luis Frias y Paul Sewald. Si las combinamos, obtenemos 4.1 innings en blanco, tres jits, seis ponches y ninguna base por bolas.
Al otro lado de la balanza tenemos a los relevistas de los Phillies, que no pudieron aguantar una ventaja de tres carreras. Por segunda noche seguida, Craig Kimbrel cargó con la derrota. En general, Gregory Soto, Orion Kerkering, Kimbrel y José Alvarado, enfrentaron a 13 bateadores y solo consiguieron comenzar a dos con strikes. De igual forma, solo consiguieron 25 strikes en 54 lanzamientos (46.3 %).
Si hay un jugador que nos recordará por mucho tiempo el juego cuarto de esta serie es Alek Thomas. El joven pasó gran parte del año batallando con su ofensiva, incluso, tuvo que ser bajado a las Ligas Menores para trabajar con su swing.
En los dos primeros encuentros contra los Phillies, Thomas se fue de 5-0 con un ponche y su manager lo tuvo que llevar a la banca en los últimos partidos, pero en el octavo inning lo sacó de emergente por Emmanuel Rivera.
“Antes de consumir ese turno, dije que se quedara conmigo mientras estuviera en home porque podría cambiar mi plan. Para ser honesto, tal vez iba a pensar en tocar con Lawlar en ese lugar y luego usar a Alek en un momento diferente. Por suerte, tuvo un momento increíble y tiene mucho de qué enorgullecerse”, explicó Lovullo.
Kimbrel trabajó a Thomas con lanzamientos adentro y, después que le mostró tres rectas de cuatro costuras seguidas, decidió atacarlo en el otro extremo de la zona. La conexión viajó 412 pies hasta caer en la piscina del estadio entre el jardín central y el derecho. Lo más impresionante fue como Alek abrió sus manos y señaló al cielo cuando pasó por la primera base. De esa manera el juego se empataría a cinco anotaciones.
“Esa obra es definitivamente algo que ves en tus sueños. Que esto suceda en la vida real y que me suceda a mí es simplemente increíble. Estoy muy agradecido de tener ese momento. Es simplemente irreal. Simplemente loco. No lo he procesado todavía, pero fue increíble” dijo el joven Thomas.
Por ahora, tiene tres jonrones en esta postemporada, uno fue para romperle un juego sin hit a Freddy Peralta en el segundo choque de la Serie del Wild Card, otro contra los Dodgers en la Serie Divisional y este, que probablemente haya sido más importante de su carrera.
La remontada se consolidó en la misma entrada: Ketel Marte disparó sencillo, Kimbrel golpeó a Corbin Carroll para que le aplicarán la grúa y Gabriel Moreno le dio la bienvenida a José Alvarado con un turno de calidad. El máscara no le hizo swing a lanzamientos malos y cuando estaba en cuenta de bateo (3-1), salió a conectar el sinker y consiguió un sencillo remolcador que puso el definitivo 6-5 en la pizarra. El venezolano se fue de 3-2 con par de remolques y bases por bolas. Su OPS en la postemporada es de .953.
Estos son los duelos de abridores para los próximos juegos.
Juego cinco: Zack Gallen vs Zack Wheeler
Juego seis: Merrill Kelly vs Aaron Nola
Los Phillies eran el conjunto más caliente del béisbol antes de llegar al Chase Field, pero all, la garra de los D’backs hizo que la serie se igualara. Veremos qué desenlace tiene este duelo. Por ahora, lo único cierto es que Arizona ha sido la sorpresa de los playoff.
