No queda ni un solo boleto disponible para los últimos cuatro partidos del Clásico Mundial de Béisbol. En la tarde de este sábado, el cartel de Sold out (Agotado) se colgó en las taquillas del loanDepot Park de Miami, sede de la ronda decisiva del principal show del deporte de las bolas y los strikes a nivel de selecciones.
Después de seis años de espera, el torneo ha regresado por todo lo alto y ha destrozado los récords de taquilla, audiencia y merchandising, ya sea a través del comercio electrónico o la venta en las tiendas de los estadios de Tokio, Taichung, Arizona y Miami, las plazas anfitrionas de los cuatro grupos de la primera ronda.
En estos cuatro escenarios la expectación ha sido máxima, y una prueba muy clara de ello son los registros de asistencia, los cuales han superado con creces los números de ediciones anteriores. En la capital japonesa, por ejemplo, un gran total de 361 974 espectadores llegaron al Tokio Dome para ver los diez partidos de la llave B, con un promedio de 36 197 por desafío.
Para tener una idea, esa cifra total de diez partidos en la urbe nipona es mayor a la registrada en los 24 duelos de la primera ronda de los Clásicos del 2006 (326 629) y del 2013 (359 243), detalle que habla muy claramente de cuánto ha crecido la atención por las selecciones nacionales cuando se arman con varios de sus mejores jugadores.
Según los organizadores, Tokio batió su propio récord de fanáticos para una sola sede de primera ronda. En el 2017, acogieron a 206 504 aficionados en seis partidos, para un promedio de 34 442 por choque. Esas cifras han quedado en el olvido después de lo que ha sucedido en este 2023.
Pero el fenómeno no fue exclusivo de la majestuosa sede japonesa, la única que ha acogido partidos en cada uno de los Clásicos. En Miami, 295 850 espectadores entraron al loanDepot Park durante la primera fase, una nueva marca de asistencia a los terrenos de Estados Unidos.
El concurso de tres potencias beisboleras como Venezuela, Puerto Rico y República Dominicana y la presencia marcada de comunidades latinas en el sur de la Florida contribuyeron a establecer este récord. Por si fuera poco, el promedio de 29 585 fanáticos por juego en Miami representó un aumento del 8 % respecto a los 27 313 que asistieron en la primera ronda del 2017.
En el Chase Field de Arizona también se rompieron los termómetros durante el partido entre México y Estados Unidos el pasado 12 de marzo. Ese día, 47 534 personas entraron al feudo de los Diamondbacks en el desierto, lo cual representa una nueva marca para cualquier duelo de la fase de grupos en la historia del torneo.
Lo más notable es que estos picos de asistencia no están directamente vinculados a la presencia de equipos anfitriones. Por ejemplo, el 11 de marzo llegaron al loanDepot un total de 71 289 fanáticos para ver los duelos Nicaragua-Puerto Rico y República Dominicana-Venezuela. Ese mismo día, 68 147 personas asistieron a los choques Colombia-México y Gran Bretaña-Estados Unidos en el Chase Field.
Si vamos a la historia del Clásico, jamás había existido un flujo tan grande de público durante la primera ronda, ya sea por los cómputos totales o por la media de asistencia a cada partido.
* 2006
Asistencia total en la fase de grupos en Tokio (Japón), Phoenix y Scottsdale (Arizona), Lake Buena Vista (Florida) y San Juan (Puerto Rico): 326 629 fanáticos en 24 partidos (promedio de 13 609 por juego).
* 2009
Asistencia total en la fase de grupos en Tokio (Japón), Toronto (Canadá), Foro Sol (México) y San Juan (Puerto Rico): 453 374 fanáticos en 24 partidos (promedio de 18 890 por juego).
* 2013
Asistencia total en la fase de grupos en Fukuoka (Japón), Taichung (Taipéi de China), Phoenix (Arizona) y San Juan (Puerto Rico): 359 243 fanáticos en 24 partidos (promedio de 14 968 por juego).
* 2017
Asistencia total en la fase de grupos en Tokio (Japón), Seúl (Corea del Sur), Miami (Florida) y Jalisco (México): 508 830 fanáticos en 25 partidos (promedio de 21 201 por juego).
* 2023
Asistencia total en la fase de grupos en Tokio (Japón), Taichung (Taipéi de China), Phoenix (Arizona) y Miami (Florida): un millón 10 mil 999 fanáticos en 40 partidos (promedio de 25 275 por juego).
En términos de audiencia, los números también se dispararon, tal cual reflejan los siguientes datos aportados por los organizadores:
♦ El choque entre Japón y Corea del Sur tuvo una audiencia de 63 millones de espectadores, lo que significa que un 44.4 % de los hogares japoneses estaban viendo el duelo. Ese rating televisivo superó el de todas las competencias de los Juegos Olímpicos del pasado año.
♦ También en la tierra del Sol Naciente, el 48 % de los hogares estaban vieron el partido de cuartos de final entre los Samuráis e Italia. Es la mayor audiencia registrada en la historia del equipo nacional japonés.
♦ En Taipéi de China, un total de 1301 millones de espectadores siguieron en EBC News los cuatro duelos de su selección en el grupo A, lo cual representa un aumento del 151 % respecto a la audiencia de los partidos de primera ronda del Clásico del 2017. Los ratings televisivos del Clásico en Taipéi superaron al de todos los programas deportivos que se transmitieron en el país desde septiembre del 2021.
♦ Corea del Sur no pudo avanzar a la segunda ronda del Clásico, pero sus cuatro partidos promediaron 1781 millones de espectadores en las cadenas SBS/KBS/MBC, un aumento del 35 % en comparación con la primera ronda del 2017. El choque entre coreanos y japoneses tuvo alrededor de 2709 millones de espectadores, y califica como el duelo de Clásicos Mundiales de Béisbol más visto en ese país asiático desde la final del 2009, también contra los nipones.
♦ En Puerto Rico, el 61 % de los hogares vieron el partido entre República Dominicana y la escuadra boricua que definió la clasificación a la segunda ronda. De acuerdo con WAPA Deportes, el 24 % de los espectadores que siguieron el duelo por televisión eran menores de 25 años y el 55 % eran mujeres.
* El partido entre Estados Unidos y Gran Bretaña tuvo una audiencia de 1592 millones de personas, convirtiéndose en el partido de primera ronda más visto en el país norteño desde el Clásico del 2009.
* En República Dominicana, la audiencia de los juegos del PlatanoPower creció un 37 % respecto al 2017, mientras los dos primeros choques de México superaron en un 10 % los ratings del pasado Clásico.
Lo mejor es que este éxito rotundo en términos de asistencia y audiencia también se traslada al terreno virtual. Según los organizadores, durante la primera ronda del Clásico el nivel de interacción en las cuentas de redes sociales del World Baseball Classic creció en un 564 % respecto a la fase de grupos de la pasada edición en el 2017.
En este particular, desde el 1 de marzo el fenómeno japonés Shohei Ohtani tuvo un incremento de 1.36 millones de seguidores en Instagram, donde ya es el primer pelotero de Grandes Ligas con más de 3 millones de seguidores.
Es válido destacar que este interés creciente por el torneo se da en circunstancias no tan favorables, pues múltiples franquicias de MLB y la Liga Japonesa han bloqueado la participación de figuras con un peso determinante en la atención mediática. A pesar de eso, el consumo del show ha aumentado hasta niveles insospechados.
Todo esto debería ser un claro aviso para los rectores de las principales organizaciones beisboleras a nivel mundial, quienes pueden tomar nota e intentar capitalizar la emoción de los fanáticos con el Clásico a fin de aumentar la popularidad de un deporte que todavía no ha alcanzado una total globalización.
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