El inicio de la Liga Dominicana (LIDOM) este sábado tuvo como una de sus notas más destacadas el regreso a los terrenos del jardinero cubano Yoenis Céspedes, quien llevaba más de dos años inactivo por diversas lesiones e intervenciones que precipitaron el fin de su carrera en MLB en el verano del 2020.
Justo como se había anunciado en agosto pasado, “La Potencia” retornó al ruedo con las Águilas Cibaeñas, la escuadra más ganadora del circuito invernal junto a los Tigres del Licey (22 títulos cada uno), con la cual vivió ya una experiencia en enero del 2012 durante los playoff del circuito profesional dominicano.
El granmense, quien cumplirá 37 años esta semana, alineó como cuarto madero y patrullero izquierdo en el duelo contra los Gigantes del Cibao. Céspedes se fue en blanco en cuatro turnos con un ponche incluido, pero su equipo logró la victoria 4-1 gracias al aporte ofensivo de Melky Cabrera y Andretty Cordero y a una gran labor monticular del pinareño Yunesky Maya.
“El Guerrero”
Yunesky Maya silencio los bates contrarios a solo 2 hits en 5 entradas.#Rumboala23 #SomosLaDiferencia #EquipoGrande pic.twitter.com/3PuOrK7HCl
— Águilas Cibaeñas (@aguilascibaenas) October 16, 2022
El tirador antillano estuvo impecable durante cinco episodios sin carreras, en los que enfrentó a 18 bateadores, aceptó dos jits, concedió un boleto y retiró a tres rivales por la vía de los strikes. Maya, con sobrada experiencia en LIDOM, dejó el partido con ventaja para su equipo, pero no pudo anotarse la victoria porque el relevo permitió el empate de los Gigantes.
No obstante, la mayoría de los focos se concentraron sobre Céspedes, quien no disputaba un partido oficial desde el 1 de agosto del 2020, cuando militaba en los New York Mets. Desde ese momento, el cubano pasó por debajo del radar, limitado totalmente por lesiones que ya le habían impedido jugar en la campaña del 2019.
Hace poco menos de un mes, Céspedes dijo contar con el apoyo de su familia para regresar al diamante, algo que solo es posible gracias a encontrarse en forma física y mentalmente.
“No estoy jugando aquí con el propósito que me vean y firmar contrato para retornar con algún equipo de Grandes Ligas, solo lo hago por amor a este juego. Simplemente lo hago para demostrarme a mí mismo que todavía puedo producir, no quizás al nivel de hace diez años, pero siento que lo puedo hacer”, aseguró el granmense.
Yoenis Céspedes debutó en Grandes Ligas en el 2012 con Oakland y después pasó por Boston, Detroit y los Mets. En total, pegó 362 extrabases, 165 jonrones, remolcó 528 carreras, anotó 475 veces y dejó una línea ofensiva de .273/.327/.497 en 834 partidos distribuidos en ocho campañas.
El patrullero fue convocado a dos Juegos de Estrellas y ganó dos Festivales de Jonrones seguidos (2013 y 2014), mereció el Guante de Oro en la Liga Americana con los Tigres en el 2015 y un Bate de Plata en la Liga Nacional con los Mets en el 2016.