Cuba calienta Puebla

No sabemos a ciencia cierta qué tanto frío hace en Puebla, pero los indicadores meteorológicos históricos en esa localidad mexicana nos indican que es como un eterno invierno, pues la temperatura promedio ronda los 17,5 grados y en todo el año hay aproximadamente solo tres jornadas con más de 29 grados.

Sin embargo, por estos días algunos futbolistas de peinados extravagantes se burlan del gélido clima y la intimidante altura (más de 2 mil metros sobre el nivel del mar), provistos apenas con unos guantes y camisetas de mangas cortas, como si jugaran bajo un intenso sol.

Dirigidos por Raúl González Triana, los muchachos del once cubano que interviene en el Campeonato Sub-20 de la CONCACAF, clasificatorio para la Copa del Mundo Turquía 2013, han llevado el calor a suelo azteca, donde han sorprendido a media humanidad, primero con su inobjetable clasificación a cuartos de final y ahora por la obtención del boleto mundialista tras la victoria sobre Costa Rica, una de las potencias del área.

¿Sueño o realidad? Justo esa interrogante nos asaltaba previo al duelo de los Leones Caribeños con los “ticos”, que llegaban con cierta confianza, inspirados en la goleada (6-1) propinada a los antillanos hace dos años en Guatemala.

No obstante, la venganza es un plato que se sirve frío, y el plantel de la Isla preparó la escena ideal para resarcirse de las heridas pasadas. Cuando solo habían transcurrido 13 minutos, Arichel Hernández mostró dotes de velocista y aprovechó la asistencia de Héctor Morales para batir al meta Jairo Monge, quien ya había tenido varios sustos por el incisivo ataque de los cubanos.

Antes del descanso, Costa Rica se hizo con el control de balón y llegó al empate por un tiro libre de Gabriel Leiva que David Ramírez empujó a las redes, aunque fue solo un espejismo, lo peor, para ellos, estaba por llegar.

Si hace dos años el costarricense Joel Campbell fue un azote frente a Cuba (anidó tres dianas), ahora Maykel Reyes, la sensación individual del torneo, destruyó todos los planes defensivos de los centroamericanos con un sinfín de variantes ofensivas y filigranas.

Reyes, sin discusión, marca la diferencia en el plantel antillano y de sus pies nació la jugada del segundo y decisivo gol. Interceptó un pase, regateó en el área y cedió la esférica a Hernández, quien culminó la acción con potente disparo de derecha, imparable.

Después, no sucedió mucho más. Solo quedó  tiempo para otro par de combinaciones Reyes-Hernández, dueños de la noche, toda una pesadilla para el arquero Monge, quien evitó con sus paradas un resultado de escándalo.

De esta forma, Cuba logró su primer boleto mundialista y asestó un duro golpe a Costa Rica, que ha participado en las últimas tres ediciones de las Copas del Mundo en esta categoría. Además, con su estilo han levantado las mejores opiniones de especialistas y scouts presentes en Puebla, que ya no los ven como la Cenicienta del certamen.

Y no es para menos. Liderados por el capitán Adrián Diz Pe (convocado con la selección absoluta) y el habilidoso Maykel Reyes, el once criollo ha golpeado a todos sus oponentes con un sistema basado en el orden defensivo, con prioridad para el toque rápido y el ataque explosivo.

Precisamente, Diz Pe se planta como eje de la defensa por su fortaleza física y su claridad en la salida, mientras Daniel Luis Sáez (La Torre), el cerebro del conjunto, emerge en el mediocampo, la sala de máquinas, donde se cuece buena parte del juego caribeño.

Sáez tiene la capacidad de recuperar el balón y distribuirlo en el ataque, con una asombrosa habilidad para realizar pases milimétricos a los extremos y delanteros, quienes se rotan en los diversos roles ofensivos.

Reyes carga con el mayor peso, pues además de convertir goles jamás permanece estático en el área. De extraordinaria fuerza física, el “7” retrasa su posición para alcanzar la bola con más frecuencia y encarar luego a los zagueros gracias a su notable regate y velocidad, sin obviar su visión innata para servir a los compañeros.

Mas no solo Reyes despunta como elemento clave en el frente de ataque, pues Jordan Santa Cruz irrumpe de laborioso “9” y Arichel Hernández aporta potencia y definición llegando desde los costados.

Con estas armas, Cuba buscará avanzar un paso más cuando enfrente este viernes en semifinales a Estados Unidos, que también gano su pase al Mundial de Turquía tras desplegar un despiadado ataque (4-2) contra Canadá.

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