Un penal ejecutado por Marcus Rashford en el tiempo de reposición catapultó al Manchester United a los cuartos de final de la Liga de Campeones, al imponerse el miércoles 3-1 en la casa del Paris Saint-Germain.
El club inglés reverdeció laureles en Europa al remontar un 2-0 en contra tras el partido de ida, que se jugó en su feudo de Old Trafford.
Cuando el PSG parecía tener un pie en la siguiente ronda, el árbitro Damir Skomina señaló un penal tras una prolongada consulta del video, en la cual se confirmó que el zaguero Presnel Kimpembe desvió con su codo el remate de Diogo Dalot.
Con nervios de acero, Rashford clavó el balón con potencia para batir al arquero Gianluigi Buffon, para deleite del contingente de hinchas del United en el Parque de los Príncipes.
Hasta ese instante, el United parecía condenado al fracaso, pese a llevar ventaja en el marcador por dos goles de Lukaku, ambos tras errores de la última línea del PSG y de Buffon.
El PSG controlaba las acciones y daba la impresión de estar más cerca de capitalizar frente al marco de David De Gea. De hecho, Mbappé, Di María y Bernat estuvieron cerca de sentenciar a los ingleses.
Pero la falta de puntería y la mala fortuna (estrellaron un balón al poste) sentenciaron a los franceses, que no pudieron aprovechar la renta del partido de ida y la ausencia de hasta diez jugadores por lesiones o suspensiones en el United, entre ellos pilares importantes como Paul Pogba, Lingard, Juan Mata, Nemanja Matic, Ander Herrera o Antonio Valencia.
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Otro naufragio europeo para el PSG, que sencillamente no encuentra la manera de sobrevivir en las eliminatorias a doble partidos. Se hundió en 2017 ante el Barcelona, víctima de otra remontada, y el año pasado capitularon ante el Real Madrid. Todos los petrodólares de Qatar se resisten a darle una alegría continental al club que en Francia arrasa abrumadoramente.
El Manchester United es la cara opuesta de la moneda. Liquidados en la Premier, conducidos por un nuevo entrenador hace solo unos meses tras el despido de José Mourinho, los diablos rojos hicieron valer su historia.
Ole Gunnar Solskjaer, nombrado técnico de emergencia, volvió a estar en el medio de una dramática puesta en escena 20 años después de su memorable gol en el tiempo añadido cuando el United se consagró campeón en el torneo de 1999.
El VAR se alía con el Porto
Alex Telles convirtió un penal sancionado en la prórroga mediante el videoarbitraje (VAR), y el Porto se impuso 3-1 sobre la Roma, para revertir el déficit de un tanto con el que se había saldado el encuentro de ida.
El brasileño Telles anotó desde los 12 pasos a dos minutos de que expirara el segundo tiempo extra, después de que se marcó una falta de Alessandro Florenzi, la cual pasó originalmente desapercibida para el árbitro. La repetición evidenció que el lateral derecho tiró de la camiseta del atacante brasileño Fernando.
Porto, que había perdido 2-1 en la ida, se clasificó a los cuartos de final con un marcador global de 4-3, cumpliendo con la misión de remontar en el Estadio do Dragao.
A sabiendas de que necesitaban revertir el tanteador, los portugueses atacaron desde el inicio y tomaron una merecida ventaja a los 26 minutos, cuando Moussa Marega sirvió dentro del área para que Tiquiho Soares empujara a las redes muy cerca del arco.
Ese marcador bastaba para que Porto siguiera adelante por el criterio del gol de visitante. Pero la Roma igualó 11 minutos después.
Diego Perotti fue derribado por Eder Mlitao y Daniele De Rossi convirtió el penal resultante, engañando al veterano arquero Iker Casillas, quien se lanzó al lado equivocado tras una serie de amagues.
De Rossi abandonó renqueando la cancha en los descuentos del primer tiempo, por un problema muscular. Fue reemplazado por Lorenzo Pellegrini.
Porto concluyó la primera mitad ejerciendo una presión intensa. El mexicano Héctor Herrera obligó a que Robin Olsen realizara una gran atajada.
Y en el complemento, continuó la misma narrativa del encuentro. El conjunto luso recuperó la ventaja siete minutos después del descanso, cuando Marega aprovechó un centro del mexicano Jesús Corona y lo envió a las redes con un remate de volea.
La Roma tuvo varias oportunidades de igualar, y reclamó también un supuesto penal en el último suspiro del tiempo extra. El VAR descartó que Marega hubiera cometido una falta sobre Patrik Schick.
Con información de The Associated Press