Estamos en la recta final y parece todo casi decidido en la Serie Nacional de Béisbol. Quizás queda un ligero suspenso alrededor de la cuarta plaza, pero Granma aún tiene tres juegos pendientes más que su competidor, Pinar del Río. Las Tunas, Matanzas e Industriales están virtualmente clasificados.
En el tramo conclusivo de la temporada regular pudiera evaluarse el impacto de los refuerzos en los equipos contendientes. Su influencia fue decisiva en algunos casos e insuficiente en algunos casos. Demos una mirada a su impacto y su desempeño en la segunda fase.
Duanys Hernández Torres
Nadie hubiera imaginado que los refuerzos que más han rendido hasta la fecha sean los escogidos por Víctor Figueroa. Casi todos los especialistas coincidían a priori en que el timonel de Matanzas había sido el menos certero en su selección. Definitivamente la pelota es redonda y viene en caja cuadrada.
El torpedero avileño Yorbis Borroto se ha insertado como otro capitán en el pantano de los cocodrilos, con excelente línea ofensiva de 325/440/436 y solo 3 errores en 154 lances para un magnifico promedio defensivo de 981. Mientras, su coterráneo Osvaldo Vázquez ha conectado seis jonrones y tiene 25 carreras impulsadas en esta segunda fase, y ha aportado poder a la tanda matancera.
Los lanzadores que han reforzado a Matanzas también han estado fenomenales con balance de 10-1 y 3 juegos salvados. Dachel Duquesne ha lucido inconmensurable desde la lomita con 6-1, le batean 265 y lanza para 3,56. Con muy buen tino, Víctor Figueroa eliminó al lanzador avileño Liomil González porque Dariel Góngora, el último que arribó al pantano, tiene una victoria, tres salvados, lanza para un magnifico 1,29 y apenas le batean para 167.
El reverso de la moneda ha sido Industriales. Los refuerzos seleccionados por Víctor Mesa poco han aportado a la causa azul. Lo de los lanzadores ha sido desastroso. Solo han ganado tres partidos y han perdido 10. Presentan un astronómico promedio de carreras limpias de 6,13 y solo Fredy Asiel Álvarez, con algunas salidas positivas, ha mostrado destellos de su clase.
Del resto se pudieran destacar los refuerzos tuneros. Los lanzadores tienen balance de 6-2 con tres juegos salvados, en tanto Yunior Paumier y Alexander Ayala, aunque han ocupado turnos de poca responsabilidad ofensiva en el line up, han sido muy productivos, pues entre ambos han impulsado 45 carreras para la causa de los leñadores.
Los refuerzos granmenses, pinareños y artemiseños han mostrado notable inestabilidad. El torpedero holguinero Yordan Manduley, ahora con la casaca de los Cazadores, ha sido lo más rescatable de este grupo con excelente línea ofensiva de 362/364/524.
En cualquier caso, los refuerzos sí han tenido un peso decisivo en esta segunda etapa. Si no, pregúntenle a Víctor Figueroa que ha callado la boca de todos los que pensamos que habían sido un desastre sus decisiones aquella noche del Teatro Milanés.
Eric Caraballoso Díaz
Los refuerzos pesan, claro que pesan, lo mismo para bien que para mal.
La actuación de los importados ha sido decisiva para los equipos que comandan la tabla: Las Tunas y Matanzas.
La tropa de Pablo Civil, temible de por sí al bate, ha redondeado su alineación con el aporte del holguinero Yunior Paumier, un hombre que en la segunda fase promedia ofensivamente 353, con dos jonrones, 25 impulsadas y OBP de 476. El camagüeyano Alexander Ayala tampoco lo ha hecho mal, con 270 de average, seis dobles y 20 traídas para el plato en esta fase, la misma cantidad que Yosvani Alarcón.
Desde la lomita, los refuerzos también le han respondido a los Leñadores, con seis victorias y tres salvamentos, aunque la mayor responsabilidad –tanto en las aperturas como en el relevo– ha caído sobre pitchers propios como Yoalkis Cruz, Diego Granado y Yudiel Rodríguez. No olvidar que Las Tunas “perdió” temporalmente a los camagüeyanos Yariel Rodríguez y Carlos Pérez, integrantes del equipo cubano sub-23 que poco pudo hacer en el premundial de Panamá.
Matanzas, por su parte, encontró en una tríada avileña un verdadero motor de propulsión a chorro. Yorbis Borroto, Osvaldo Vázquez y Dachel Duquesne cambiaron sin complejos la piel de tigre por la coraza de cocodrilo.
El paracortos se ha lucido a la defensa y en el cajón de bateo (325 de average, 10 dobles y 22 empujadas en la segunda fase), y su liderazgo se ha hecho notar en un equipo que hasta el año pasado bogaba detrás de Víctor Mesa.
Tabla de posiciones. Tomado de beisbolcubano.cu.
Vázquez ha dado rienda suelta a su poder, con seis bambinazos, 25 impulsadas y slugging de 505; mientras Duquesne ha regalado seis triunfos a los matanceros, más que los logrados por otro refuerzo en la serie.
Tampoco puede desdeñarse lo hecho por Dariel Góngora, llegado a última hora y convertido en uno de los paños de lágrimas del mentor Víctor Figueroa. El zurdo camagüeyano ha respondido a la confianza de su nuevo equipo con un éxito, tres juegos salvados y promedio de limpias de 1,29. Casi nada.
Granma, que privilegió inicialmente a lanzadores, no puede quejarse de lo hecho por el villaclareño Alain Sánchez y el santiaguero Ulfrido García, aun cuando este último ha estado ausente las últimas semanas por su presencia en el Premundial sub-23. Ellos han redondeado un staff liderado por los experimentados Lázaro Blanco y Leandro Martínez.
El villaclareño Yulexis de la Rosa no ha pesado al bate pero sí con los arreos, en tanto el holguinero Geydi Soler, con sus 11 empujadas y sus 276 de average ha paliado en algo la ausencia de Yoelkis Céspedes y Raico Santos.
El alicaído Industriales poco tiene que exhibir, pues los pitchers escogidos por Víctor Mesa no se han hecho justicia. No obstante, el versátil Orlando Acebey ha producido para la causa azul, con cinco dobles, 18 impulsadas y 305 de promedio ofensivo. Del lobo un pelo.
Tabla de posiciones. Tomado de beisbolcubano.cu.
Entre los sotaneros, Pinar del Río apenas puede alegrarse de lo hecho por Michel Enríquez (308 de average, 8 dobles y 15 impulsadas) y Frederich Cepeda (287, 3 jonrones y 14 empujadas) en tanto el zurdo cienfueguero Yusniel Ibañez ha quedado a deber con apenas 245 de promedio en esta etapa.
Y para Artemisa, lo mejor sin dudas ha sido el torpedero Yordan Manduley con sus 362 de average, nueve dobles y 18 empujadas. El inicialista espirituano Yunier Mendoza, con 10 para la goma, y el jardinero mayabequense Denis Laza, con tres jonrones y también diez empujadas, han quedado por debajo de lo esperado.