Los Domadores de Cuba se guardaron la noche de este viernes la historia en sus bolsillos. Nunca una franquicia había avanzado a tres finales de forma consecutiva dentro de la Serie Mundial de Boxeo (WSB, por sus siglas en inglés). Incluso, la situación se magnifica cuando, con toda intención, se recuerda que los antillanos comenzaron su andar en esta lid en 2014.
Más sencillo. Los pugilistas de la isla han clasificado siempre a la discusión de la corona desde que se sintieron más “desprotegidos”. Ya sin cabeceras, ya sin camisetas, a cinco rounds y con un sistema de puntuación antes desconocido, los nuestros no han dado tregua, no han mermado, no se han amilanado.
Esta vez, luego del 5-0 del jueves en el formato C-1, el Coliseo de la Ciudad Deportiva recibió la segunda fecha de las semifinales entre Domadores y los Tigres de Uzbekistán dentro de la VI WSB. Los locales, sin ambages, no dieron margen a dudas y sellaron la barrida ante los asiáticos en el C-2. Cinco nuevos hombres bajaron del ring contentos, aupados por sus connacionales. Hubo también más público en la instalación, lo cual igual devino en festejo.
La ruta del éxito la inició el espirituano Yosbany Veitía dominante en cada segundo de acción contra Abrorjon Kodirov, púgil de irrisorios movimientos, lento para los 52 kilogramos y poco decidido al intercambio. El subcampeón mundial de Doha llevó el pleito a su “salsa” y obtuvo la mejor parte en cada entrada ofensiva.
La segunda victoria de los anfitriones la alcanzó Lázaro Álvarez sobre Elnur Abduraimov. En duelo entre medallistas de los 60 kilos de la lid universal de Qatar 2015, el pinareño no se guardó nada y aceptó la pelea en la corta distancia. Los intercambios sobraron y los presentes disfrutaron de constantes ráfagas de golpes.
A la postre, Álvarez, tres veces monarca del orbe y bronce olímpico, recaudó veredicto unánime a su favor. Este desenlace lo reafirmó como el pugilista cubano más completo en la actualidad. Algo así como el mejor libra por libra del Centro de Entrenamientos Orbeín Quesada, “La Finca”.
La tercera pugna de la velada nos regaló a un Roniel Iglesias (69) que se pareció más a Roniel Iglesias. Sí, como lo lee. El flamante rey estival en Londres 2012 (en 64 kg) se mostró más activo, superior físicamente, menos regado en sus maniobras, y más confiado.
Makhmud Gaipov cedió fácilmente ante el vueltabajero, que brindó un espaldarazo a los fallos de los entrenadores, quienes no han dejado, a pesar de continuas decepciones, de darle oportunidades, oportunidades y oportunidades. El 3-0 de Iglesias lo acercó más a una afición que había perdido la confianza en él, y que, ahora, lo mira con ojos radiantes de cara a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
La cuarta sonrisa la tributó “La Sombra” Julio César La Cruz (81), quien se burló literalmente de Shuhrat Abdullaev. El uzbeko, inclusive, llegó a frenar sus movimientos en medio del cuadrilátero. Los reflejos felinos del triple rey del orbe desesperaron al visitante que, al cierre, terminó aplaudiendo al cubano. Esta no es primera vez que La Cruz saca del paso a sus contrarios; en ocasiones las gradas también han rechiflado su estilo muy ganador.
Leinier Peró (más de 91) se encargó de sellar la barrida. Mirzobek Khasanov no mostró ánimo y el duelo, que resultó monótono en no pocos pasajes, concluyó con votación unánime del lado del camagüeyano doble campeón panamericano.
La franquicia nacional espera por su próximo adversario. El otro finalista saldrá del duelo que sostendrán los sorpresivos Corazones de León Británicos y los actuales titulares de esta lid, los Lobos de Astana (Kazajstán). Estos equipos cruzarán guantes los días 26 y 27 venideros en Londres.
Sencillo. Al boxeo cubano le llueven las críticas dentro y fuera de la nación. Muchos de los ataques son bien argumentados y ejemplificados; sin embargo, los resultados, con menos materia prima que antaño, no se disipan totalmente. Hay bruma, pero alcanzamos a distinguir el camino. Resta trabajo, resta apoyo en la base –la labor en las edades tempranas resulta imprescindible para mantener la estela de triunfos-, resta resolver no pocas carencias.
No es secreto que existen dificultades, pero aún así los años no logran mudar el carácter, y, lo que por herencia se ha recibido, queda en la genética. El pugilismo natural de Cuba –aquí y allá-, es genio y figura, hasta la sepultura.
Resultado Final: Domadores de Cuba 10- Tigres de Uzbekistán 0
(Formato C-1)
49 kilogramos: Jhoanys Argilagos- Nodirjon Mirzakhmedov (50-43, 50-44, 50-44)
56: Robeisy Ramírez-Murodjon Akhmadaliev (49-46, 49-46, 48-47)
64: Luis Oliva-Fazliddin Gaibnazarov (49-46, 49-46, 49-46)
75: Arlen López-Ulugbek Khakberdiev (Nocaut técnico)
91: Erislandy Savón-Mirzobek Khasanov (50-43, 50-42, 50-42)
Viernes 6 de mayo de 2016
(Formato C-2)
52: Yosbany Veitía-Abrorjon Kodirov (50-45, 50-45, 50-44)
60: Lázaro Álvarez-Elnur Abduraimov (50-45, 50-45, 50-45)
69: Roniel Iglesias-Makhmud Gaipov (50-43, 50-44, 50-44)
81: Julio César La Cruz-Shuhrat Abdullaev (50-45, 50-45, 50-45)
+91: Leinier Peró-Mirzohidjon Abdullaev (49-46, 49-46, 49-46)