El 19 de febrero de 2016, cuando solo tenía 16 años, Jordan Alejandro Díaz Fortún (La Habana, 2001), voló por encima de una varilla a 1.85 metros del suelo en el estadio Panamericano. Se probaba en la altura y no se le daba mal, pero su destino no tardó en tomar otro rumbo.
“Mucha gente no conoce que grandes triplistas cubanos, cuando eran escolares, saltaban altura y muy bien. Algunos como Jordan Díaz o Yoandri Betanzos saltaban más de 2 metros siendo muy jóvenes, pero al no tener las condiciones corrían el riesgo de salir con lesiones serias y se fueron al triple”, reveló Javier Sotomayor en OnCuba durante una reciente entrevista.
No sabemos con certeza si el salto de altura perdió una estrella con Jordan Díaz, pero si nos está quedando bastante claro que el triple ganó un verdadero fenómeno. Desde hace algunos años, cuando se tituló en los Mundiales Sub-18 y Sub-20 y los Juegos Olímpicos de la Juventud, ya teníamos algunas pistas de su potencial, pero ahora ha escalado a una dimensión superior.
Una prueba muy contundente es que, a 72 horas del inicio de la Eurocopa de fútbol, el saltador cubano acaparó las portadas deportivas españolas. ¿Robar titulares a “La Roja” a las puertas de un gran evento? Pues sí, Jordan lo consiguió con un estratosférico 18.18 metros en el Campeonato Europeo de atletismo de Roma, donde se afianzó con el tercer mejor registro de todos los tiempos en el triple.
El habanero, nacionalizado español desde febrero de 2022, hizo sombra al récord mundial de 18.29 que estampó el británico Jonathan Edwards el 7 de agosto de 1995 en Gothenburg, su plaza fetiche, pues allí se convirtió en el primer y único triplista de la historia con dos saltos por encima de los 18 metros en una misma competencia. Más cerca todavía quedó del 18.21 del estadounidense Christian Taylor en Beijing, el 27 de agosto de 2015.
La secuencia de Jordan en el Stadio Olímpico fue impecable. En la clasificatoria saltó 17.52 con una facilidad pasmosa y aumentó el ritmo en la final, con tres brincos válidos de 17.56, 17.82 y 17.96 en sus primeros cuatro intentos. Podía darse por satisfecho, porque ya había quebrado la plusmarca española (17.87) impuesta por él mismo en junio de 2022, pero tenía entre ceja y ceja derrotar a Pedro Pablo Pichardo, otro cubano compitiendo bajo la bandera de Portugal.
“Si Pichardo salta 18 metros, yo haré 18,01”, dijo Jordan tras la clasificatoria. Esto no cayó muy bien al santiaguero, campeón olímpico y mundial, quien solo unas horas después se le encaró: “que sea la última vez que hablas de mí en tu vida”, le espetó cara a cara según un relato de MARCA, que también cuenta que Alexis Copello, otro triplista cubano, intercedió para evitar una discusión mayor.
Ese fue el momento de combustión absoluta de una batalla que se trasladó entonces al tanque de saltos del Olímpico de Roma, donde Pichardo consiguió cinco estirones de más de 17.50, incluidos un 17.92 y un 18.04 que lo mantuvo al frente casi toda la lid. El indómito no llegaba tan lejos desde hace casi una década, cuando logró 18.08 en La Habana y 18.06 en Doha, todo en cuestión de dos semanas.
Precisamente, en aquel concurso celebrado en Qatar en mayo de 2015, Pichardo y Christian Taylor se convirtieron en los primeros triplistas que superaban los 18 metros en una misma competencia, con el cubano como triunfador. Ahora, en Roma, de nuevo dos hombres se fueron más allá de los 18 metros y Pichardo fungió otra vez de protagonista, pero el guion cambió, pues el santiaguero no pudo imponerse ante un Jordan Díaz que superó todos sus límites con el mencionado 18.18.
“Pichardo me ha llevado hasta el límite, aunque Iván (Pedroso) me dice que no los tengo (risas), pero las piernas me decían al final que su respuesta era diferente a lo que dice mi entrenador. El concurso ha sido increíble. Cuando él ha saltado 18,04 he pensado que estaba difícil, pero ya había hecho saltos cercanos a los 18 y sabía que lo tenía. Y ha salido”, apuntó Díaz.
Jordan Díaz: ¿heredero del trono “español” de Niurka Montalvo?
De esta forma, el “Air Jordan” del triple se convirtió en el octavo saltador con un registro de más de 18 metros, barrera que solo se ha superado 17 veces en la historia. Si nos guiamos por la edad, el habanero es el segundo más joven con una marca de este calibre, como apreciamos en el siguiente listado:
* Pedro Pablo Pichardo (18.06): 21 años, 10 meses y 15 días
* Pedro Pablo Pichardo (18.08): 21 años, 10 meses y 28 días
* Jordan Díaz (18.18): 23 años, 3 meses y 19 días
* Christian Taylor (18.04): 24 años, 10 meses y 27 días
* Teddy Tamgho (18.04): 24 años, 2 meses y 3 días
* Christian Taylor (18.06): 25 años y 21 días
* Christian Taylor (18.21): 25 años, 2 meses y 9 días
* Christian Taylor (18.11): 26 años, 9 meses y 11 días
* Hugues Frabrice Zango (18.07): 27 años, 6 meses y 22 días
* Will Claye (18.14): 28 años y 16 días
* Will Claye (18.06): 28 años, 2 meses y 11 días
* Jonathan Edwards (18.29): 29 años, 2 meses y 28 días
* Jonathan Edwards (18.16): 29 años, 2 meses y 28 días
* Jonathan Edwards (18.00): 29 años, 3 meses y 17 días
* Pedro Pablo Pichardo (18.04): 30 años, 11 meses y 12 días
* Kenny Harrison (18.09): 31 años, 5 meses y 14 días
* Jonathan Edwards (18.01): 32 años, 1 mes y 29 días
Todos los caminos conducen a Roma… y a París
No se suponía que Jordan Díaz pudiera competir bajo la bandera española en el Europeo de atletismo en Roma. El cubano se quedó en suelo ibérico el 28 de junio de 2021, poco antes de los Juegos Olímpicos de Tokio, y según las disposiciones de World Athletics debía pasar tres años sin competir con su país de origen y tres años de arraigo en la nación que quiere representar.
Jordan cumplía el primer requisito sin problemas, pues su última competencia al aire libre con la selección cubana fue el Mundial de Doha, en septiembre de 2019, pero debía esperar hasta el venidero 28 de junio para completar los tres años de arraigo en España. Sin embargo, un panel de World Athletics decidió reducir en 21 días el período de espera de Díaz, quien recibió autorización para representar oficialmente a España a partir del 7 de junio del presente año.
Eso le abrió las puertas a Jordan del Europeo, un torneo mayor con todos los focos posibles, escenario ideal para mostrarse al mundo. El chico no desaprovechó la oportunidad y se convirtió en el tercer cubano que se titula en la historia del evento, siguiendo los pasos del vallista Yasmany Copello y del propio Pichardo. El chico voló impulsado por sus piernas, su talento natural y la magia de Iván Pedroso, un hombre que sigue enfrascado en superar como entrenador todo lo que consiguió como atleta. Quizás hace un tiempo parecía imposible, pero ahora ya no tanto…
Pedroso llevó a la venezolana Yulimar Rojas a la cumbre, también condujo por un tiempo los destinos del estelar francés Teddy Tamgho y, por si fuera poco, ahora logró que Ana Peleteiro y Jordan Díaz se consagraran como los primeros monarcas españoles en un Campeonato Europeo en la modalidad de triple salto. Tampoco parece tener límites el “Saltamontes” en sus funciones de preparador.
Ahora todas las miradas apuntan a París, donde Jordan tendrá la presión de la gran marca, aunque no se puede decir que sea el favorito indiscutible por la extrema competitividad del triple masculino en la actualidad. Pichardo es un hombre de competencia con una experiencia que puede valer en momentos de máxima tensión, lo mismo que Hugues Fabrice Zango. En tanto, el joven jamaicano Jaydon Hibbert, el portento Andy Díaz (cubano que competirá por Italia) y en menor medida los antillanos Lázaro Martínez y Christian Nápoles, deben ser rivales de consideración.
“Lo que he hecho en Roma se queda en Roma, París es otra competición. Con muchos más rivales y más presión, será muy complicado, pero lucharé como siempre por estar arriba, por el oro. Es un objetivo muy importante y será una guerra campal bastante chunga (ríe). Me queda por mejorar hasta entonces, aunque no queda mucho”, dijo Jordan este martes tras ser nombrado por la prensa española como el mesías del atletismo en esa nación. ¡Vaya carga!