El presidente de Bolivia, Luis Arce, lideró este jueves una marcha de varios miles de simpatizantes, y dijo que sobre su cadáver prosperará un golpe de Estado que trama la oposición.
“Sobre nuestro cadáver un golpe de Estado“, afirmó el mandatario en una plaza pública de La Paz en un acto al que asistieron el vicepresidente David Choquehuanca y el ex mandatario Evo Morales (2006-2019).
Los tres encabezaron desde temprano una marcha de varios miles de trabajadores, mineros, campesinos, indígenas y simpatizantes del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS).
Muchos portaban banderas bolivianas rojo, amarillo y verde, azules y blancas que pertenecen al MAS y la multicolor whipala, el símbolo de la población autóctona.
“Hemos venido a defender a nuestro presidente, Luis Arce Catacora“, dijo Angélica Mamani, dirigente sindical de 44 años.
Laurián Clemente Quiroz, militante del gobernante MAS de 33 años, explicó que participó de la marcha, porque “hay una conspiración de la oposición boliviana“.
El gobierno asegura que la oposición está urdiendo un golpe de Estado contra Arce, en el poder desde noviembre de 2020. Los opositores, afirma, pretenden reditar una asonada golpista, como la que ocurrió contra Morales en 2019.
Arce señaló en su discurso que “la derecha siempre va a buscar excusas para desestabilizarnos“, pero que “el pueblo boliviano no quiere más golpes, el pueblo quiere trabajar, progresar e industrializar el país“.
Agregó que las potencias occidentales “quieren nuestro litio, quieren nuestro gas, quieren nuestro hierro“.
Morales dijo: “solo nos quieren para garantizar la materia prima y no quieren que demos el valor agregado“ a los recursos naturales bolivianos.