Hoy a las 11:02 se guardó un minuto de silencio y se depositaron ofrendas de florales a los fallecidos y sobrevivientes de la bomba atómica arrojada sobre la ciudad de Nagasaki el 9 de agosto de 1945.
Alrededor de 70 mil personas perdieron la vida en esa explosión, pero cientos de miles de pobladores, la mayoría mujeres y niños, murieron tiempo después como consecuencia de la radiación.
La ceremonia de este viernes se llevó a cabo frente a la Estatua de la Paz, situada cerca del centro de la explosión.
El alcalde de Nagasaki, Shiro Suzuki, exigió que el Gobierno japonés firme y ratifique un tratado de la ONU prohibiendo las armas nucleares, y que Japón lidere las discusiones para aliviar las tensiones y avanzar en el desarme en el noreste asiático.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, se comprometió a encabezar los esfuerzos internacionales para impulsar el desarme nuclear de manera que Hisroshima y Nagasaki sigan siendo las dos únicas ciudades en sufrir esa tragedia.
La ceremonia de este viernes se llevó a cabo frente a la Estatua de la Paz, situada cerca del centro de la explosión.
En el acto se leyó una Declaración por la Paz y se colocó una lista actualizada de las víctimas en el memorial que incluye los nombres de las personas fallecidas durante los últimos doce meses.
El número de muertos por la tragedia en Nagasaki asciende en la actualidad a 198 mil 785 personas.