El Kremlin aseguró este lunes que la investigación oficial sobre las causas de la repentina muerte en prisión del líder opositor ruso Alexéi Navalni todavía está en marcha, y se negó a comentar la negativa de las autoridades para entregar el cadáver a la familia.
“Por el momento, los resultados de esta investigación no se han hecho públicos y, de hecho, se desconocen”, dijo Dmitri Peskov, portavoz presidencial, durante la rueda de prensa telefónica diaria, citada por la agencia Efe.
The Investigative Committee informed the mother and the lawyers that the investigation of the death of Navalny has been extended. They don’t say how long it will take. The cause of death is still "unknown.”
They lie, buy time for themselves and do not even hide it.
— Кира Ярмыш (@Kira_Yarmysh) February 19, 2024
Peskov subrayó que la entrega del cuerpo de Navalni a sus familiares “no es asunto” del Kremlin. También negó que Putin hubiera reaccionado a la muerte de su enemigo número uno.
Al respecto, el funcionario calificó de “groseras” e “inaceptables” las afirmaciones vertidas por los líderes occidentales que responsabilizan al Kremlin del fallecimiento del opositor.
Las autoridades rusas se negaron por tercera jornada consecutiva este lunes a entregar el cadáver del líder opositor ruso a la familia. Navalny falleció repentinamente el pasado viernes en una prisión ártica.
En tanto, la portavoz Kira Yarmysh dijo que a la madre y los abogados de Navalny “no se les permitió” entrar en la morgue después de llegar “temprano” este lunes, según un comunicado en X, que cita CNN.
El Comité de Instrucción de Rusia informó a la madre del opositor que “la investigación se ha prolongado”.
Muere repentinamente en prisión el opositor ruso Alexéi Navalni
“Se desconoce por cuánto tiempo puede prolongarse. Por el momento, las causas de la muerte ‘no han sido establecidas’. Mienten, ganan tiempo y ni siquiera lo ocultan”, añade el equipo del opositor.
Los aliados de Navalny acusan directamente a Putin de ordenar su asesinato en la prisión ‘Lobo Polar’ a la que fue enviado en diciembre pasado tras lanzar una campaña contra la reelección del jefe del Kremlin.