Nicolás Cabrera
La marcha contra el G20 cambió el paisaje de la ciudad de Buenos Aires. 25 mil uniformados de Gendarmería, Policía Federal, Aeroportuaria, Prefectura y fuerzas armadas se desplegaron en nombre de la seguridad. Del otro lado de las vallas, 70 mil personas de organizaciones, instituciones, partidos políticos y ONGs marcharon en repudio al orden global imperante. Estado de sitio y estado de movilización. Instantáneas de una ciudad sumergida en la excepcionalidad.
