México y España viven una inédita crisis diplomática, debido al veto mexicano a la participación del rey Felipe VI en la toma de posesión de Claudia Sheinbaum.
La presidenta electa no extendió una invitación al monarca, tras lo cual el Gobierno español anunció que no enviaría a ningún representante a la ceremonia, que se celebrará el 1 de octubre.
Madrid consideró como una “inaceptable exclusión” el veto a Felipe VI, que es a su vez el jefe del Estado español.
“España y México somos hermanos. Y por tanto nos parece absolutamente inaceptable el que se excluya a nuestro jefe del Estado. Uno que ha participado en todas las tomas de posesión”, consideró el presidente de Gobierno Pedro Sánchez.
VIDEO | El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, califica de “inaceptable” e “inexplicable” la decisión del Gobierno mexicano de vetar al rey Felipe VI en la investidura de Claudia Sheinbaum, y atribuye esta polémica a un “interés político”. pic.twitter.com/6zLGhYOTz3
— EFE Noticias (@EFEnoticias) September 26, 2024
La ministra de Defensa, Margarita Robles, confirmó la postura oficial. No haber invitado al monarca, dijo, “es algo que el Gobierno considera inaceptable y, en consecuencia, se ha decidido no participar en la ceremonia a ningún nivel”, refieren reportes de prensa.
Dentro del espectro político español, el hecho ha generado criterios encontrados, en sintonía con la postura de las distintas formaciones y posturas ideológicas sobre la monarquía.
Mientras la derecha considera una ofensa el veto y exige “respeto” a México, partidos de izquierda han destacado los problemas que en su opinión supone la monarquía para las relaciones internacionales de España.
La razón del veto
La no invitación de Felipe VI no se debe a un hecho reciente. Se remonta a varios años atrás y tiene como protagonista al presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador.
Este miércoles Sheinbaum explicó en un comunicado que no invitó al monarca porque este no respondió a una carta de López Obrador de 2019, quien entonces le pidió oficialmente que España ofreciera una disculpa a los pueblos originarios de México por la conquista.
“Lamentablemente, dicha misiva no mereció respuesta alguna de forma directa, como hubiera correspondido a la mejor práctica diplomática de las relaciones bilaterales”, aseguró la nueva presidenta.
“En cambio, parte de la carta se filtró en medios de comunicación y posterior a ello, el Ministerio de Asuntos Exteriores de España realizó un comunicado de prensa. Hasta el momento, esta circunstancia no ha sido aclarada, ni respondida de forma directa al gobierno de México”, añadió.
Sobre el comunicado del 24 de septiembre del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España. pic.twitter.com/K1rFImrO4p
— Dra. Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) September 25, 2024
La postura de Sheinbaum fue respaldada por López Obrador, quien también este miércoles pidió a España dejar la “prepotencia y arrogancia” para ofrecer disculpas.
“Yo apoyo a la presidenta electa. Si ella ya tiene una postura la suscribo, la respaldo, porque le tengo mucha confianza a la presidenta electa”, aseguró.
Veto, pero no ruptura
Desde que estalló el incidente diplomático, Felipe VI no ha hecho ninguna referencia a la demanda de López Obrador y se ha limitado a resaltar los vínculos de España y los países iberoamericanos.
En su momento, el Gobierno de Pedro Sánchez lamentó profundamente que se hiciera pública la carta en los medios y rechazó “con toda firmeza” su contenido, recuerda EFE.
“La llegada, hace quinientos años, de los españoles a las actuales tierras mexicanas no puede juzgarse a la luz de consideraciones contemporáneas”, alegó entonces Madrid.
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Cinco años después, México ha reavivado la polémica con el veto al rey.
No obstante, la propia Claudia Sheinbaum negó que impulse una ruptura de relaciones con España luego de tomar esa decisión y que en consecuencia el Gobierno español se negara a enviar un representante a su investidura.
“No, ¿cómo creen? (que se rompieron las relaciones), pero necesitamos respeto”, afirmó luego de ser cuestionada este miércoles por el tema, apunta EFE.
El veto al rey y sus resonancias marcan un nuevo momento de tensión bilateral entre ambos países desde que López Obrador declaró en febrero de 2022 una “pausa” en las relaciones bilaterales.
Entonces, el mandatario saliente acusó a las empresas españolas de supuestos abusos en México, en particular en el sector energético, recuerda la agencia.
(Con información de medios internacionales)